𝐂𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚𝐦𝐞 𝐮𝐧𝐚 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚 [one shots/Shalt]

HISTORIA DE INVIERNO

"las palabras también lastiman", es una frase que llevo en mi memoria, es como un tatuaje que se quedará impregnado para siempre en ese sitio, es doloroso y a la vez imposible de ignorar pues describe perfectamente lo que muchas personas que como yo, han sufrido de perder a ese algo o alguien querido por una estupidez.

Por qué eso es algo que llevo conmigo, es parte de mi pasado y me ayudó a formarme como soy ahora, no digo que sea bueno, al contrario, es horrible, pero si no fuera por eso jamás me hubiera dado cuenta de tantos errores que cometí, errores que ahora ya no tiene remedio, la solución estuvo presente justo cuando empezaron y yo la dejé ir, como un cubo de hielo que se deshace entre mis dedos, como agua fluyendo entre ellos tan rápido que olvide tomarla cuando aún podía. Se me escapó tan rápido que no me di cuenta hasta ya tarde, busco el perdón sin encontrar más nada.

Todo fue mi culpa.

De verdad que me siento un idiota.

Mi historia comienza en un invierno, el más frío de todos a mi parecer, aquel mismo día cumplía tres años de compromiso con mi pareja. Un chico, veintidós años, con la personalidad más dulce y optimista del mundo, cuanto le amaba y le amo aún. Cabe aclarar que yo también soy un chico.

«nunca nos importo que pensara la sociedad de nuestra relación»

La relación más perfecta que jamás llegue a imaginar, que jamás espere tener. Era como un cuento, una fantasía algo hermosos que simplemente no se podía describir con palabras, por qué "perfecto" le queda corto.

Era una ilusión preciosa que me encantaba halagar con frecuencia.

Fue mil veces mejor que eso. Ni siquiera el amor de Romeo y Julieta llegó a ser así de grande. Quiero pensar.

Teníamos problemas, como cualquier pareja, al igual que momentos en los que las palabras sobraban para describir el sentimiento que envolvía a ambos. Estos últimos eran mucho más frecuentes.

«nuestro amor era como el fuego, jamás se apagaba, las ganas del otro continuaban y mucho más intensas si es que pasaba mucho tiempo sin vernos, nuestro corazón palpitaba con ferviente deseo siempre que estábamos juntos»

Los problemas no pasaban de malos entendidos o discusiones infantiles por cosas insignificantes que después nos hacían reír. Nos amabamos tanto como para durar una pelea que nos impidiera ver al otro por días.

«pero aquel día...»

Un día que quedó grabado en mi memoria, las cadenas del pasado que no me dejan continuar con mi presente normalmente. Se siente como cada paso aprietan más mis brazos y pies, me lastiman y me rompen.

Siento estrujar mi corazón en una mano con fuerza, es doloroso aunque reconfortante por qué muy en el Interior estoy conciente de que es lo que merezco por ser tan idiota.

Un peso que llevo cargando, una condena que voy pagando con cada segundo de sufrimiento, de existencia.

O quizá con el mismo suceso.

Ese que marco mi vida, mi pasado. Cambio bruscamente la manera en la que veía el mundo.

Por que ese día mi mundo desapareció, los colores fueron absorbidos y en su lugar quedó un mundo monocromático, justo como lo veía antes de llegar a conocerte. Un negro oscuro y triste.

Un lienzo en blanco sin color, sin brillo.

«por que tú eras quien ilustrada aquel lienzo en blanco, tú eras el pintor que le daba vida y razón a cualquier obra, incluso a mi»