Capítulo XXVIII: Las soluciones para llegar a casa.

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-Ok, ¿técnicamente deberíamos empezar a investigar para hacer un salto?

Pone sus ojos en blanco-No funciona así Aidan, ni las realidades te quitan lo tonto.

-¿Oye quieres mi ayuda o no?

-Lo siento.

-Ok, ¿cómo pretendes darte cuenta si esto es un salto y estás en una de esas realidades o si todo esto es una ilusión causada por el coma?

-Según lo que hemos investigado es más que solo cuando planteamos teorías acerca de eso, es como si cada vez que estuviéramos cerca de encontrar algo que nos acerque más a descubrir que está pasando, ¡PUM!, entramos en otra realidad y sin la mínima información de lo que hemos averiguado.

-Es muy loco, ¿sabes?, si no fueses mi mejor amigo te juro que estarías en un manicomio.

-También te quiero cabeza de almendra, en fin, descubrimos un lenguaje, lenguaje de tiempo, es lo único que no puede cambiar durante los saltos, pero casualmente no lo entiendo, ni lo escribo, así que tenemos... -clava su mirada en una pared-¡eso es!, el lenguaje de tiempo es lo único que no puede cambiar-entró su mano en el bolsillo derecho de su pantalón.

-¿Qué es eso? -pregunta pintando una expresión de intriga en su cara.

-Es el último pergamino, el que no se pudo descifrar, por estas cosas mataron a Nath.

-Entonces si eso está en su bolsillo, quiere decir que no es producto del coma lo que recuerdas y si no se pudo descifrar quiere decir que es una de las piezas finales y quizá más esenciales para saber de eso. Si me cuentas que cada cosa que los acerca se desaparece o destruye, tal vez ese último era la clave y por eso esa cosa atacó antes de que se pudiesen traducirlo y si es así, solo tendríamos que intentar traducirlo y tendrías la pieza final y atraerías a eso a ti, ¿no?

Abre la boca en señal de sorpresa-Oh por Dios, es cierto, como no me fijé, este salto te hizo más listo man.

Pone cara de confusión-¿No que me puso más tonto?

-No creas todo lo que te digo.

-Foco en esto, está escrito en lenguaje de tiempo, no conocemos a nadie que lea eso.

-En la realidad original, de dónde vengo, había un profesor que estaba obsesionado con eso y si lo que dijo el "monje" sobre que hay muchos en el mundo afectados por esta cosa, él debe ser uno de ellos.

-¿Entonces que esperamos?, hay que ir-dice levantándose de su asiento.

-Eh, Aidan....nunca lo conocí.

-¿Cómo?

-Si, es que ante de que empezara toda esta locura necesitaba información, así que le pregunté a Vitally si conocía a alguien que supiera de eso y me comentó de ese profesor.

-¿Vitally tu vecina rara?

-¿Vecina? ¿Rara?

-Si, la chica que nunca sale de su habitación y parece una ermitaña.

-¿Vive aquí al lado?

-Si, vamos.

Se levantan y se dirigen a la casa de Vitally, al llegar tocan el timbre, se abre la puerta y las expectativas de Thiago crecían a cada segundo.

-¿Vitally?

Pasa su mano colocando un mechón de cabello que se escapaba de su pelo bien recogido, detrás de la oreja-Si, ¿estás pendejo o qué?

-Uhmm, ok, solo quería preguntarte, ¿recuerdas aquel profesor obsesionado con el Efecto Mandela del que me comentaste hace un tiempo?

Aidan le golpea con el hombro al ver la cara de confusión y miedo que portaba Vitally-Mi amigo aquí quiso decir que si de casualidad conoces a algún profesor que esté obsesionado con el Efecto Mandela-silencio-es para una tarea.

Efecto Mandela  [Completa ✔️] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora