En el Reino de las hadas ♡Yoonmin♡

13. Salvavidas

Sintió un extraño y muy mortificarte peso en el pecho, uno que le aplastaba cada tanto, al igual que manos tocando su rostro y unos labios mojados sobre los suyos. Sin embargo, no podía moverse o gritar.

—Vamos despierta —susurraron en su oido —Maldición necesito a Shawnie

Un sueño...todo había sido un sueño, con ese pensamiento inconsciente se despertó. Abrió los ojos recobrando la consciencia, tomó una enorme bocada de aire y se sentó en un movimiento tan rápido que hizo que su cabeza diera vueltas.

—¿Yoongi? —pregunto a la nada porque lo único que recordaba era haber estado con él y después...a unos ojos claros y un cabello azulado—Sirena

Fue entonces que decidido mirar alrededor, no estaba en la paya, eso era obvio y tampoco creía estar en su mundo. Trago en seco, se encontraba en una cueva buen iluminada por algunas antorchas de fuego en las paredes, el espacio era amplio pero al mismo tiempo pequeño, una cueva circular, el piso estaba lleno de arena blanca y fina, casi parecida a la azúcar glass. En medio de esta se encontraba una laguna, era azul tan clara que podía verse que en el fondo había más de esa fina arena, salvó que está brillaba como si se tratara de residuos de diamantes, en el fondo había una pequeña entrada oscura y llena de agua. El techo era inmenso, cuando volvió la vista a este se quedó petrificado, había grandes y largas estalactitas de cristal, podría ser hielo pero lo dudaba, eran más de un material tornasol.... diamantes. Definitivamente no estaba en su mundo.

Él se encontraba sobre una cama amplia, era cómoda, la cabecera tenía más de ese material diamantado, las sábanas eran blancas, estaba seco, no se encontraba encadenado ni herido.

—El collar —gruño buscando en su cuello pero ahí no había nada.

Se quiso levantar de la cama pero al tratar de hacerlo escucho como el agua de movía.

—¿Hay alguien aquí? —preguntó sintiéndose un idiota —¿Donde estas?

Sabía que estaba en el agua, porque a pesar de que está permanecía en calma había algo que le llamaba a ese lugar, quería ver de cerca pero tenía miedo.

—Estoy loco —suspiro mientras se acostaba en la cama. De un instante al otro se volvió a levantar y ahora pudo ver el cabello azul —Ya te vi —dijo bajando de la cama, no llevaba zapatos pero la arena no le incomodaba. Se acercó poco a poco —Te juro que no te haré nada ¿Tu me salvaste? Si fuiste tú ¿Donde estamos? ¿Puedes decirme?

Se hincó en la orilla de piedra lisa, espero paciente hasta que vio como la cabellera azul emergía, no salió completo, sólo mostró sus ojos claros y parte de su nariz

—Me llamo Jungkook —dijo tratando de sonar tranquilo aunque tuviera miedo —¿Me harás daño?

No contesto sólo le observó curioso -Por favor tienes que ayudarme -se descubrió el pecho mostrando la marca negra —Y debes llevarme a mi mundo. Yo...

Se sintió un inútil hablando con él que sólo le miraba. Recordaba que en el mar le había hablado aunque no confiaba en esos recuerdos que aún estaban borrosos. Jungkook suspiró bajando la mirada y cerrando los ojos

—Sabía que no debía hacer esto ¡Ni siquiera me gusta el mundo exterior! A mí me gusta estar en mi laboratorio con mis instrumentos y libros. ¡Estaba escribiendo un libro cuando esto paso!

Escucho el agua pero no prestó atención —A mi me gusta leer también, papá me daba libros y....eran buenos....sobre un humano que ammm.... él se enamoraba de una mujer que era prohibida y morían al final...no me gustó el final....me gustan los finales felices