Capítulo L: Desde cero.

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-¿Listo? ¿Quién está listo?

-Cállate y camina.

Entran a una habitación a empujones.

-Es un placer conocernos en persona Thiago Allen-su voz gélida retumba por todo el lugar.

-Esa voz-intuye conocerla al escucharla-¡hijo de perra! -corre con las manos esposadas hacia él.

-Klaus.

Lo golpea y tira al piso antes de llegar.

-Yo tú y no intento eso de nuevo-levanta sus cejas al guardia tras Aidan.

Inyecta su brazo

-¡Auch!

-¿Qué le hiciste? -pregunta respirando agitado desde el suelo.

-Verás, necesito prevenirme, inyectaron nano chips en su sistema, están directamente conectados a un monitor cardíaco, si mi corazón deja de latir, tu amigo muere, ya puedes irte Klaus.

-¿Seguro?

-Si, estos perros solamente ladran.

Asiente con la cabeza y sale del lugar.

-Eres un...

-Ahórrate las maldiciones e ira, te traje aquí por una razón, no puedo deshacerme de ti, por más que lo intente sigues siendo una piedra en mi zapato. Tengo que conocer a este chico, eso pensé, si no puedo contra él me le uno.

Suelta una carcajada-¡Maldito infeliz!, estás loco si piensas que me uniré a ti.

-No te queda nada, mataste a tu mamá, mejor amiga, mandaste a Maxwell a la cárcel, cambiaste a tu novia y estás a punto de cagarla con tu mejor amigo.

-No te atrevas a mencionarlos.

-Contigo o sin ti, esto que ves aquí continuará, tengo miles de científicos en todo el multiverso trabajando para mí, controlando las masas.

-¡Tienes un espectáculo de magia muy mal montado!

-Oh, veo que el amigo no es mudo, ya me estaba empezando a preocupar.

-Tus apariciones-señala con su mano una máquina en la esquina de la habitación-simples hologramas, tus alteraciones-señala un arco metálico al fondo de esta-simples modificaciones temporales, pensé que tenías más poder-dice caminando despreocupado a una de las máquinas-eres una farsa, un cirquero con un espectáculo medianamente bien montado, no eres poderoso, solo eres algo ingenioso.

-¿Qué haces? -susurra desde el piso.

-Cualquiera puede ser tú, admítelo, eres irrelevante y nos necesitas.

Ríe-¿Nos?, te estás creyendo mucho, lo necesito a él-dice mirando a Thiago.

-Nos, eres ingenioso y cuentas con el equipo, si pudieras ya estaría muerto, así que si, nos necesitas.

Se gira-Debo admitir que ha sido difícil.

Señala con los ojos un bisturí en la mesa de su lado.

Se desliza un poco hasta llegar a la mesa, toma el bisturí e intenta quitar sus esposas.

Vuelve a darse vuelta esta vez frente a Aidan-Pero veras-levanta un pequeño control y lo presiona-no imposible.

Cae arrodillado al suelo-¡AHHHHH! -grita al recibir choques eléctricos de sus esposas.

-No veo que seas tan valiente ahora-vuelve a presionarlo, pero está vez durante más tiempo.

-¡AHHHHHHHHHHHHH! -da gritos de dolor mientras se retuerce en el piso.

Efecto Mandela  [Completa ✔️] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora