Alone ◦ Draco Malfoy [2]

08. LETTER

[CAPITULO 8]
LETTER

...

Los aires de navidad habian llegado al castillo, y por fin tomaría un descanso lejos de Draco, Pansy, Umbridge y el drama de Astoria. Katherine en varias ocasiones habia querido hablar conmigo pero la había evitado, al igual que a todo el mundo. Me había alejado de todos los que me rodeaban, y sabia que estaba muy mal pero no quería hablar con nadie sobre lo acontecido.

Los toquidos en la puerta de la habitación llamaron mi atención, Katherine estaba de pie junto con un pequeño bolso en su mano. 

-Hey extraña -Dijo en su usual tono -¿puedo entrar? -Preguntó tímida

-Por supuesto Kate -Dije observandola y volviendome para terminar mi equipaje.

-¿no crees que estás siendo muy anticuada sobre cómo guardar tus cosas? -Alcé una ceja esperando su siguiente frase -Hazte a un lado -Ordenó, alcé las manos en señal de estar indefensa y me paré un poco más atrás, entonces sacó su varita y la agitó contra el suelo - "Bauleo" -dijo, entonces todas las cosas comenzaron a guardarse por si solas dentro del baúl hasta que este quedó perfectamente cerrado, mi expresión se volvió de incrédulidad -¿Ves? anticuada.

-tienes que enseñarme a perfeccionar ese encantamiento -Dije bajando el baúl de la cama hacia el suelo -Oye Kate...lo sien...-Ella me interrumpió, -De nuevo-.

-No te disculpes cariño, entiendo tu situación...Pero debes recordar que no estás sola, quiero decir, llevo en tu vida poco más de un año pero creo que sabes que puedes contar conmigo cuando sea amiga, no es justo que vivas un dolor sola, al igual que conmigo, puedes contar con Blaise e incluso con Theodore, estamos para tí siempre, nos importas mucho

- Lo sé..Créeme que lo sé pero todo ha sido tan de repente. Es como si casi estuviera ocurriendo a propósito -Suspiré sentandome en la cama y llevando mis manos a mi cabeza.

-Draco me dijo lo que ocurrió hace poco aquí -Confesó explorando cada rincón de la habitación con la mirada -Espero que solo haya quedado en lo que me dijo y no haya pasado algo más, porque en serio te mataría por no habermelo dicho -Provocó una risa de mi parte y se cruzó de brazos sonriendo, esa era su cometido. Pero no obvié el hecho de sonrojarme.

-¿en serio te lo dijo? -Pregunté intentando cubrir mi cara.

-Soy su prima, y una de sus más grandes confidentes, ¿Esperabas que no me lo dijera? -Touché.- Tenia un punto.

-Sí, tienes razón. ¿crees que estuvo mal? Quiero decir, ya prácticamente no nos dirigimos la palabra, es como si uno no existiera para el otro. ¿Y si no lo hubiera hecho?...-la castaña se apresuró a sentarse a mi lado y tomarme de las manos

-Probablemente no estaría a punto de tomar la decisión que quiere tomar -Mi cara se tornó en una expresión de confusión -En su momento lo sabrás, pero no te arrepientas, tan solo dale tiempo, Draco no es una mala persona, solo tiene un mal pasado gracias a Lucius.

-¿Tiempo? ¿crees que necesito tiempo? -Ella suspiró

-Tú no, pero él sí. Ambos tienen problemas y conflictos que resolver, tú también busca distraerte, no te ancles a lo que sucede entre ustedes, no te quedes en casa estas navidades, ofreceria que estuvieras conmigo pero es una mala idea, ¿por qué no te quedas con las comadrejas? -La observé con mala cara a lo que ella se mordió la lengua -Bien, con los Weasley.

-Lo pensaré Kate...-Dije en un susurro.

-Bien, me conformo con eso pequeña pelirroja. Ahora vámonos, se hace tarde para tomar asientos en el tren -Me tendió la mano y la tomé con una sonrisa -Los chicos esperan abajo.

...

El ambiente en el tren se hizo un poco tenso debido a la presencia de Draco, pero nada que no pudiera controlar, decidi tomar una pequeña siesta hasta llegar a mi destino, al despertar ya estabamos en King Cross, hice lo mismo que a principios de año, pasé desapercibida luego de despedirme de los chicos, y de un "te visitaré" de Katherine. Caminé pesadamente hacia fuera del tren y caminé por el anden con la capucha de mi sueter lila puesta.

En cosa de minutos ya estaba en la entrada de mi casa, me aseguré de que todos los hechizos estaban puestos y entré, todo estaba tal cual lo dejé, las revistas en su lugar el desastre de colores sobre la mesita de té en la sala, rápidamente me dirigí a mi habitación y deposité las cosas sobre la cama, me deshice de la ropa que tenía puesta y decidi tomar un baño

Mi casa, mis cosas...no había nada mejor que estar en mi hogar, en el pasillo colgaban fotos de mi madre y Sirius, de ella sola, ella y Charlie, ella embarazada e incluso algunas fotos de mi niñez.

Al salir lo primero que vi fue la foto que reposaba de Cedric conmigo en la mesa de la noche, la tomé en mis manos y  fue inevitable que algunas lágrimas cayeran por mi mejilla, no entendía por qué en aquel sueño Charlie disfrazado de Cedric me había llamado asesina. Me encargué de abrir la jaula de mi lechuza para que volara un poco y tambien comiera. 

...

La noche se puso sobre mi casa, las estrellas brillaban en el cielo y el silencio de la casa me producia algo de paz, me encontraba en el alfeizar de mi ventana pensando en todo, tenía en mis manos una replica de Orgullo y Prejuicio, había llegado apenas al capítulo 5 pero las situaciones de ambos personajes me hicieron pensar en cómo se relacionan conmigo. 

Entonces, mi lechuza se posó con una carta en el pico a unos centimetros de mis pies, le quité el pequeño paquete con cuidado y fui en busca de una galleta para ofrecerle, cosa que aceptó gustosa y se acomodó mejor sobre la pequeña almohadilla, era un sobre amarillo, con la firma de Sirius por la parte de atrás. Pero...¿Qué necesitaba?

"Querida Annie

Ha pasado un largo tiempo desde la última vez que supe de ti, espero que te encuentres bien. Los Weasleys me han enviado a invitarte a pasar navidades junto a nosotros, en caso de que aceptes enviaré a un elfo por ti, quiero verte pequeña, hay mucho sobre lo que tenemos que hablar, me enteré que alguien intentó matarte hace poco y quiero que hablemos al respecto, no es bueno que te aisles en todo el tema, no estás sola recuerdalo.

Esperando que hayas pasado un excelente período en Hogwarts.

Sirius Black"

¿Tenia algo que perder? No. Así que, ¿Por qué no? Solo serían un par de días, tomé pergamino y una pluma que tenía cerca, y comencé a escribir. Una pequeña mariposa se posó en la mesa donde escribía, sonreí por alguna extraña razón y seguí mi acción

"Sirius. 

Sería maravilloso acompañarlos en estas fechas, envía a tu elfo por mí en la mañana y estaré esperandolo.

Annabelle"