1° - Destiny, la nueva Winchester(SPN Fanfic)

Capitulo 32

Destiny

- ¡Si querías una cita conmigo no tenías que secuestrar a mi hermano! - anuncia sonriente Mackenzie. ¿Porqué de todos los humanos y casi humanos del mundo tengo que toparme con Mackenzie? ¿Porque el hermoso niño en un lado mío tenía que ser su hermano? -

- ¿la conoces? - pregunta el pequeño viendo con el ceño fruncido a su hermano -

- si, vamos en la misma escuela – responde el mientras le extiende la mano al niño y este la sostiene y se va a su lado. Mira hacia arriba para poder ver a su hermano

- ella es la Destiny de la que tanto hablas en la... - el pobre niño no acabo de terminar la frase, ya que su hermano el idiota le tapó la boca con su mano. Reí, y no por lo que le hizo al pequeño, sino porque por primera vez en un año veo como Mackenzie se sonroja por lo que acaba de decir su hermano.

- Creo que está cansado – me dice riendo nerviosamente – ¡claro que yo no le hable de ti a Johnny! .... - el pequeño se zafa del agarre del su hermano y se coloca de nuevo a mi lado

- claro que si – vuelve a hablar el pequeño – ¡todo el día está hablando de ti. Hasta mama y papa tienen que ponerse unos tapones en los oído para no escucharlo! - miro al pequeño Johnny mientras me rio, el solo me sonríe tiernamente

- ya es tarde Johnny, ¡ya vayámonos a casa! - dice entre dientes Mackenzie. No quiero ni imaginarme como le ira al pobre Johnny cuando no esté presente yo.

- Me divertí mucho – dice Johnny soltándome la mano – ¡gracias por llevarme a los juegos! - me abraza. Pero gracias a su tamaño me abraza del estómago. Le devuelvo el abrazo, después de unos segundo él me suelta y se va al lado de Mackenzie

- Gracias por cuidar de el -

- no fue nada, quien iba pensar que el "Gran Ethan Mackenzie" tuviera un hermano tan encantador -

- ¡es que, es hereditario! - me dice guiñándome un ojo y se aleja.

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- ¿en qué piensas? - me pregunta Josh mientras estamos en la sala viendo la televisión. Era sábado. Así que los chicos salieron a tomarse el día. Solo nos quedamos nosotros dos en casa.

- No he visto a Castiel. No me han llamado ni Sam ni Dean. Y Crowley prácticamente está desaparecido – esto ya me estaba preocupando

- de seguro andan un poco ocupados, eso es todo -

- quería que todo fuera así, pero tenía ese mal presentimiento de que algo andaba mal.

Los chicos llegaron en la noche, contaron con mucho ánimo lo que habían hecho todo el día. Me alegre por ellos. Pero mi preocupación no se iba.

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- Escuchen con atención – estábamos en el comedor, para ser un lunes era algo tranquilo. El director estaba en la entrada del comedor gritando hacia nosotros – habrá un viaje estudiantil en dos días. Son tres días en el campo. ¡La escuela se va de campamento! - todos gritan con emoción. Según Ariel, este viaje lo hacen cada año antes del verano – la señorita Sanz les entregara los permisos, los quiero firmados por su tutor mañana. Si no lo traen firmado, no podrán asistir – el director se retira de la cafetería. Todos nos formamos en línea para salir de ella, en la puerta está la Señorita Sanz entregándonos el permiso.

Las siguientes horas se pasan volando, literalmente. Gracias a dios hoy no era día de ir al trabajo de Ariel. Es tan aburrido. En la salida me despido de los chicos y me subo al coche.

- ¿Cómo te fue hoy? - pregunta Ariel arrancando el coche para salir del aparcamiento.

- Normal. Como siempre. ¡Oh se me olvidaba! - saco el permiso de la mochila y se lo entrego – ¿si me dejaras ir verdad?

- ¿Así que ya es en dos días? - el coche se detiene en un semáforo – necesito que le preguntes al director si puedo ir – ¿qué?

- ¿Quieres ir? - pregunto algo asombrada Bueno, en realidad me sorprende haber pensado que me dejaría ir solo con los chicos -

- será en el campo, des. ¡Nunca sabes lo que puede haber haya! - acelera cuando el semáforo se pone en verde. El resto del camino es en silencio. Es aquí donde me pregunto, ¿en donde quedo el grupo de guerreros que querías hacer para proteger a la ciudad de todo lo malo? ¡Ah! si, ¡Tuxedo Mask se está encargando de eso!.

Al llegar a la casa me voy a mi habitación. Me pongo los auriculares en los oídos y me pongo a escuchar música. Necesito despejar mi mente de tantas cosas.

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- ¡ya cállense!- grita enfurecido el director desde el radio del camión en donde vamos nosotros. Habían ocupado cuatro camiones para poder transportar a todos. Los chicos y yo, íbamos en el camión donde iban los maestros y algunos padres de familia. El director había dado el comunicado de que necesitaría de algunos padres para estar mejor cuidados y bla.

El director Gordon – aparte de que esta gordo, su apellido es Gordon – iba en otro camión, y por lo que se alcanza a oír, no iban muy bien disciplinados los alumnos de este. Se oye que están cantando a todo pulmón la canción de "rude" de Magic! Todos desafinados, claro, pero solo por molestar al director, eso no importa.

Después de dos horas de un tranquilo viaje – y no tan buen viaje para el director – llegamos al campamento donde estaríamos hasta el sábado por la mañana. Era grande, había cabañas por todos lados, y al finalizar las cabañas estaba un lago. Al parar los camiones, los alumnos salen casi volando. Parecía un hormiguero en ese rato. El director Gordon tuvo que garrar un megáfono para poder hablar y hacer callar a los estudiantes de su preparatoria.

Detrás de mi está el comedor. Cuando me quite de este sitio, por favor acérquense disciplinada mente a las puertas de este, ya que en ellas está la lista de sus habitaciones. Cada cabaña tiene cinco camas. Por lo que cinco estudiantes ocuparan una sola cabaña – el director prácticamente corrió hacia un lado para no ser atropellado por los alumnos que corrieron a ver la lista, para saber con quién les tocaría compartir habitación.

Ustedes cuatro estamos en una – nos anuncia Ariel – ya lo había hablado con el director – ¡creo que seré la única chica que duerma en una sola cabaña con chicos!