FUTURE DAYS WITH THE FLASH | LIBRO 3

9 - Some Things Do Change

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Era un día corriente, nada fuera de lo normal. Central City había estado bastante tranquila sin que Zoom intentara matarnos a todos, lo que significaba que nuestro día a día era aburrido, pero fue un buen cambio de ritmo. Me senté en un escritorio, con las piernas colgando sobre el borde mientras masticaba el sorbete de mi batido. La mayoría del equipo intentaba mantenerse ocupado con el trabajo, incluyéndome a mí, pero yo me tomaba un descanso de mis estudios mientras Barry estaba fuera deteniendo a otro ladrón de joyas.

Mi teléfono sonó en mi regazo, un nuevo mensaje apareció en mi pantalla cuando la corteza estalló en la luz, Barry sonriendo de oreja a oreja mientras estaba de pie en la puerta. "¿Qué clase de idiota sigue creyendo que no puedo dejar de recibir balas?" Preguntó mientras caminaba a zancadas hacia el laboratorio, un pequeño rebote en su paso.

"Ese criminal debería saber que no debe enfrentarse a Flash", se rio Wally, chocando los cinco con Barry de pasada. Barry se acercó a mí y me besó en la sien mientras se volvía hacia el equipo.

Lo vi regocijarse por su última victoria, algo diferente en él hoy. Desde la muerte de su padre, parecía cerrado y se había mantenido alejado de todo el mundo. Pero hoy, estaba realmente feliz. "Entonces, ¿cómo deberíamos llamarlo?" Nos hizo la pregunta a todos nosotros.

"¿Quieres decir como un apodo?" Wally le frunció el ceño.

Barry asintió con la cabeza: "Sí. Cisco suele crear nombres, lo hace para todos. Es el maestro de los apodos. Entonces, ¿Qué piensas?"

Iris me envió una mirada y yo me encogí de hombros, mi mirada se dirigió a Cisco que estaba apoyado en un escritorio, en su teléfono. No sabía de dónde había salido la repentina actitud alegre de Barry, pero no era muy contagiosa con los demás. "No lo sé". Cisco murmuró en voz baja.

"Bueno, supongo que puedo con esto". Barry respondió, quitándose los guantes y dirigiendo su atención a Caitlin e Iris, ambas sentadas en los escritorios principales de la corteza. "¿Qué hay de Crook? No, eso es una tontería. O tal vez..."

Sin embargo, antes de que pudiera terminar su frase, la cabeza de Cisco se rompió. "Ladrón". Dijo con una voz severa. "Si roba cosas, ¿Por qué no lo llama simplemente ladrón?"

Había una tensión pegajosa en el aire, algo que había estado flotando durante lo que parecía ser meses. Desde que su hermano había muerto, Cisco no había sido el mismo. Ninguno de nosotros lo culpaba, era algo que uno tenía que resolver por su cuenta a veces.

Pero una vez fue el viejo humorista Cisco Ramón no era más que una cáscara de dolor. "De todos modos, tengo que ir al gimnasio." Con esas últimas palabras, Cisco salía de la habitación sin mirarnos a ninguno de nosotros.

"¿Uh, el gimnasio?" Barry preguntó una vez que se había ido. "¿Está... como haciendo ejercicio ahora?"

Incluso yo pensé que su pobre elección de palabras era extraña, "Sabes, Barry, a veces tus chistes no son muy graciosos". Caitlin dijo, pasando a su lado y dirigiéndose hacia el pasillo, sus talones haciendo clic en el frío suelo.

Revisé mi teléfono, tocando la pantalla mientras chupaba otro trago de batido frío por la paja, haciendo un sonido sordo. Barry se acercó a Joe e Iris, que ya tenían prisa por salir del laboratorio. Tampoco habían hablado en lo que parecían meses, algo que los dividía, algo que ponía a todos en tensión. Barry los siguió: "Lamento que no se hablen en este momento. Pero estaba pensando que tal vez podríamos hablar de... por qué es eso, por un minuto rápido".

