14. SCARS

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[CAPÍTULO 14]
SCARS

...

- "¡Se lo dije! Le dije que no debía ir sola allí" -Escuché a lo lejos, apenas audible aquel chillido.

-"No hay nada que hacer, solo esperar" -Respondió otra persona.

Mi cuerpo pesaba y dolía con tal solo respirar, gemí por lo bajo y me retorcí buscando abrir los ojos. Tenía en la nariz un olor a hierro que supuse era de la sangre, mi sangre.

-"sangre" -pensé, entonces me senté de golpe en la cama donde reposaba con la respiración agitada recordando lo sucedido, Draco, Charlie, Mary Ann...Parecía una pesadilla solamente. 

Giré la vista estudiando donde me encontraba, era mi dormitorio en la casa de la Orden, me moví para levantarme y ahogué un grito al verme en el espejo que estaba junto a la cama, moretones lucían mi pálida piel, extendiéndose por mis brazos y mi cuello, mi cabello estaba enmarañado y las ojeras resaltaban, haciendo lucir mi piel como una vaga obra de arte en tonos fríos.

Cada movimiento hacía que algo se rompiera un poco más en mí. No quería salir de la habitación, no quería tener que dar explicaciones, las lágrimas resbalaban por mi mejilla a medida que cada recuerdo volvía a mi mente. 

La puerta se abrió con lentitud y lo próximo que sentí fueron unos brazos rodeándome con fuerza, escuchaba unos susurros en mi oído mientras me devolvía con lentitud a la cama, me abracé más a Harry mientras él depositaba suaves besos en mi cabello.

-Todo estará bien Annie, lo siento mucho, no debí haber permitido que fueras sola -Quería responderle, decirle que había sido mi culpa pero no salía nada de mí más que lágrimas. Supongo que lo entendió, pues solo se quedó allí conmigo hasta que de nuevo me quedé dormida.

...

- Entonces Annabelle, ¿Puedes contarnos cómo sucedió todo ésto? - Cuestionó Lupin desde un extremo de la mesa, allí reunidos estaba la orden, a mi lado, Harry acariciaba mi hombro buscando calma, suspiré.

-Estaba allí, tomé un baño para relajarme. Iba a irme rápido...y al salir, Mary Ann...ella estaba muerta -Dije con dificultad, recordar la sangre y su cuerpo me hacía querer vomitar -Luego Charlie estaba ahí y luego Draco...-mi voz se quebró y me quedé en silencio. Escuché los respiros profundos de Sirius y de Harry

-Tranquila cariño, toma un respiro -Murmuro Molly tomando mi mano.

-¿Cómo te encontró? - Dijo fríamente Sirius con la mirada fija en una moneda con la que jugueteaba, mi mano casi de inmediato fue a mi cuello y al sentir aquel detalle lo arranque lanzandolo sobre la mesa

-Hace unas noches, tuve una especie de sueño dónde salí a Kensington a ver a Draco porque me había pedido que fuera allí, me entregó eso como un regalo. Charlie me dijo que tenía un rastreador -Todos observaron el inerte objeto sobre la mesa, pero dentro de mi crecía la ira y la decepción.

-Debemos hablar sobre esto Annabelle, ve a descansar, tienes que despejarte.

Salí básicamente corriendo de la sala y subí con dirección al baño, Harry me siguió con discreción pero cerré la puerta del baño detrás de mi y me acerqué al inodoro para sacar todo lo que había en mi estómago, casi de forma repentina las náuseas me habían invadido.

Lave mi rostro al sentirme mejor y me mire al espejo, ya no quería llorar, no quería seguir escapando, mi corazón estaba roto, ya no sabía en quien confiar.

Definitivamente no quería volver a Hogwarts, me sentía mal de cierta manera por las personas con las que estaba, había arruinado el año nuevo, estaban preocupados y enojados, y mi culpa tan solo aumentaba.

¿Qué tal si el próximo ataque era aquí? No sabía que haría si les hacían daño a ellos por mi culpa.

...

Los días se iban rápido, la vuelta a clases estaba muy cerca. Me había tomado el tiempo de estudiar el libro que Sirius me había dado más a fondo, pero de cierta manera eso había causado que me alejara de todos, apenas hablaba con Harry y con Hermione.

No quería pensar en otra cosa, concentrarme en el libro me distraía de toda mi realidad, me pesaba tener que volver a ver a Draco, seguir dando explicaciones y seguir rememorando aquel día. Ignoraba por completo que Charlie seguía detrás de mí, cazandome y acechandome. Quizás solo quería que me encontrara y terminara con esto, dejaría de estorbar y de poner en peligro a los que amaba.

-Annabelle - La suave voz de Lupin llamo mi atención desde el marco de la puerta -¿Puedo entrar? -preguntó.

-Adelante Remus-Susurre, caminó suavemente casi volando hacia el alféizar de la ventana donde estaba y se sentó del otro lado.

-Un lindo atardecer, ¿No crees? -Cuestiono con la mirada en el cielo.

-Lo es -Respondi por lo bajo agachando la mirada.

-Annabelle, no estoy aquí para preguntar lo que pasó en tu casa, se lo que es sentirse así. Conocí a otra persona que estuvo en tu lugar, y con toda la propiedad puedo decir que eres muy fuerte -Mi mentón de alineó con el suyo para observarlo.

-¿Quién sería?

-Tu madre -El frío recorrió mi cuerpo en un escalofrio -Hailey vivió años perseguida por tu padre, la conocí, tal vez no a fondo como Sirius o James y Lily, pero lo hice. Y ella era simplemente asombrosa, a pesar de sus problemas y todo el infierno que vivía, siempre se mantuvo positiva, tenía que cuidar de tí, quiso rendirse muchas veces y esos momentos solo la hicieron más fuerte -Las lágrimas recorrían mi rostro, la extrañaba, en serio la necesitaba ahora.

-Ella fue una gran bruja, más de lo que yo seré -Dije sombría.

-Patrañas, serás incluso mejor que ella. Yo lo sé y confío en ella, quizás es muy duro para ti esto, tan solo eres una niña aun, y no es justo Annabelle. Pero lo único que te pedimos todos los que velamos por tu seguridad, es que te mantengas fuerte.

-No creo poder seguir haciéndolo -La voz se me quebró

-Si podrás, pero tienes que prepararte, y sanar. No confiar en nadie, todos pueden traicionarte y eso no significa que no podrás o que te vencerán. Pelearas, lo enfrentarás y ganarás, y por sobre todo eso -Tomo mi mano y me miró de forma paternal -Pelearemos a tu lado, hasta la muerte.

Las lágrimas se empezaron a descontrolar, pero entre ellas una sonrisa apenas logré esbozar. Crecer sin una madre y darte cuenta que tu padre quiere matarte no fue fácil, tener un pequeño agujero que podrías llamar hogar con personas dispuestas a morir por ti, valía todo.

Y el hecho de tenerlo, solo aumentaba mi miedo de que salieran dañados...

––––––

¡Hola! Por favor no me odien, se que he tardado un montón en actualizar pero perdí la laptop con todos los capítulos y rehacerlos de nuevo en el teléfono es verdaderamente incómodo, sin embargo aquí está. Gracias a todas por su apoyo y sus comentarios, en serio me llenan de felicidad🖤

Alone ◦ Draco Malfoy [2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora