CAPÍTULO 4

56 9 5
                                    

La primera vez que vi a Santi tan triste fue cuando murió su perrito, fue un mes después de mi cumpleaños, y Coco, su perrito había durado al menos dos años, recuerdo cuando lo encontramos y adoptamos, nos habían regañado por llegar a mi casa con un perro sucio y oloroso.

̶ ¿Pero qué es ese olor? ̶ Mamá acababa de entrar a la cocina en donde Santi y yo manteníamos a Coco escondido en uno de los cajones, no nos duró mucho la mentira al decir que nada, pues el perro comenzó a intentar salirse y mamá nos apartó para poder abrir el cajón.

̶ ¡Que asco! Esta todo sucio y huele mal, ¿Por qué lo han traído aquí? Sofía este perro podría tener una enfermedad contagiosa, ¿Dónde lo encontraron?

̶ En el parque mami, Coco solo nos siguió después de que le dimos una galleta, y jugamos con él, es lindo y listo, solo necesita un baño y pod…

̶ Espera, ¿Coco? ̶  preguntó mamá mientras intentaba que el perro dejara de oler los cajones de la cocina.

̶  Oh, así lo nombramos Sofí y yo, se nos ocurrió porque…

̶ Santi no quiero saber cómo se les ocurrió, llamare a la perrera para que venga
por él.

̶ ¡NO! ̶ Santi y yo gritamos al unísono.

̶ Mamá por favor, no dejes que se lo lleven, queremos conservarlo, solo necesita un baño, lo llevaremos al veterinario, Santi y yo lo sacaremos a pasear, él se lo
quedara una semana y yo otra, limpiaremos sus eses, por favor di que síííí

Ese día suplique tanto hasta que mi mamá dio su respuesta a favor.

̶ Parece que lo tienen todo arreglado, primero tenemos que hablar con tus padres Santiago, no sabemos si quieren o pueden tener un perro en tu casa.

̶ Llámeles y dígale, y si no quieren, convénzalos, siempre he querido tener un perrito  ̶  Santi ponía sus manos en señal de súplica, veía tanta compasión en sus ojos y miedo de que no aceptarán a Coco.

Los padres de Santi accedieron y aquella tarde bañamos a Coco, y al otro día lo llevamos al veterinario.

El primer mes con Coco fue un poco difícil, pues no se quedaba quieto, creo que le gustaba destruir todo lo que fuera ropa, mi papá no me dejó tenerlo más, pues había destruido unos papeles importantes de la empresa, así que, desde aquel día Santi se lo quedó por completo, y él lo  educó, el veterinario nos dijo que tenía alrededor de seis años de edad pero que estaba en buenas condiciones, no tenía ninguna enfermedad; así pasaron los siguientes dos años y Coco se convirtió en nuestro guardia, hasta que llegó el día trágico en que murió.

̶ ¿Cómo murió? ̶ Le pregunté a Santi, él estaba en su patio trasero, llorando frente a la tumba de Coco.

̶ Esta mañana salió de la casa sin que nadie se diera cuenta y un carro lo atropelló, regresó a la casa, estaba sangrando, es la imagen más fea que he visto, mis papás lo llevaron al veterinario, pero no se pudo hacer nada, el dio su último suspiro y murió.

̶ Santi limpiaba sus lágrimas y sus mocos con la manga de su sudadera, sus ojos y nariz eran rojas y sus mejillas más rosas de lo normal mientras que lo único que pude hacer fue abrazarlo.

̶ Tranquilo, está en el cielo con muchos perros más, sé que desde allá estará ladrando felizmente y destruyendo todos los zapatos que él quiera  ̶  fue lo único que logre decir y sirvió pues Santi se rio.

Un Nuevo Amanecer Where stories live. Discover now