Cuando ya estabamos en el avión, yo me senté con Coral y juntas nos vimos dos películas de Harry Potter mientras los chicos hablaban de negocios y en fin... Anastasia y Betty cotilleaban. Gracias a que pagaron un avión privado fuimos muy cómodas.
Llegamos en la noche y ¡adivinen qué! Estamos en París. Siempre he querido viajar a la ciudad del amor.
Mientras Coral y yo babeamos por la ciudad, los demás entraron al hotel sin siquiera admirar las vistas. Malditos ricos acostumbrados a viajar.
Cuando por fin entramos a recepción nos reunimos todos juntos. Los empleados llevaron nuestras maletas a las respectivas habitaciones y para mi no tan grata sorpresa, yo dormiría con Jacob, Coral con Erick, las dos brujas juntas y los dos vampiros también.
En el camino del restaurante a la habitación, todavía no le había dirigido la palabra a Jacob, pero a él no le importaba mucho al parecer.
De verdad que poco le importo.
– Cariño, te vuelvo a recordar que puedo escuchar tus pensamientos – me volteé y él estaba mirando su móvil.
Sacó las llaves de la habitación y cuando entré juraría que puse cara de ver una bañera llena de chocolate derretido y bombones.
La habitación más lujosa que me haya podido imaginar y además tenía unas vistas increiblemente perfectas hacia la torre Eifel.
Sentí que Jacob me agarró de la cintura y aspiró mi aroma y me llevó hasta la cama. Yo estaba tan sorprendida de sus cambios de humor que no me dí cuenta cuando empezó a besar su marca haciéndome retorcer de placer.
Me dejé llevar mientras me quitaba la chaqueta y me acariciaba el cuerpo. Me hizo girar sobre mi eje para estar frente a frente y me besó. Me besó de una manera sensual, linda y placentera. Él me estaba creando sensaciones que nunca antes había sentido.
Así prosiguió a bajarme la cremallera del vestido.
–Jacob, no estoy muy segura de esto...–.
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Estúpida Humana
WerewolfÉl es un chico malo, imponente, fuerte y sobre todo un Alpha ejemplar. Ella es una adolescente, que no se deja dominar. Su destino es estar juntos.
