DESTINADA A TI©

Capitulo 39.

Tras separarnos por falta de aire, Jake me miró con una sonrisa para luego abrazarme, rodeé mis brazos en su nuca y aspiré su loción con gusto mientras lo miraba.

— Todo marchará bien, te ayudaré con la elección de personal y lo que haga falta por hacer. — Acarició mi mejilla.

— Agradezco todo lo que estás haciendo por mi Jake, valoro mucho eso. —Admití suspirando.

— No es nada Kay, verás que todo estará bien una vez nos marchemos a Londres. — Me miró levemente y sonrió.

Sabía que adaptarme a Londres no sería fácil, pero debía admitir que sonaba fenomenal la idea de conocer otro ambiente y sobre todo otro estilo de vida, aunque no sería mucha la diferencia, inicialmente estaría en la casa de Aliah y Paul, ya después me independizaría para vivir sola o junto a Jake.

El día transcurrió bastante rápido, Jake tuvo que salir junto a mi hermano para arreglar un pequeño problema en la empresa con una de las máquinas de imprenta, me acomode en mi cama un poco incómoda y mire al techo.

Debía escoger que me pondría para el brindis, me levante con pereza y mire mi closet, aún no tenía idea de cómo vestirme pero debía hacerlo rápido ya que eran las 6:00 de la tarde, decidí tomar un vestido sencillo color azul marino en satín y unos tacones blancos, entre a la ducha y me despojé de mi ropa dándome un baño de agua tibia, una vez salí tome mis cosas y me vestí rápidamente.

Solo me faltaba el maquillaje, salí del baño y poco después tocaron a mi puerta, decidí abrir y mire a Hannah del otro lado con un rostro no muy bueno.

— Kayla, necesito hablar contigo. — Comentó ella entrando.

— ¿Que sucede Hannah? — Cuestione con curiosidad al ver su cara.

— Es la prensa. — Espeto sería. — La arpia de Abbigail dio una entrevista cuando salió de la gala. — Me miró decepcionada y me extendió el aparato.

Tome su celular y mire la pantalla, en ella se podía ver como Abbigail hablaba de la relación que tuvo con Jake y como yo quedaba como la zorra que se había metido en la relación en la entrevista, mi reputación quedó por el piso ya que los medios se encargaron de hacerme quedar como la niña mimada de los Harrison.

— Aún no puedo creer el alcance que puede tener esa mujer. — Comente con ira. — No entiendo porque hace todo lo que puede para estropearme. — Pegue un puño sobre una almohada.

— Lo hace porque no entiende que Jake ya no la quiere, no debes lamentarte Kayla, sabemos que Jake empezó a salir contigo cuando ellos terminaron. — Intervino Hannah tomando mi mano.

— Lo se, pero ella no descansará hasta verme derrotada y humillada, tengo que irme lo más rápido posible de Boston, por un tiempo muy prudente antes de volver. — Tome mi frente con mis manos y la masajee.

— Concuerdo contigo Kay, es mejor que te marches un tiempo mientras las cosas se calman, al menos tendrás en qué ocuparte mientras estás en Londres. — Espero Hannah con un poco de preocupación.

Asentí y suspiré hondamente antes de volver a mirarme en el espejo, Hannah me ayudó con el maquillaje mientras cepillé mi cabello en ondas pronunciadas.

— Estas lista. — Sonrió Hannah. — Te vez hermosa Kayla, Jake se irá de espaldas. — Espeto con una chispa de emoción.

— ¿Tu crees? — Cuestione nerviosa. — Quiero estar linda para el.— Admití sonrojándome.

Ella asintió y sentí como mis manos empezaron a sudar, mi corazón palpitaba a mil por hora y suspiré varias veces para calmarme, por fin después de varios intentos lo logre.