CAPÍTULO 57: ¡ARREPIÉNTETE PECADOR!

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Otra vez, ya está otra vez. Ojalá se le caiga el puto taladro y le haga una herida tan grande como su cabeza de melón.

___: ¡PUTO VECINO DE LAS NARICES! ¡DEJA EL TALADRO!

Miro el despertador que hay en mi mesita de noche y son las...

___: ¡HIJO DE SU MADRE! ¡SON LAS 9 DE LA MAÑANA! ¡NO SON HORAS!

Me levanto de la cama, bajo las escaleras muy enfadada, abro la puerta y la cierro detrás de mí.

___: Vecinito, ¿dónde estás vecinito?

Me voy acercando a la casa de mi vecino con cara de asesino en serie, pero no lo veo.
¿Y ahora dónde coño está? Se supone que estaba molestando con el taladro.

Sr. Harrison: Hola pequeña.

Hijo de... el susto que me he dado. Ha aparecido por detrás mía cargando con unos tablones, y yo aquí en pijama.

___: Sí... hola.
Sr. Harrison: ¿Puedo ayudarte en algo?
___: Pues la verdad es que sí. ¿Quieres dejar el pu...

Me callé cuando vi detrás de él una enorme casita, pero era enorme. Parecía más grande que yo, era una casita de muñecas con sus pequeños muebles y hasta tenía las escaleras y todo, ¡incluso unas minis lámparas del techo!

Sr. Harrison: ¡Oh, veo que te gusta la casa de muñecas! ¿Sabes? La he construido yo.
___: ¿Enserio?
Sr. Harrison: Sí, de arriba a abajo. Cada pieza que ves, está fabricada por mí. Incluso tiene luces.

Entonces el señor Harrison le dio a un interruptor y de pronto se iluminó aquellas minúsculas lámparas.

Entonces el señor Harrison le dio a un interruptor y de pronto se iluminó aquellas minúsculas lámparas

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___: ¡Que bonito! ¿Esto es para sus hijos?
Sr. Harrison: Pequeña... yo no tengo hijos.

Un escalofrío me recorrió por todo el cuerpo. ¡QUE MAL ROLLO DA ESTE TÍO! Si un hombre viene de quien sabe Dios donde, compra la casa de en frente a la tuya y construya casitas así porque sí... bueno no tendrá.

___: ¿Y... entonces... por qué construye casitas de muñecas?
Sr. Harrison: Bueno, es como un hobby. Algunas personas coleccionan sellos, otras coleccionan camisetas de viajes por donde han ido... pues yo colecciono casitas. Claro que mis hobbies van cambiando con el paso del tiempo, antes me dio por coleccionar discos de vinilo, es raro, pero tener un hobby ya sea cual sea te hace despejar un poco la mente.

Hubo un silencio un poco incómodo, así que para que no me de tanto miedito, dije lo primero que se me pasó por la cabeza...

___: Me gustan las croquetas.

El vecino dejó de mirar su casita siniestra y me miró confundido mientras que yo asentía con la cabeza.

___: ¿Y... tiene pensado hacer algo con sus casitas?
Sr. Harrison: Sí, quiero regalárselas a las niñas y niños que viven en la reserva.
___: Que generoso.
Sr. Harrison: ¿Quieres ser la primera en ver mi colección de todas las casitas que he hecho? Y después te doy la que más te guste.

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