Friends: Amigos Por Diversión [✓]

⚡Capítulo 33: Ren

Llegué a mi casa junto a Maikel, ambos entramos y tomamos asiento en el sofá de la sala, todavía se podía ver su rostro de dolor y tristeza, después de todo, descubrir que tu pareja te es infiel debe de doler bastante...

Creo que eso no aplicaba con Zack, desde que lo conocí sabía que era un perro faldero que se acostaría con todos los que le dieran su orificio, yo sabía cómo era él, solo que mi mente fué débil y se ilusionó por un corto momento, alejarme de él fué lo mejor, creo que si seguía con él me seguiría emocionando y terminaría con el corazón roto.

— Todo estará bien— Dije colocando mi mano sobre el hombro de mi primo como gesto de consuelo.

— Me duele mucho, ahora todo tiene sentido, por eso ella siempre se iba de las citas o siempre estaba ocupada ¿Cómo no lo pude ver antes?

— Aveces nos enamoramos tanto que no vemos los defectos de la otra persona.

Él sonrió y guardó silencio por un minuto.

— Ese sujeto...— Murmuró Maikel.

— ¿Qué sujeto?

— El chico con el que estaba Ariana, él te conoce y tú lo conoces a él... ¿Quién es?

— Ohh, Ryan... Es un chico que conocí en la fiesta de Zack.

— Se ve que no te agrada— Comentó.

— Es un maldito, juega con las emociones de los demás, él sabía que me gustaba Zack y que yo estaba intentando tener algo más íntimo con él, pero Ryan se interpuso, al parecer también le gustaba Zack.

—¿Que? ¿Entonces es gay?— Preguntó mi primo.

—No lo sé, ahora que lo ví con Ariana es confuso, puede que sea bisexual— Respondí.

De pronto Ren apareció, había salido de la cocina, no sabía que estaba en la casa.

— ¿Que ocurre?— Preguntó.

— Nada, todo está bien— Dijo inmediatamente Maikel colocándose de pie— Ya me tengo que ir.

—¿Por qué te vas?— Pregunté.

— Ha sido un día largo y duro, quiero llegar a mi casa a relajarme— Respondió.

Asentí y me levanté para acompañarlo hasta la entrada de la casa.

— Prométeme que estarás bien— Dije mientras apretaba su mano como señal de despedida.

— Claro que si, todo estará bien— Respondió con una sonrisa.

Igualmente sonreí y observé como se alejaba lentamente por la calle, confiaba en su palabra, él es la persona más fuerte que conozco, desde pequeño ha ocultado su dolor. Una vez nos subimos a un árbol, porque  nuestros aviones de control remoto se habían quedado atorados en la cima del árbol, ambos logramos subir y recuperar nuestros aviones pero cuándo estábamos bajando, Maikel se resbaló y  rápidamente cayó al suelo, yo preocupado intenté bajar lo más rápido posible para ayudarlo pero por apresurarme también me resbalé, caí y empecé a llorar, me dolía mucho, apenas teníamos 8 años, pero él no lloraba, aunque sus ojos estaban llorosos no dejó escapar ni una lágrima, se colocó de pie y me ayudó a levantar, me secó las lágrimas, tomó mi avión y me lo entregó para que siguieramos jugando. Maikel siempre ha sido fuerte, pero aún así, es un humano, y todos los humanos  tenemos sentimientos, sé que él está sufriendo en éste momento y espero que pronto esté mejor.

Apenas entré a la casa, ví como Ren me miraba confundido.

—¿Que le ocurrió?— Preguntó.