Capitulo 10

4.3K 291 22
                                    


Destiny

Un capuchino con crema batida y chocolate para mí – le indico a Josh que está a punto de ir a los mostrados a pedir -

- un expresó – le indica Crowley y de inmediato se dirige a la fila de Starbucks – ¿te hacía falta salir verdad pequeña? - me pregunta Crowley con una sonrisa -

- si – suspiro – demasiada falta – alguien carraspea en un lado de nosotros, estaba tan feliz que no me había percatado de otra presencia en esta mesa, y lo peor es que ya sé quién es. Siento de inmediato como Crowley se tensa y una preocupación inunda el local de cafés -

- buenos días – saluda Dean – ¡vaya! - me mira por un rato – ¿ahora rubia? - lo miro y su mirada se posa en mis ojos, los mira por un rato y luego se empieza a acercar más a mí – ¿son naturales? Creo que eran color verdes la última vez que los vi – sonríe y vuelve a su posición -

- ¿qué haces aquí? ¿Cómo sabes de qué color eran sus ojos? ¿lo conoces Des? - empezó el ataque de preguntar por parte de Crow – ¿cuándo se conocieron? ¿De qué demonios me perdí? - Wow! Puedo notar su enojo y... esperen ¿Acaso Crowley ya conocía a Dean?

- Uno: venía a tomar un capuchino – responde Dean – dos: lo sé por qué los llegue a ver cuándo eran verdes. Tres: claro que me conoce. Cuatro: nos conocimos hace diez años. Y cinco: no te has perdido de nada, aun... - mueve su cabeza indicándome que me mueva para sentarse y antes de moverme Crowley habla

- no Des – me mira desafiante – él no es bienvenido en esta mesa -

- es mi cumpleaños – es lo único que le alcanzo a decir, sus ojos se agrandan de sorpresa porque después de dieseis años lo desobedecí, bueno no es la primera vez pero, digamos que enfrente de él. Me muevo para estar al lado de la ventana y Dean toma asiento.

Los momentos en la mesa fueron tensos. No sé por qué Crowley le tenía coraje a Dean, él era muy amable con migo. Después de ese debate, Josh había llegado con nuestros pedidos y como a mí me trajo uno grande, decidí compartirlo con Dean. Si, suena extraño, porque lo únicos que hablamos fuimos nosotros dos, ni siquiera Josh se animaba a entrar en la conversación. La rabia de Crowley se sentía por todo el lugar y me abrumaba, pero no le daba importancia. Y gracias a mi encantado egoísmo descubrí que a Dean y a mí nos encantan las hamburguesas con doble tocino y los pies.

La conversación estuvo un poco corta para mi gusto, pero descubrí que seguía siendo mi mejor amigo después de diez años. Y el destino no podía ser mejor, era exactamente en mi cumpleaños cuando decidió ponerlo en mi camino. Y más aun siendo un cazador. En un momento lejano cuando le tuviera más confianza podría decirle lo de mi padre y saber si él lo llego a conocer. Y lo mejor, me podría enseñar a ser cazadora. Si, suena loco pero, me encantaría ayudar a la gente como lo hacen ellos. Sin importarles si pierden la vida en el intento, y aunque solo lo hagan por venganza, pero al final, salvan muchas vidas.

- es hora de irnos Des – hasta que se dispuso a hablar Crowley -

- claro – Josh y Crowley salieron rápido dejándonos a Dean y a mí atrás. Para cuando logramos salir del local, ellos ya habían dado vuelta en la esquina, ahí se encontraba el carro

- ¿por qué Crowley te odia? - sale la pregunta demasiado alta, creí que lo había imaginado

- por cosas del negocio – fue lo único que dijo por un rato. Y ya casi llegando a la esquina – por cierto, feliz cumpleaños – y me abraza. Lo abrazo, mas no permito que mis manos lo toquen, gracias a mi don. Si, podía ver la vida de las demás personas con solo tocarlas, pero no lo haría con él. Aunque debo de admitir que el abrazo se sintió bien. Era diferente, y no sé de qué cosa diferente. Pero puedo jurar que se sintió una pequeña chispa de algo

- gracias – le digo ya soltándonos. Antes de dar la vuelta me entrega una tarjeta. La miro y sonrió. Es su número de celular

- por si necesitas algo – me sonríe y asiento. Me acerco y beso su mejilla. Lo agarre desprevenido pues se tensa cuando lo hago.

