Danza De ángel [ChenMin]

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Cuando el sol iba saliendo nuevamente, el castaño y el rubio iban llegando a un bosque hermoso. El menor de los dos se había quedado dormido, así que el otro lo despertó una vez que había acomodado el auto cerca de una pequeña cabaña.

Aquella cabaña la había comprado en sus años de estudiante, junto a Sehun y Chanyeol; era algo así como su guarida secreta para cada vez que hacían reuniones o quisieran huir de casa. Aunque, hace como 3 años que no la habían visitado debido a su vida tan acupada como adultos.

-¿Dónde estamos?

Cuestionó MinSeok mientras se dedicaba a ver a su alrededor. El paisaje le parecía hermoso, el olor a pino era fuerte y fresco, cosa que le encantó de inmediato porque le hizo sentirse relajado, lo que le daba un toque aún más hermoso a todo era el amanecer que comenzaba a iluminar las verdes hectáreas, así como las preciosas flores que les rodeaban. Era como un sueño, no creyó que hubiera un lugar así de hermoso.

-Estamos en mi lugar favorito.

JongDae le indicó que entraran a la cabaña, así ambos descansarían un rato y luego podrían salir a pasear por ahí, quería mostrarle muchas cosas a su ex-alumno, cosas que le traían buenos recuerdos.

-¿Quieres tomar un baño? Hay ropa guardada de Chanyeol y Sehun, podría buscar algo que te quede.

Le explicó, aunque dudaba encontrar algo adecuado a su estatura con la enorme comparación de esos dos postes. La última vez, él no había dejado su ropa debido a que había peleado con esos dos, diciéndoles que nunca más volvería ahí, siendo todo un dramático; aunque al día siguiente arreglaron las cosas y siguieron con su amistad de siempre.

-Ummm...está bien, me vendría bien refrescarme.

El castaño fue a preparar el baño, indicandole al otro que podía hacer lo que quisiera en lo que él regresaba.

Y así fue, el rubio comenzó a caminar por la cabaña, era cómoda; se conformaba de una sala pequeña, un comedor para cuatro personas, una cocina, al parecer un cuarto de baño, y por último recorrió un pasillo donde se encontraban tres habitaciones, cada una tenía un letrero.

El primero, tenía el nombre de Park Chanyeol y un tigre dibujado a su lado. El segundo, tenía el nombre de Oh Sehun, en vez de tigre tenía dibujado un lobo. Y por último, estaba el de Kim JongDae, quien tenía un dinosaurio muy gracioso a su lado. Se preguntaba cuántas cosas habrá vivido el otro en su juventud en esa curiosa cabaña.

Escuchó a JongDae llamarle desde el cuarto de baño, indicándole que ya estaba todo listo. Echó un último vistazo al letrero con el dinosaurio y pasó sus dedos sobre éste, para luego ir a donde se encontraba el nombrado.

Una vez ahí, le dijo que había encontrado ropa cómoda y se la entregó, luego lo dejó solo para que se duchara en paz, yendo hacia la sala y poniéndose a leer un libro que tenía por ahí arrumbado.

Transcurridos unos minutos, salió como nuevo de ese baño, realmente necesitaba refrescar tanto el cuerpo como la mente.

Buscó a JongDae, y lo vio sentado en un pequeño sofa leyendo muy concentrado un libro. Se veía realmente hermoso así de tranquilo y concentrado, su corazón nuevamente comenzó a acelerarse.

-¿Listo?-Preguntó cuando notó la presencia del otro ahí, aún sin quitar su vista del absorbente párrafo de aquel libro.-¿Ahora qué quieres ha...?