❀ live ❀『 Kth +Jjk 』

❀Cartas anónimas❀

Jungkook nunca le había dicho quién era la única persona que le mandaba flores.

Tampoco le había dado alguna de las notas que los ramos tenían.

Así que cuando a la enfermera le dejaron de gustar los ramos secos alrededor de su camilla, dijo que los tiraría.

Taehyung le pidió todas las cartas y dedicatorias que tenían.

Cuando tuvo una pequeña pila de papeles y cartas en sobres de distintos tamaños, se dedicó a leerlas.

"Espero que te recuperes" decía la primera de un lado, al no encontrar firma o algo, dió vuelta el papel "...en todos los sentidos".

Taehyung frunció el ceño, confundido.

No había firma, solo es frase en una caligrafía mediocre.

"Espero que no me odies" decía la segunda nota.

Taehyung comenzó a pensar a quién podría odiar, pero no se le ocurría ni una persona que le llevará flores y a la vez, él despreciaba.

"No tienes porqué seguir el camino fácil" decía la tercera.

Mierda.

Las notas cada vez se hacían más y más profundas.

Supo que era una persona que él conocía muy personalmente, con eso, se quedaba con unos pocos candidatos, él no era de llevarse con muchas personas.

Taehyung supo porque Jungkook había dicho que eran de la misma persona, solo le bastaron unas pocas cartas para ver que todas tenían la misma caligrafía mediocre.

El último era un sobre, comenzó a leer la carta con una pequeña certeza de quién era su único visitante.

Aunque esperaba que no fuera ese idiota.

La leyó conteniendo las lágrimas de enojo.

Supo quién era, acertando con su creencia, cuando al final de la nota vio el dibujo de una cara sonriente.

Con la lengua afuera y los ojos como un conjunto de líneas horizontales amontonadas.

Lanzó las cartas lejos.

¿Cómo se atrevía el idiota de Jimin a enviarle flores y cartas? ¿Y pedirle que no lo odiara? (Aunque no era la primera vez que lo decía)

Taehyung pensaba que todo era culpa del idiota.

De no ser por él, SeokJin estaría vivo.

De no ser por él, ellos estarían juntos.

Taehyung lloraba cubriendo su rostro con la mano del suero, la única que tenía libre.

Paso varios minutos así hasta que unos brazos sobre sus hombros lo hizo reaccionar.

Jungkook había aparecido, de nuevo, en su cuarto.

El castaño frotaba la espalda de Taehyung, él hundió su rostro entre el cuello y el hombro del chico.

Por alguna razón, se sentía seguro con él, a pesar de que se conocían solo por poco más de una semana, Jungkook había sido el único apoyo de Taehyung.

—Si quieres hablar de algo, puedes contar conmigo —Jungkook hablo bajo, sentado frente a Taehyung, quien seguía con los ojos rojizos, pero su miraba volvía a ser lúgubre, como cuando lo encontró en la primera noche y le había dicho que lo único que esperaba era morir.

Taehyung negó.

—Preferiría que me distraigas con algo.

Jungkook ladeó la cabeza, luego suspiró un poco.

—Yo... una vez me preguntaste porqué siempre estaba en el hospital —Jungkook comenzó a acomodar su pelo, Taehyung creía que lo hacía porque se ponía nervioso—. Puede que... puedes ir a conocer a mi hermano.