- Adiós Dean – le digo y me voy. Oigo su "Adiós, Hope" en un susurro, pero no volteo a verlo.

Dean

Se sube a su auto y se marcha. Había algo en ella que me hacía sentir mejor. Que me hacía sentir orgullo de lo que era ella ahora. No me importa si puede acabar con el mundo entero, no me arrepiento de haberla salvado hace diez años.

Al llegar al hotel Sam esta con Castiel, están serios, creo que me perdí de algo

- ¿y esas caras? - pregunto

- ¿algo que nos quieras compartir? - ¡maldición! ¿Se habrán dado cuenta?

- ¿Cómo qué? - puede que sea otra cosa y me esté volviendo paranoico

- te vi en esa tienda con Crowley y mi chica – suelta Cas. Esperen...Esta celoso... ¿Escuche bien?... ¿desde cuándo Hope es su chica?.. pero antes de agregar más y que pase más tiempo, Cas se da cuenta de su error, más porque Sam lo fulminaba con la mirada – digo... - se aclara la garganta – con Crowley y la Chica -

- se llama Hope – suelto corrigiendo el "la chica". Y los dos fruncen el ceño – fui a fraternizar con el enemigo – digo sentándome en la cama

- ¿enserio? -. pregunta Sam

- si Sammy – suspiro – salí a comprar un café y me los encontré. Digamos que en el local me invite solo a su mesa y descubrí cosas – sonrió

- ¿cómo qué? - pregunta Cas -

- como que la pequeña sospechosa número uno para ser el híbrido no le había dicho a Crowley de nuestro encuentro – Sam se queda con la boca abierta – ah! Y ahora es rubia y sus ojos son de color dorado. Inusual. Pero bonito -

- Creo que iré a merodear por la casa – y antes de que pudiéramos protestar, Cas ya se había ido.

Castiel

No podía creer lo que Dean había dicho, pero lo vi con mis propios ojos. Se seguía pareciendo a Dean, pero con su cabello rubio se parecía a ella de lejos. No podía ser eso posible, sé que ella murió pero nunca nadie supo el porqué. Y creo que lo acabo de saber. Su nombre fue Mariel en el cielo, y en la tierra lo fue Esmeralda.

Todos creen que fue un demonio quien acabo con ella. Pero viendo lo que veía ahora, creo que simplemente acabo como ella quería. Fue el único ángel en querer una vida humana, solo quería saber lo que las personas en la tierra vivían pero nunca me imaginé esto.

Si podía descubrir si ella era su hija, todo tendría sentido por una parte, pero por la otra, todavía estaba la duda de quién era su padre. Y la única manera d averiguarlo es yendo a la única fuente de información, Crowley.

Destiny

Estábamos llegando a la casa, cuando el ángel Castiel se apareció en medio del camino. Crowley casi se estrella en el espejo por el repentino enfrenón, pero no pasó nada. Crowley salió del auto y se enfrentó a Castiel. La verdad no se oía nada de lo que hablaban, pero debería de ser importante, o al menos eso creo. Así que después de varios minutos ahí en suspenso, Crowley regreso al auto solo para decir que entráramos a la casa, que en un momento iba con nosotros.

Al entrar a la casa, algo se sentía diferente, sé que algo no andaba bien, y eso me hacía preguntarme como Castiel había podido pisar las protecciones, porque en donde el apareció debería de haber algunas.

- ¿Iré a cambiarme de acuerdo? - solo asentí a Josh, esa extraña sensación no se iba de mi mente, me acerque al interruptor de luz interna, se supone que las protecciones son de luz por debajo de la tierra para que no las borren o puedan pasarlas, pero para mi sorpresa la caja de los fusiles está destrozada.



1° - Destiny, la nueva Winchester(SPN Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora