Efecto Mandela [Completa ✔️]

Capítulo VII: La historia de las mil verdades y mil tragedias de Nath.

-No, ¿cómo crees? -contesta luego de unos segundos de silencio.

-Más te vale porque se ven felices, no le puedes hacer esto ahora-expresa mientras observan a Thiago rodear con sus brazos a Vitally mostrándole como lanzar una bola de boliche.

-Ya te dije que no bobo.

Se acercan de nuevo a Vitally y Thiago y pasan un rato jugando.

-Creo que es hora de irnos.

-Si, así tengo tiempo de llevar a Vitally a casa y asegurarme de que llegue.

-Si yo también. Tengo tarea que hacer-dijo apresurada-ah, Thiago necesito hablar contigo antes de que nos vayamos.

-Dame un segundo, ya nos vamos-le dijo a Vitally mientras caminaba hacia donde Nath.

-Oye, ¿mañana temprano estarás disponible?-dice apresurada.

-Si, después de las 11, ¿por?

-Te pasaré a buscar a esa hora, iremos a un lugar.

-Está bien, ¿alguna ropa en especial?

-No, ve como quieras.

-Bueno ya tengo que irme.

-Adiós.

-Ah, por cierto, ¿te irás con Aidan?

-Si.

-Está bien, adiós-dijo mientras se acercaba a Vitally-vamos Vitally se nos hará tarde.

Al día siguiente

Se escuchan gritos; toca el timbre.

Abre la puerta-ah ya llegaste, vámonos-dice cerrando la puerta.

-¿Y esos gritos?

-Aún discuto con mi mamá sobre mi escapada del hospital.

-En realidad estuvo mal que la hicieras preocupar.

-Ninguna lo entendería.

-Oh créeme que yo sí-dijo entre los dientes.

-¿Qué?

-Nada, olvídalo.

-¿Y a dónde vamos?

-A 2 calles de acá.

-¿2?, pero si ahí solo está el área del cementerio y la casa Warlon abandonada.

Lo mira y levanta una ceja.

-Mierda iremos a la casa Warlon, ¿cierto?

-No me digas que le tienes miedo.

-No le tengo miedo, pero es ilegal entrar, aunque esté abandonada.

Saca unas llaves de su bolsillo-ni tan abandonada, ya llegamos.

Abren unas rejas de metal oxidado que dividían la calle del jardín de la casa y entraron.

-Abre pues.

-Cálmate-abre la puerta.

-¡Oh por mis pelotas! -exclama al ver el sitio-esto está más que habilitado.

-Lo habilitamos, luego de que el profesor lo comprara.

-¿El profesor? ¿Quién es ese?

-Dejémosle ese nombre por ahora.

-¿Y qué carajos es esto?, porque parece tener más tecnología que la NASA.

-Le llamamos el centro, aquí llevamos a cabo investigaciones del proyecto X del profesor.