Te enamoraré

Capítulo 42 "No tres, si no cuatro"

No tres, si no cuatro

Las luces llegan a mi cara e inmediatamente me quejo. Trato de taparme pero recién soy consciente de que tengo algo de frío y no hay una manta encima de mi cuerpo, solo hay una chompa.

Una que huele muy bien si me permiten decirlo.

Me remuevo y obtengo un quejido de parte de alguien.

-¡¿Abigail?! ¡¿Alan?! ¡¿Qué está pasando aquí?!

Salto asustada y me siento de golpe, me siento mareada. Parpadeo rápidamente tratando de enfocar que sucede y me quedo helada al ver a una rubia frente a mí con la mandíbula desencajada.

-¿S-sofía?

Ella ve de mí hacia un lado, por instinto también sigo su mirada. Mi boca cae algo abierta. Alan nos mira con ojos adormilados para luego escanear toda la habitación. Se ve tan humano, tan tierno, tan lindo...

Nos da una mirada desorientada para luego verme fijamente pero no me enfoco en eso cuando estoy tan embobada también observándolo. Ella se aclara la garganta y siento mis mejillas sonrojarse de vergüenza ante la mirada su mirada de "Estoy aquí salgan de su mundo fueron cachados en una biblioteca juntos, solos. Sin supervisión adulta"

O tal vez solo sea la voz de mi conciencia la que quiso decir eso.

Como sea, eso es suficiente para que salga del trance y recuerde que soy un desastre al despertar. Porque como cualquier humano mi cara se hincha un poco y mis ojos son chinos por unos segundos. Así que antes de que se quede traumado de por vida con mi aspecto trato de taparme la cara con mi cabello.

Estoy nerviosa.

Por dos cosas, la primera estoy recién levantada y siendo vista por quien quisiera que fuera mi compañero de vida. Con quien no me daría pena después de un tiempo usar mis hermosas babuchas.

Porque ya saben, somos dos por uno.

Y la segunda, por la mirada fija de ojos entrecerrados de la rubia que no parece muy contenta con lo que ve. Aunque mi nerviosismo va por que alguien se entere y pues los rumores vuelven más rápido que flash por todo el lugar.

Así todo esto pasaría de ser "una noche atrapados en la biblioteca por una manija rota" a "Una..." no, ni siquiera quiero pensar lo que aquellas mentes pervertidas le atribuirían al título.

-Todo tiene una explicación-digo antes de que vuelva a decir algo-Remplazaba a Hilary en semanera y estaba limpiando.

Asiente y su mirada cambia de objetivo, se va a Cooper de manera acusatoria.

-Solo vine a ayudarle-dice alzando las manos en señal de inocencia-No tuve ninguna mala intención. La que rompió la manija fue ella.

-Fue un accidente-le interrumpo-no abría y trate de usar más fuerza pero creo que me pase un poco con la fuerza porque se rompió...

-¿Un poco?-se burla-Si vieras el sonido que creo cuando esa cosa se rompió.

Entrecierro los ojos.

-¿Así que sé que solo pasearon por toda la biblioteca como fantasmas?-pregunto incrédula.

-Bueno, leímos libros, jugamos cartas-empiezo a enumerar-al parchís también y pues luego...

Automáticamente las imágenes de nosotros besándonos y quedándonos acurrucados se pasan por mi mente.

-Y luego nos quedamos dormidos en el sofá-finalizo con las mejillas rojas.