Hubo un murmullo de desacuerdo por parte de toda la familia West, pero fue Iris la que descansó de espaldas a su silla, cruzando los brazos sobre su pecho. "Bien, de acuerdo".

"Mira, lo siento." Barry empezó de nuevo, cavando él mismo un agujero más profundo. "Sólo pensé, no sé, tal vez sería buena idea hablar de ello en voz alta."

Iris ya se lo estaba echando en cara a su padre: "Esto es por lo que hizo, Barry. No por mí."

De repente sentí que me hundía en el suelo, siendo el único que quedaba en la habitación que no era parte de la familia West. Salté del escritorio, listo para tratar de escabullirme de la habitación, pero me detuve cuando la voz de Iris sonó. "¿Qué papá? ¿Qué podrías tener que decirme?"

Joe suspiró, alejándose de su única hija y dirigiéndose a Barry. "Te veré en la estación". Le dijo a Barry, dirigiéndose hacia la salida. Era demasiado tarde para escapar ahora, lo que significa que estaba atrapado aquí esperando a que este momento de asunto familiar que apretaba el corazón terminara.

"Papá, ¿te importaría llevarme al Central College?" Preguntó Wally, corriendo tras él.

Barry se giró para ver a los dos hombres del Oeste irse, "Espera, Wally, ¿todavía estás tomando clases de ingeniería, verdad?"

La pregunta era extraña, pero Wally asintió con la cabeza, pasando por alto que la pregunta era extraña, ya que había estado inscrito en el Colegio Central durante meses. "Uh, sí".

"Bien, de acuerdo. Genial". Barry exhaló, un poco confundido por todo. Mi teléfono volvió a sonar y el sonido resonó en las paredes del edificio, creando una pausa en la conversación.

Iris chasqueó su lengua, "Bueno, eso fue divertido pero yo también debería ir".

Con un rápido saludo hacia ella, me quedé solo con Barry, con mi batido aún en la mano. Me miró, con los hombros caídos. Pude ver la lucha en sus ojos, algo que hoy le nubla la mente. "No te castigues, ¿de acuerdo?" Le di una pequeña sonrisa, dirigiéndome hacia él. "No puedes ser el héroe que reestablezca su relación, no esta vez."

"No sé qué pasó", confesó Barry. "Estoy confundido con todo esto".

Eso fue un eufemismo. "Entonces tal vez deberías dejarlo, ¿vale? Lo resolverán y las cosas volverán a la normalidad".

Barry me acercó, con una mano bajando por mi brazo. "Normal, ¿eh? Siento que ya ni siquiera sé qué es esto".

Mis labios se levantaron, "Bueno, la normalidad viene de hacer lo que sabes. Lo que significa que tú deberías ir a trabajar y yo también debería ir a clase. Tengo que dejar a Dustin en la estación de tren, va a ver a papá esta noche..." Vi como otra ola de confusión inundó sus ojos verdes y le di un ligero empujón, "¿Qué te pasa hoy?" Le pregunté rápidamente: "Dime que no has olvidado a mi medio hermano".

"¿Medio hermano?" Él exhaló y yo sacudí la cabeza con naturalidad. No sabía dónde estaba la cabeza de Barry Allen, pero fuera lo que fuera, tenía que sacudirla. "Espera, ¿estás estudiando otra vez?"

Me levanté en puntas de pie, dándole un beso en la mejilla. "Llevo semanas estudiando en la universidad, ¿Te has golpeado la cabeza o algo así? De cualquier manera, despierta, no podemos tener a nuestro superhéroe líder fuera de acción." Me caí de espaldas, sonriendo antes de coger mi bolso y alejarme de él. Cuando me di vuelta en el pasillo, le di una mirada por encima de mi hombro. "No olvide que tenemos planes para cenar esta noche, Sr. Allen".

Me sonrió a medias: "No lo olvidaré, lo prometo".

***

Disfruten del ultimo capitulo del día. 

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All the Love e. xoxo