~The Letter~ Jenlisa | Chaesoo

XVII

-Jisoo por favor - hablaba bajo, apenas en un suspiro, no podía contener el aliento. Jisoo sonreía son satisfacción al ver el rostro de la pelirroja

-Estas segura Rosé? Es lo que quiere? - La pelirroja asintió y le dio una pequeña mirada coqueta

-Es lo que quiero - sus palabras estaban cargadas de complicidad. La morena estiro la mano y tomó una de las bolas del estante de feria. Habían empezado a dar un paseo y terminaron topándose con una feria ambulante y decidieron echar un vistazo.

-Tengo que decirte que no tengo mucha puntería, pero lo intentaré por ti - se coloco en posición de lanzamiento y fijo su objetivo en el premio mayor, lograr tirar unas botellas apiladas al final de la estantería para obtener un oso de peluche gigante, cerró uno de sus ojos y calibro la distancia, suspiro y con todas sus fuerzas lanzó la bola que tenia en las manos, Rosé aplaudía y saltaba al lado de ella animándola. - AY SALAUD! - La pelirroja soltó una sonora carcajada.

-Insultas en francés?

-Tiene más clase, mis lecciones de francés tiene que servir para algo - levanto los hombros y tomo otra bola, la lanzó, Rosé reía por lo bajo y mientras Jisoo fallaba una y otra vez, ella no dejó de animarla. - Muy bien, lo siento, me rindo - dejo caer sus brazos a los lados en forma de derrota.

-Puedo intentarlo? - le dio una pequeña sonrisa apenada

-Claro que si! Que mi mala suerte no te contagie, tu puedes - le dijo con un puño en alto. Rosé le dedico una pequeña sonrisa y se giro al chico encargado, tomo una de las bolas que este le ofrecía y negó con un ligero movimiento por el resto. Jisoo levantó la ceja ante el gesto que acababa de hacer, y el chico  tenía un rostro de confusión. Rosé se posiciono para lanzar, puso su pie derecho ligeramente hacia atrás,  giro un poco hacia el mismo lado y se concentro en las botellas frente a ella, pero primero dirigió su mirada a la pelinegra

-Cual es tu color favorito Jisoo?

-Mmm el púrpura - dijo sin entender exactamente, Rosé regreso su mirada al objetivo y le habló al chico

-Quiero el oso púrpura - dicho esto, subió su brazo a la altura de de su cabeza y con un movimiento rápido lanzó la bola, en cuestión de instantes todas las botellas cayeron al suelo, la pelirroja saltaba y Jisoo tenía la boca tan abierta que podría haber tocado el suelo, el chico la veía con cara de incredulidad, se dio la vuelta y soltó el oso gigante morado, con cara de malo, se lo entregó a Rosé, no muy contento de los acontecimientos, está muy sonriente se dio la vuelta hacia una perpleja Jisoo. - Para ti - le tendió el gran oso que apenas y podía mantener alejado del suelo

-Yo... - se sentía avergonzada y terriblemente alagada bajo la mirada y lo recibió mientras sentía sus mejillas arder - gracias. - emprendieron camino en silencio, Rosé llevaba un pequeño paso robótico sin doblar las rodillas, levantando sus piernas un poco más alto de lo necesario y con sus manos entrelazadas en la parte de atrás de su cuerpo, con la mirada en el suelo, se sentía repentinamente nerviosa y no sabía qué decir. - Sabes... - hablaba Jisoo igual o más nerviosa que Rosé, intentaba caminar con el enorme oso entre sus brazos, que no tocara el piso pero tampoco que ella tropezara con él - se supone que debes dejarme ganar en los juegos y ser yo quien te regale el oso - Rosé levanto la mirada y le dio una pequeña sonrisa.

-Es que eres realmente mala con tu puntería  - ambas rieron al unísono

-Lo sé, lo siento - Rosé negó ligeramente con su cabeza

-Esta bien, me dio la oportunidad de darte algo, le pondrás un nombre? - empezaban a salir de la feria y emprendan camino al auto de Jisoo.

-Creo que le pondré Dashi