Capítulo 64: ¿Por qué me gustas tanto

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Después de dos días, el director del buró personalmente fue al hospital a visitar a la Tía Zhou.

“Señora, he venido a verla. Lamento muchísimo el asunto de hace un par de días, ya he regañado a aquellas personas, también les di una sanción, por favor ténganos consideración y perdónenos.”

Tía Zhou parpadeó en confusión, un pequeño puesto siendo destrozado era algo común, y sin embargo nunca había visto a un director disculpándose personalmente de esta forma.

“Señora, aquí hay cincuenta mil yuan, el dinero por los gastos médicos también están adentro, por lo ocurrido, por favor acepte esto.”

“Esto...”

Tía Zhou quería decir, */¡Los gastos del hospital y medicinas juntos ni siquiera llegan a cincuenta mil yuan!/*

“¡Por supuesto que los aceptamos!” Gu Hai de inmediato tomó la bolsa de papel, y la puso junto a la almohada de Tía Zhou, “Debería tomar esto, no tiene por qué ser tan cortés con ellos.”

“Sí, sí...” El director hizo una reverencia con adulación, “Lamento muchísimo lo de su puesto, ya hemos preparado un nuevo lugar cerca de Xin Jie Kou, cada cuarto ha sido renovado recientemente, el anuncio con el nombre del local ya fue instalado también, se llama ‘Bocadillos de Tía Zhou’. Por favor, confirme la fecha de su salida del hospital, y cuando llegue ese día, de inmediato elegiremos una fecha para la gran apertura de su restaurante.” 

Tía Zhou se sintió como si estuviera soñando, su pierna quemada, ¿merecía tanto la pena?

Bai Han Qi preguntó desde a un lado, “Pero después de que seamos dueños de la tienda, ¿no tenemos que pagar los gastos de impuestos y de seguridad también?”

“No tiene que preocuparse por ello, ya hemos arreglado todo.”

La expresión de Tía Zhou se volvió aún más incrédula, miró a Bai Han Qi, entonces cambió su mirada hacia Bai Luoyin y Gu Hai, quienes también estaban a su lado. Se sentía angustiada e incómoda por la serie de eventos afortunados que seguían llegando, era como si hubiesen sido cuidadosamente arreglados.

“¡Temo no ser capaz de manejarlo bien!“

“No se preocupe, alguien le ayudará a llevar la tienda por los primeros dos meses, si tiene algo que no comprenda entonces siéntase libre de preguntarle. En cuanto a los meseros...” El director le dio un rápido vistazo a Gu Hai, “Por el momento, hemos preparado a cinco personas, esperaremos hasta que el negocio mejore, y entonces encontraremos a más personas.”

“Es suficiente, suficiente.”

Tía Zhou estaba demasiado emocionada que no sabía que más decir, por debajo apretaba y soltaba ambas manos repetidas veces. Anteriormente, cuando se hacía cargo de aquel pequeño puesto por su cuenta, la mantenía muy ocupada. Era difícil y cansado también, su hijo tenía que ir a la escuela, la familia entera dependía de ella sola, no podía darse el lujo de contratar a otra persona, realmente deseaba tener un poder sobrehumano. Después de terminar su ocupado trabajo cada día, ni siquiera era capaz de enderezar su cintura. 

Are You Addicted? (Volumen I) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora