29.- Captura mágica

9.8K 1.9K 559
                                    

Sihirli, un mundo lleno de magia y seres poderosos, con características especiales, era un lugar tranquilo para vivir, nadie sabía cómo era que fue creado, no conocían nada más aparte de lo que habían vivido, un mundo que no tenía inicio ni final. Sin embargo, y como en todas las civilizaciones, ellos tenían una vieja leyenda para explicar su lugar en el cosmos. Los Sihirli, eran seres nacidos de la naturaleza, quienes el universo creo, para cuidar del mundo, las estrellas los moldearon y el polvo estelar, les dio aquellas características especiales para que desempeñaran sus papeles sin problema alguno, ellos habían sido los primeros, estuvieron incluso siglos antes que los humanos, entonces, ¿Por qué estos los habían hecho esconderse?

Para un Sihirli, los humanos eran seres que estaban encaminados a la destrucción, a lo largo de los siglos lo habían visto, eran salvajes, por lo que los reyes, decidieron ocultar su mundo prospero, con la esperanza de que esto evitara que los destruyeran a ellos también, los vieron caer, entre desastres naturales, guerras, el egoísmo y la lucha por el poder, haciendo cenizas el mundo que se les habían encomendado a los Sihirli proteger. Fallaron, por culpa de los humanos.

Huían de ellos, aun sabiendo que tenían el poder para exterminarlos, dejaban que martirizaran a su gente, que cortaran sus alas y colas, haciendo lo que quisieran con su sangre. Lo hacían, porque sabían que en algún momento ellos caerían, sin la necesidad de intervenir.

Namjoon era el rey desde que tenía memoria, uno de los primeros seres, quien había construido Sihirli, él fue quien se encargó de unificar a las criaturas, eran diferentes, con propósitos diversos y deseos complejos, pero lo logro, formó un mundo mágico, donde podían subsistir y ocultarse de los humanos sin problema alguno, sin embargo, había peligros que acechaban, cazadores, gente de poder que los quería y usaba y algunos renegados que no se acoplaban a las leyes impuestas.

Por mucho tiempo vio tantas cosas, pero ninguna de ellas le prepararía para ver en aquel estanque no profundo, a su hijo, muriendo.

—Taehyung—susurró al momento que se acercaba, en esos momentos había comprendido la petición de Hoseok, de no perturbarlo.

Se hincó en el borde, Taehyung tenía la cabeza acomodada en una roca musgosa, flotaba, sus ojos se encontraban cerrados, pero cuando escuchó su nombre intentó abrirlos, el color de su cabello había perdido por completo el color, estaba casi gris, su piel pálida perdía la vida y su cola, aquel brillo que le caracterizaba.

—Lo siento—susurró él con una pequeña lágrima que recorría su sien.

Tenía miedo de tocarlo, de acariciar su cabello que parecía tan delgado que podría caerse sin problema alguno, introdujo la mano en el estanque y buscó la suya, sosteniéndola con delicadeza, como si fuera el toque de una pluma.

—¿Qué sucedió? —dijo mirando sobre su hombro a Hoseok quien estaba ahí observando la escena con melancolía, debajo de sus ojos se dibujaban sombras oscuras debido a la falta de descanso.

—Tenía un lazo del destino con aquel humano, él que venía con el cazador—explicó con un nudo en la garganta.

—¿Por qué no dijiste nada Hoseok? —preguntó esta vez SeokJin quien miraba a su hijo con reproche—. Sabes lo grave que es esto.

—Pensé que no era nada—dijo con una mueca—. Cuando Taehyung se despidió de nosotros, antes de ir a la isla, parecía estar bien, pero, cuando le rescatamos...él....

—No Hobi—dijo Shawa con renuencia—. No lo digas, lo prometimos.

Seokjin miró a ambos con una ceja alzada, se tensó por completo. —¿De qué están hablando?

A pesar de la negativa de Shawa, Hoseok sabía qué en ese momento, su padre, era el único que podría hacer algo, se acercó a él, mirando con ojos abiertos, como Namjoon limpiaba las lágrimas de Taehyung, este estaba agitado, en su mente una horrible posibilidad de repente sacudió su interior, porque parecía que era el final.

En el Reino de las hadas ♡Yoonmin♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora