Capítulo 22 "Enfermería"

1.1K 69 5
                                    

Enfermería


Muero de sueño.

Quiero una cama, una cobija y seguro caigo rendida. Miento, solo necesito cerrar los ojos y seguro caigo en los brazos de Morfeo. Cabeceo una vez más y retrocedo asustada, trato de concentrarme en la pizarra pero empiezo a ver borroso y siento mis ojos volverse otra vez pesados.

No puedo dormirme, no debo hacerlo.

Pero el sueño cada vez domina más mi cuerpo que para cuando suena el timbre no aguanto más y me acuesto sobre mi banca. Todos empiezan a salir del aula para seguro ir al comedor. Yo también lo haría pero estoy tan cansada que no tengo ni hambre.

-¿Abi?-aprieto los ojos al oír a Pamela-¿estás bien?

-Sí-murmuro con la cabeza agachada-solo tengo un poco de sueño.

-¿Qué estabas haciendo anoche?-pregunta confundida-No teníamos muchos deberes.

No fueron los deberes un problema, los acabe mientras jugaba con los niños, el problema fue que con mi madre llegamos tarde a la casa, Hailey aún no habían hecho las tareas y mi madre estaba que echaba chispas. Hubo una discusión que termino con ambas llorando y yo ayudando a hacer un resumen de casi cinco hojas sobre un tema que de solo recordarlo me duele la cabeza.

Odio historia.

Y con lo de anoche la odio más.

Después Ben tuvo una pesadilla por la cual me despertó y ya no pude volverá dormir hasta dentro de unas horas.

Sonrío un poco, no importaba cuanto sueño tuviera en este momento. Por qué esta mañana cuando la vi sonriente supe que hice lo correcto. Prefiero ser yo la ojerosa que ella. Y que con eso ambas pudieran arreglar lo que paso anoche. Y creo que fue lo mejor, esta mañana mamá llevaría a Hailey al colegio. Cosa que alegro a la adolescente.

Así que si siento que malanocharse valió la pena.

Porque ayer la vi, detrás de esos lentes algo gruesos, su rostro cansado y ojeras revelaban cuan cansada estaba. Aunque ahora me esté quejando, es como una queja sana. Por qué repetiría una y otra vez esto, con tal de no ver su rostro apagado.

Pero no era algo que quería decírselo a alguien. Mis problemas eran míos y nadie tenía por qué lidiar con ellos. Además nunca fui de decir todo lo que me pasaba, tal vez por eso no me afecto callar lo que sentía.

Pero olvide algo importante. Hailey no es como yo.

Niego la cabeza y la oigo suspirar mientras acariciaba mi espalda.

-Voy al comedor a traerte algo de comer, ya regreso.

Asiento sin fuerza.

Entonces cuando creí que por fin dormiría algo una mano se posó en hombro haciendo que suspirara.

-Por favor Pamela solo déjame dormir, te prometo que estoy bien. Si quieres luego te explicó pero por favor solo déjame cerrar los ojos durante estos minutos de receso. Por favor.

-No soy Pamela, Martins

Mierda.

Mi cabeza se alza de golpe al oír su voz provocando un desastre con mi cabello. Todo cae sobre mi cara evitando que lo vea. Pero sin duda ya sabía quién era. Así que con dedos nerviosos trate de quitarme el cabello de la cara.

Y creo que fue un error.

Sus ojos se abren con asombro, parece que ve un fantasma y seguro con el desastre que soy, tengo la apariencia de uno. Mierda, seguro me veo fatal. Debí ponerme algo de corrector.

Te enamoraréWhere stories live. Discover now