COMO CAÍDA DEL CIELO (CCDC) ✅

CAPÍTULO 6: "El accidente"

"Estaba desesperada, sola y ansiosa pero llegaste, y con solo un beso me cambiaste la vida"

Aylena Rodríguez

Capitulo 6

NARRADO POR SEBASTIÁN.

Era una noche algo tranquila... Digamos que no había mucho tránsito y al ser el cumpleaños de la pequeña Sofía los padres de Kevin decidieron ir a cenar ¿Qué podría pasar mal?

¿Tú estabas ahí?

No, ese día me sentí mal de la pansa por comer tantas frituras; no te lo recomiendo.

Lo tomaré en cuenta.

La cosa es que salieron a cenar ese día, Kevin nunca dejó de escribirme diciendo todo lo que hacían. Estaba tan lleno de alegría que que es algo extraño verlo ahora tan amargado.

Ellos pasearon por el mar, el cine, el parque. Hay miles de fotos en las redes de Kevin. Pero entonces llegó la noche y ya iban de regreso a casa, lo sé porque Kevin venía hablando conmigo por teléfono...

Un año y medio atrás

Iban en el chevrolet de el señor Demon por el camino de la carretera todo estaba tranquilo como dije antes. Solo que al ser de noche no se veía casi nada.

Apenas se dirigían a una curva donde debían tener mucho cuidado.

—Felicidades a ti. Felicidad, felicidad, felicidades a ti  —Cantaba la familia entera.

—¡FELICIDADES A MÍ! —Gritó Sofía aplaudiendo y Kevin la llenó de besos.

—Mi pequeña hermosa.

—¡Oye, no te la comas a besos, yo también quiero un poquito!

El teléfono de Kevin estaba conectado con una video llamada conmigo así que pude ver algunas cosas antes de que sucediera lo peor.

¿Kevin quería mucho a su hermana?

La adoraba. Era su princesa, su ángel, la protegía con la vida y eso fue lo que más le dolió.

¿Fue algo muy traumático para él?

Angélica, déjame llegar a esa parte.

Perdón, es que me duele saber que esto lo destruyó tanto.

Bueno... Lo que pasó después fue algo que Kevin nunca sabía que le costaría la vida de su familia. Él no tenía idea que solo un acto por recordar un momento feliz se les convertiría una pesadilla.

Kevin agarró el teléfono de su madre y tomó un foto con su hermanita.

—¡Otra, otra! —Chilló la hermana y el sonrió.

—¡Mama, papá, foto!

Con la cámara frontal de su móvil preparado para guardar aquel momento.

Al señor Demon voltear  apretó el botón de la cámara de su móvil y todos salieron con una gran sonrisa que en segundos se convirtió en pánico.

—¡Gabriel, cuidado! —gritó la señora Demon en el momento que vio el gran camión que les venía de frente.

No sé qué paso, en qué momento ocurrió

El señor Demon volteó rápido e intentó hacer  una artimaña para no chocar, pero esto los llevó a caer de un barranco.

Aquel auto dio varias vueltas para luego quedar volteado. Muchos pedazos de vidrio se habían esparcido, algunos tenían rastros de sangre.

Lo demás apenas lo supe luego por un vídeo que alguien grabó...

Personas detuvieron su auto al ver aquella catástrofe. Corrieron para brindarles ayuda a aquella familia, pero no sirvió de mucho.

Los señores Demon ya no tenían pulso además de tener toda la cara llena de vidrios incrustados, aunque no era lo más impactante...

Sofía, nuestra pequeña niña.

Fue lo más doloroso. A ese pequeño ángel le separaron la cabeza de su cuerpo. Ver aquella imagen causaba terror y más para aquellas personas que estaban viendo toda aquella tragedia.

Fue un infierno, un infierno que quitó la vida del camionero que también se incendió al caer.

Todos ya pensaban que no quedaba ningún sobreviviente, pero entonces ocurrió:

—Ayuda, por favor...

Escucharon la voz débil de  Kevin, una y otra vez pidiendo ayuda, ya que no podía moverse por los vidrios enterrados en sus piernas y tampoco ayudaba estar debajo de los escombros.

Lograron sacarlo de ahí antes que aquel auto terminara por explotar. Kevin por primera vez en su vida se encontraba solo, sin nadie, sin nada, con un móvil en las manos que nunca soltó con  la foto de esa noche de abril...

¿Pero no tenía a más nadie?

Solo le quedé yo y su novia pero ella se comportó como una estúpida tratándolo mal solo porque no podía caminar luego de ese accidente.

NARRA DESCONOCIDO

Angélica se encontraba sentada con sus piernas cruzadas. Algunas lágrimas se habían escapado de sus ojos.

—Él no se merecía eso.

—Nadie se lo merecía, fue algo que pasó por un descuido, de todas formas el camión iba en el carril equivocado.

—Ya basta —Dijo Kevin entrando de nuevo a la habitación —Es suficiente.

—Kevin... —Sebas lo miró sorprendido, el nunca pensó que este escucharía.

—Ya no más, Angélica debe dormir, fue un día pésimo para ella, no se lo tortures más con bobadas. A nadie le interesa esa estúpida historia.

—A mí sí —Dijo Angélica —A todos lo que te quieren les interesas.

—A mí nadie me quiere, niña.

—Tú eres el que no deja que te quieran —Dijo Angélica y se recostó volteandose para un lado de la pared.

—Que tengas buenas noches —Kevin apagó la luz y sacó a Sebastián de la habitación.

Angélica solo soltó un suspiro y cerró los ojos quedando dormida.

—¿Estás loco? —Kevin discutía con Sebastián.

—No, ella se iba enterar de cualquier manera —El azabache de ojos oscuros miró a su amigo señalando —Tú eres su héroe, ella solo quiere acercarse a ti.

—Solo le doy lástima —Kevin acomodó una almohada en el sofá y se acostó poniendo sus brazos sobre su cabeza.

—No es verdad, ella no sabía nada de esto cuando se acercó a ti la primera vez en el colegio solo para presentarse junto a ti —Sebas se recostó en una manta en el suelo.

—Ya no sé para qué te cuento las cosas.

—Acéptalo Kevin, esa chica te gusta.

—No me gusta, es irritante —Kevin lo fulmio con la mirada.

—Te gusta lo irritante —Solto una risita mientras se acomodaba.

—Odio lo inrritante —Kevin le lanzó un cojín a la cara —Y a la gente que no se calla.

—Tú no me odias, me amas, bebé —Kevin reviró sus ojos y miró al techo.

Ambos se quedaron mirándo el techo un rato hasta que Kevin movió sus labios.

—Es linda —Articuló —Pero solo eso —Volteó a ver a su amigo pero ya esté estaba tendido roncando como locomotor.

Kevin se levantó y subió las escaleras de metal con cuidado para no despertar a nadie. Y desde ahí observó y admiro el sueño del ángel que sin saberlo lo protegía.

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CAPITULO DE EDICIÓN COMPLETADA