Samsāra

VI

Aves.
Las aves cantan, debe ser medio día porque el sol es bastante intenso. Él está sentado sobre pasto con flores en su regazo, sus manos arman un pequeño ramo. El aire corre, suave y fresco, alborotando sus cabellos.
Se siente feliz, en paz.

Unos brazos pasan por su cintura y siente es apretado. Ríe, aunque no sabe por qué.

ーShūji...ー murmura entre risas, el beso que recibe en su nuca le provoca escalofríos. ー Volviste.

ー Siempre vuelvo. ー contesta de vuelta mientras le abraza más fuerte. ー Te extrañé.

ーY yo a ti...

ー Quiero dormiiiir ー dice en tono infantil mientras se balancea de lado a lado. ー Vamos a dormir.

ー ¡Es medio día! ー protesta.

ー Entonces quédate comigo hasta que anochezca ー Shuji vuelve a besar su nuca, pasa al cuello, donde los besos se complementan con cortas lamidas. Los cabellos contrarios rozan su mejilla, pero no logra verlos por la posición en la que están.

ーShuji...

ー Estuve trabajando toda la noche. Merezco la atención de mi esposa.ー insiste, con el mismo tono infantil, contrario a sus acciones. Da una pequeña mordida y se aleja para colocar su mentón en su cabeza, esta vez besa su coronilla. ー Y de verdad necesito dormir.

Ambos ríen. 

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Los ojos de Chuuya se abren, mira a su alrededor y descubre está en su cama. Solo.

ーShuji...ー Llama el voz baja con una sonrisa, pero no hay respuesta. ー Shuji...

Pronuncia mientras se levanta, dispuesto a encontrarlo. Entonces se da cuenta: Él no conoce a Shuji.

No conoce a Shuji, pero siente que debería. Murmura el nombre y automáticamente sus labios se curvan en una sonrisa.

Quiere encontrarlo.

Debe encontrarlo.

Necesita encontrarlo.

Él necesita a Shuji porque... 

No.
Él no necesita a Shuji. Ni siquiera sabe quién es Shuji. En su vida ha tratado con alguien que lleve ese nombre.

Un peso se instala en su estómago, era un sueño, no es real.

Quiere llorar. No puede respirar. Su cuerpo de responde. Todo gira. Está perdido. Está solo. Solo como cuando fue un niño, abandonado, rechazado. Esta en un lugar con dos demonios, lejos de su familia, Nathe, la única persona que le ha protegido.  Nunca volverá a verlo. Él va a morir.

ーRespira...ー ordena alguien mientras le toma por el hombro. ー Cálmate, Chuuya. 

ー No puedo... ー jadea con dificultad. La mano de Ranpo se coloca en su nuca y al instante siente se relaja.

ー ¿Mejor?  ー pregunta, la preocupación se refleja en sus orbes verdes.  Asiente sin alejarlo. ー Está todo bien, Chuuya. No estás solo. Todo estará bien, descansa.

La voz de Edogawa le relaja. El demonio le recuesta nuevamente en la cama mientras sus párpados se cierran.

Soñó algo... Algo importante. ¿Pero qué fue?  No desea olvidar, sin embargo, su mente no puede mantener el recuerdo.

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ー Regresarle sus recuerdos puede que no sea la mejor opción.

Dazai esta en el tejado, mirando las estrellas como de costumbre. No se gira para verlo, pero no le extraña si sabe lo que ha hecho.

ー Tiene miedo de mi.

ー Te lo he dicho ya, él no te teme a ti, sino a lo que desconoce, la ideología con la que lo criaron...

ー Estuve a punto de morderlo. ー interrumpe. ー Logré detenerme a último segundo. Incluso lo hipnoticé, Ranpo. He pasado los últimos seis años sin probar sangre humana, es un tiempo corto para alguien como yo, empero pasé más de cien tomándola. Mi cuerpo la necesita. Si no logro controlarme  podría matarlo.

ー O podrías convertirlo.

ー ¿Convertirlo?ー gira su rostro para verle, ha acaparado toda su atención.

ー Transformarlo en vampiro también. Puedes hacerlo, primero debe tomar tu sangre, después tu la suya, hasta matarlo. Despertará siendo como tú.

ー Su alma...

ー La tuya me pertenece por nuestro contrato, además, lo que hicieron Odasaku y Ango te permite caminar bajo el sol.
La suya se perdería, no pertenecería ni al cielo ni al infierno, ni siquiera un punto medio. El sol le rechazaría.

ー Lo condenaría.ー concluye.

ー De alguna manera. Pero también sería inmortal.

ー Es un cazador.

ー¿Eso importa?  Tú también lo fuiste.

ー Nuestra ideología es distinta. Cuando yo cazaba la iglesia no era tan imponente, recién era un grupo pequeño. No me criaron ellos.

ー En ese caso solo necesitas sacar todo eso de su mente. ¿Qué tal borrar sus recuerdos?

ー Quiero a mi esposa, no una marioneta.

ー Complicas demasiado las cosas, Dazai.

ー Así es más entretenido. ー contesta mientras encoje los hombros y la gira nuevamente al cielo.

ーOsamu... Lo que hice esta noche tendrá consecuencias.

ー Ambos sabíamos que era una posibilidad los resultados no fueran favorables, pese a ello no fui a detenerte.

ー ¿Estás listo para afrontarlo?

ー No hay opción, Ranpo. Ya no. Tampoco tiempo.

ー¿Lo saben?

ー Lo saben.ー confirma con un suspiro apesumbrado.