El ABC de un embarazo.

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G de goma de mascar(?)

Los impulsos de Valt con la llegada de la nueva etapa del embarazo eran como una bomba de tiempo y ya no bastaba con sólo cuidar las palabras con las cuales se dirigían a él. Necesitaban ser más precavidos y para ello Shu había desarrollado una nueva técnica para controlar sus disparos hormonales.

Aquella mañana había llegado al departamento donde estaban viviendo, con una bolsa bajo el brazo. El menor lo recibió con su típico seño fruncido y el ahora tradicional:"¿¡Dónde estabas!?" Que no faltaba por más que le repitiera a dónde iría antes de salir.

—¿Qué es esto?—preguntó Valt, acercándose a la bolsa que su pareja había dejado sobre la mesita de centro.

—¿Eso? Es para ti, ábrelo—respondió Shu desde la habitación.

Valt le miró con duda un rato, sin embargo se resignó a su curiosidad y con sus manos empezó a sacar una caja de la bolsa.

—¿Goma de mascar?—interrogó nuevamente, sosteniendo la caja en sus manos—. ¿Para qué?

—es para ti—repitió Shu sonriéndole llegando hasta él—. Ahora cada que te molestes y tengas ganas de romper algo masca eso...—sonrió sintiendo poco después el impacto de la caja sobre su rostro. El lado positivo era que Valt le había hecho caso y se encontraba de brazos cruzados con el dulce en la boca.

✧H de hipocampo.

—oye Valt...

Esos días Free y Cris había llegado de visita, para ver cómo iba el desarrollo del bebé y llevarle uno que otro regalo que la chica había insistido en comprar para cuando ya estuviera en el mundo. Le llenaba de ilusión por haberse autoproclamado su tía.

Pues bien, mientras ella y Shu se encargaban de la comida Free y Valt se había sentado en la sala para hablar sobre el BeyBlade, tema que dejaron de lado cuando terminaron viendo un documental sobre la vida marina.

—¿Qué?—preguntó no brindándole la mayor atención.

—¿Sabías que con los caballitos de mar, los machos son quienes quedan embarazados y no al revés?

—...


I de imaginación.

Shu alguna vez imagino que sí esa situación se daba sería después de tener una relación formal con quién en ese entonces consideraba su mejor amigo.

Es más, había imaginado tantas veces aquel escenario de ensueño que le sería tan fácil como poder sumar dos más dos, explicar a paso detallado cada fragmento del mismo.

Había imaginado que se confesaría en San Valentín, porque a su parecer era un momento perfecto. También había considerado hacerlo en el cumpleaños del Aoi pero lo descartó en el instante donde una idea nueva surcó su cabeza.

Había imaginado también todas las citas que tendría, los lugares que le mostraría y todas las palabras preciosas y cargadas de afecto que le dedicaría en las mismas. Una diferente, una por cada sentimiento y éxtasis que lograba hacerle sentir.

Había imaginado también que se mudaran juntos después de que él le propusiera estar juntos hasta que la muerte los separara, en su cumpleaños. Cosa que en su imaginación Valt aceptaría después de casi ahogarlo con un abrazo. Que quizá y posterior a su boda tendrían su primera vez en un ambiente pleno donde sólo ellos dos y la Luna fueran testigos de su cariño.

Y para ese entonces ya vendría siendo momento de formar una familia. Aunque le daba más sentido al hecho de adoptar por sobre el de tenerlo ellos mismos.

𝐂𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚𝐦𝐞 𝐮𝐧𝐚 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚 [one shots/Shalt]Kde žijí příběhy. Začni objevovat