¿PUEDE SER?

¡FIESTA!

Narra Aitana:

ANA: Este me voy a poner yo.

Ahí seguíamos media hora mas tarde eligiéndole el vestido a Ana, yo opte por ponerme un vestido negro (si me encantaba el negro) estrecho y con la espalda rodeada de lazos con unos tacones negros de brillos y el pelo suelto con mi flequillo perfecto.

Después de mucho tiempo que pareció una eternidad Ana opto por ponerse un vestido escotado negro con lentejuelas y unos tacones negros demasiado altos.

Nos fuimos a una discoteca con mucho ambiente y por lo que nos habían dicho muy buena música, enseguida entramos empezamos a bailar, a menear las caderas y a beber chupitos.

Cuando estábamos muy bebidas y ya casi no sabíamos lo que hacíamos, nos fuimos en taxi a la casa de Ana.

ANA: Me mareo (dijo corriendo al baño).

AITANA: Mañana...me tengo que levantar temprano.

ANA: (Cuando termino de vomitar) ¿Para que?

AITANA: Para ir a despedir a mis padres.

ANA: ¿A donde se van?

AITANA: Solo se que es un viaje de negocios y que estarán fuera por una semana.

ANA: ¿Por qué no vas con Luis a despedirlos?

AITANA: No se lo he dicho, no me he acordado.

ANA: Vete a casa de Luis.

AITANA: Voy a llamarlo mejor (dije sin hablar muy bien por el efecto del alcohol).

ANA: Vale (dijo tirándose al sofá).

LLAMADA AITANA CON CEPEDA.

Aitana: Luis...

Cepeda: Dime Peque ¿Estas muy bebida, verdad?

Aitana: Un poco solo (dije riéndome).

Cepeda: Si ya lo veo (dijo riéndose).

Aitana: Quería decirte que mis padres mañana se van a un viaje de negocios.

Cepeda: ¿Cuánto tiempo?

Aitana: Una semana, mañana temprano voy a despedirlos ¿Vienes conmigo?

Cepeda: Claro que si peque.

Aitana: Mañana me recoges en casa de Ana vale

Cepeda: Vale, te quiero, duerme bien.

Aitana: Yo también te quiero amor.

FIN DE LLAMADA.

Mire a Ana y ya estaba durmiendo, le eche una manta por lo alto y yo me tire a dormir al sofá porque no creía que pudiera llegar a la cama.

AL DIA SIGUIENTE.

Tocaron el timbre y yo maldecí un millón de veces el timbre de la puerta de Ana, tenia un dolor que no podía mas y ese chisme sonaba demasiado fuerte.

Le tire a Ana un cojín para que se despertara, lo que funciono y fui a abrir la puerta.

AITANA: Hola, buenos días (dije besándolo) No hables muy fuerte vale.

CEPEDA: Buenos días amor (dijo bajito y besándome).

AITANA: Me duele mucho la cabeza.

CEPEDA: Lo se ¿tomaste mucho?

AITANA: Demasiado.

CEPEDA: (riéndose).

AITANA: Ana despierta (dije gritándole al oído que me dolió mas a mi que a ella pero merecía la pena por molestarla).

ANA: Aitana, estas mal de la cabeza ¿O que?

AITANA: Me voy a despedir a mis padres, vale.

ANA: Vale, luego hablamos chica mala.

AITANA: Hasta luego.

CEPEDA: Adiós Ana.

ANA: Hasta luego, Cepedi, dile a Roi que venga si lo ves por favor.

Nos fuimos los dos y llegamos a mi casa en lo que canta un gallo. Mis padres nos recibieron y yo me eche a llorar enseguida, Luis me consolaba pero yo nunca había estado tanto tiempo sin ellos y los quería mucho aunque últimamente no estábamos muy juntos no era lo mismo que no verlos en una semana.

BELEN: Hija, vamos a llegar pronto, no llores (dijo ella con los ojos rojos).

AITANA: Os quiero.

COSME: Y nosotros a ti mi amor (dijo abrazándome).

CEPEDA: Yo también quiero un abrazo.

BELEN: Ven aquí hijo.

Hay estábamos los cuatro abrazados, mis padres se fueron y yo me quede llorando y con un dolor de cabeza impresionante.

CEPEDA: Aitana, escúchame, van a volver.

AITANA: Lo se.

CEPEDA: Yo estoy aquí, peque.

AITANA: Te adoro (dije tirándome encima suya).

CEPEDA: Yo también (dijo abrazándome).