No tan cerca...

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Narra Aitana:

AITANA: No tan cerca...

CEPEDA: Necesito estar contigo, estas mal.

AITANA: Porque...te besaste...con ella (dije entrecortadamente ya que no podía hablar bien).

CEPEDA: No fui yo te lo juro.

AITANA: Cepeda...

CEPEDA: No me llames así por favor.

AITANA: Me...quede...un...rato...ahí...os...vi...(dije llorando).

CEPEDA: No es lo que crees de verdad, déjame explicarte.

AITANA: Eras...mi vida...sin ti una parte...de mi se muere.

CEPEDA: Yo te quiero, no me alejes de tu vida por favor (dijo cayéndole lagrimas).

AITANA: Te...has alejado tu solo.

CEPEDA: No me digas eso por favor, tu lo eres todo para mi.

AITANA: Vete...vete... (dije gritando).

Las enfermeras llegaron y lo sacaron a la fuerza, a mi me dieron el alta ya que solo había tenido un ataque de ansiedad.

Llegue a mi casa y me deje caer en el sofá, encendí el teléfono y tenia muchas llamadas perdidas, 3 de Ana, 3 de Amaia, 3 de Roi, 3 de Mimi y 3 de Luis. Me puse a llorar como si no hubiera un mañana, él era todo para mi y me había fallado.

Llegaron mis padres y me vieron en ese estado, corrieron a abrazarme, me avisaron que Luis les había contado todo y que tenia que escucharlo pero yo no podía, ahora no.

Tocaron el timbre y era Luis, mis padres nos dejaron solos.

AITANA: Cepeda, déjame en paz por favor.

CEPEDA: No puedo Aitana, yo te quiero.

AITANA: Ya no me lo hagas mas difícil, me engañaste.

CEPEDA: Eso no es verdad, déjame explicarte (dijo acercándose a mi).

AITANA: Aléjate (dije nerviosa).

Él estaba demasiado cerca, a centímetros, podía sentir su aliento y yo lo quería, iba a caer en la tentación y no podía, me había engañado.

No pude resistirme, este sentimiento es mas fuerte que yo. Corto la distancia que había entre sus labios y los míos y me beso con esa dulzura que me demostraba que solo me quería a mi pero yo ya no le creía nada.

Nos separamos por falta de aire, nos miramos y nos volvimos a besar con demasiada pasión y ganas acumuladas.

AITANA: No puedo, déjame Luis.

CEPEDA: Te quiero.

AITANA: Y yo pero por favor no déjame respirar y pensar.

CEPEDA: Déjame que te lo explique.

No espere a que me explicara, salí de la casa y di un portazo. Sali a la calle y fui al único lugar en que podía contar con alguien, a la casa de Ana.

ANA: Aitana, dios me tenias muy preocupada.

AITANA: ¿Sabes lo que paso?

ANA: Si me lo conto Luis y me lo explico todo, no fue su culpa.

AITANA: Los vi.

ANA: ¡Oye! Luego fui a ver a Miriam y coincidió con la historia de Luis.

AITANA: ¿Cuál es la historia?

ANA: Mira, tengo una mejor idea.

AITANA: ¿Cual?

ANA: Te voy a dar las llaves de mi casa del campo vale y allí vas a estar tranquila por unos días, universidad no tenemos ya lo sabes y en la academia yo te cubro de verdad.

AITANA: Gracias Ana (dije abrazándola).

ANA: Eres una persona muy importante en mi vida, si tu estas mal yo estoy mal.

Me dio las llaves, avise a mis padres que les pareció genial la idea y llegue a esa casa que por fuera era hermosa.

Entre y también era hermosa, con mucha clase y mi habitación era grande, me quedaría unos días solo para que pudiera pensar.

Observe cada rincón de la casa y era genial, Ana nunca me había hablado sobre este sitio pero esta casa es hermosa.

Me senté en el sofá y me puse a llorar mientras miraba la tele, no podía parar de recordar a Luis besándose con Miriam.

¿PUEDE SER?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora