Soukoku One-shots

Trágica historia de amor

Chuuya y Dazai se quedaron al final de clases para limpiar el salón ya que eran los encargados de eso esta semana. Chuuya barría y Dazai limpiaba la pizarra, cuando Dazai terminó volteó hacia Chuuya y con una sonrisa comenzó su actuación para ver si Chuuya captaba el la referencia y le seguía el juego.
(aquí pueden poner el video)

-Chuuya...eres el chico más lindo en Yokohama.- Claramente el diálogo original no era así pero lo estaba adaptando.

Chuuya dejó de barrer y miró a Dazai confundido por unos momentos hasta que recordó aquel vídeo que les causaba gracia y le siguió el juego.

-Gracias señor Osamu.- Dazai caminó hasta quedar a unos pasos en frente de Chuuya y le extendió la mano.

-¿Podría acompañarme a la misteriosa boda de hoy?.- Chuuya estaba por reírse pero respiro profundamente y se dio la vuelta dándole la espalda a Dazai.

-No.

-Pero...pero... Chuuya, yo te amo.- Chuuya se volteó y con una sonrisa dijo.

-Yo...también te amo... TE AAAAAAMMOOOO.- gritó con un ligero sonrojo en sus mejillas.

Ninguno de los dos se dio cuenta cuando Atsushi, uno de sus amigos, se asomó por la ventana y se quedó observándolos.

-¡Cásate conmigo Chuuya!- Dijo con emoción.

-No.- Chuuya cerró los ojos y giró su cabeza a la derecha.

-¡¿Por qué?!- Preguntó mientras se acercaba más a Chuuya.

-Yo...yo no te amo.- Respondió a punto de reírse.- U-upssiss.

-Chuuuuuuyyaaaaaaa-achu.- Se limpió la nariz después de haber estornudado, ese pequeño estornudo hizo que Chuuya soltara una risilla.

-Estoy enamorado de alguien más.- En ese momento llegó Akutagawa y si posicionó a lado de su novio Atsushi.

-¿Qué están haciendo?.- Preguntó mientras abrazaba a Atsushi por la cintura y apoyaba su cabeza en el hombro del contrario.

-No lo sé, desde hace rato están así.

-Hmm.

volviendo con Chuuya y Dazai.

-¡¡Quién es es hombre!!.- Gritó agitando los brazos.

-El...

-...

-Es...

-...

-Tú.

-¡¡Cásate conmigo Chuuya!!.- Dijo emocionado.

-No.

-¡¡¡Chuuuuyyaaaa!!!

-Estoy enamorado de tu hermano.- dijo mientras caminaba al locker donde guardaban las cosas del aseo.

-¡¿Fiódor?!, ¡lo mataré cuando lo encuentre!.

Antes de que Chuuya pudiera abrir el locker, Fiodór salió de la nada del locker y camino hasta llegar a Dazai quien junto a Chuuya lo miraban confundidos ¿desde hace cuanto está ahí y que hacía ahí adentro?, fue lo que se pensaron.

-O el te va a encontrar a ti!! 

-¡¿Fiódor?!. preguntaron los dos al mismo tiempo.

Aún con confusión decidieron seguir jugando. Chuuya caminó nuevamente a donde estaban Dazai y Fiódor. 

-¡¡Desde el principio la boda misteriosa se trataba de nuestra boda, Chuuya y yo nos vamos a casar en la boda de hoy y tú no estás invitado!!, ¿quisieras ser mi padrino de bodas?

-... por supuesto hermano, te odio mucho.- esto último lo susurro.

Fiódor tomó de la chuuya de la cintura y caminó a la puerta del salón.

-Adiós hermano, nos vemos en la despedida de soltero.- Abrió la puerta y antes de salir Chuuya volteó hacia Dazai y dijo una últimas palabras.

-Adió señor Osamu, siempre lo amaré.- y la puerta se cerró.

-Chuuya...

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Después de todo el dramatismo todos se fueron a sus respectivas casas, Dazai y Chuuya iban juntos pues la casa de chuuya quedaba un poco antes que la de Dazai.

-¿Tú te habías dado cuenta de que Akutagawa y su novio estaban viéndonos?

-Noup,no me había dado cuenta Chuuya, así como tampoco sabía que Fiódor estaba en el locker.

-Eso sí fue raro.

Ambos rieron y siguieron caminando en un agradable silencio hasta la casa del más pequeño.

Cuando llegaron a esta, los dos muchachos se detuvieron en la puerta, parecía como si quisieran decir algo así que Dazai fue el primero en hablar.

-Bueno, hasta mañana chico más lindo en Yokohama.

Chuuya se sonrojó al escuchar la palabra "lindo", sin pensarlo mucho jaló del saco a Dazai para que quedara a su altura y le dio un beso en la mejilla.

-Adiós señor Osamu.- Susurró mientras se separaba y rápidamente se  metía a su casa dejando a un estático Dazai parado en la puerta de su casa.

Dazai no reaccionó hasta unos segundo después, un sonrojo abarcó todo su rostro y se fue caminando errática-mente por los nervios.