Capítulo 15.

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ETHAN

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ETHAN.

Diana estaba muerta, yo la maté. Vi su vida irse cuando le arranqué el corazón.

La voz de mi padre llama mi atención. Camino hasta el espejo y me miro en el esperando que él aparezca. Cuando lo hace su expresión derrocha furia.

— ¿Qué te afecta tanto? —Pregunta.

— Padre. —Suspiro— No es nada.

— Sabía que en algún momento te enterarías de que Diana jamás llegó al cielo y tampoco al infierno. Ella quedó en el otro lado después de lo que ocurrió, atrapada en el palacio donde su alma permanecerá eternamente sin consuelo.

— Me da igual donde esté. Ellos la han buscado, están tratando de encontrar algo con lo que volver a destruirme ¡No voy a permitirlo! —Grito, golpeo el lavabo y padre me hace callar utilizando uno de sus trucos.

— Diana no es un arma que puedan utilizar en tu contra ¿O me equivoco?

— Diana no me importa en absoluto. Lo único que quiero es hacerles sentir dolor, tanto que me supliquen por su vida antes de que los mate. Eso es lo que quiero.

— Saber que ella es un alma en pena con la que puedes volver a hablar te afecta. Puedes contármelo hijo.

— No.

Él sonríe. Estoy siendo completamente sincero. Mi humanidad se esfumó el día que la maté, desapareció cuando vi su corazón en mis manos y supe que tener sentimientos te hace ser una persona débil, y vulnerable.

— Te creo. Es la primera vez que me dices la verdad. —Muevo la cabeza—. Ahora dime otra cosa.

— ¿Qué?

— ¿Por qué le curaste la herida a Walker? Pudiste dejarlo morir como tanto deseas. Es un obstáculo. Solo fue el portador del cuerpo que iba a ser tuyo.

— Aún deseo que sea mío. —Confieso—. Yo no lo curé. Muerto me sería más fácil quedarme con su cuerpo, solo tendría que introducir mi alma dentro de su cadáver.

— ¿No fuiste tú?

— No.

Por su cara me doy cuenta de que tampoco fue él. Walker se curó poco después de apuñalarse. No me sorprendió porque pensaba que padre había hecho algo al respecto, que no quería que él muriera todavía porque aún no está en nuestros planes.

— Tengo que irme. Sigue con el plan hijo, hazlo todo como habíamos planeado y no te desvíes por ninguna distracción. —Está amenazándome. Si hago algo que él no acepta, hará algo para castigarme.

Desaparece.

Estoy dispuesto a hacer cualquier cosa, pero mi primer objetivo es alejar a Yulima y Walker de Diana. Un alma en pena puede ser muy peligrosa, no tiene nada más que perder, y no teme al infierno. Tal vez quiera vengarse por lo que le hice o hacerme sentir algo para que la culpa regrese. Cuando escuché su voz y recordé en carne propia lo que ocurrió, consiguió hacer sangrar mi corazón.

EL JUEGO DE LA BESTIA. ® [02]    Donde viven las historias. Descúbrelo ahora