CAPITULO XXX: D E S A S I R

2.7K 168 23
                                    


-Detesto tener que usar esta silla de ruedas, quisiera que esta pesadilla acabara de una vez por todas- dije mientras trataba de ponerme de pie apoyándome de los hombros de Charlie para entrar al tomógrafo.

-Deja de quejarte, te prometo que pronto saldrás de esto. Ahora cállate y no te muevas- dijo con seriedad mientras manejaba el aparato junto con el técnico. Casi no escuchaba mucho estando dentro, tenían que estar checándome porque había recibido golpes en la cabeza y Charlie quiera cerciorarse que todo estuviera bien.

Me ayudó a volver a la silla de ruedas con mucho cuidado -Bien, uno... Dos... Listo- dejó salir un largo suspiro.

-¿Y cómo estoy? - pregunté mientras miraba la pantalla sin entender absolutamente nada.

-No se observó nada, solo una pequeña inflamación en esta zona...- señaló- Pero no me parece que sea algo alarmante, de todas formas, enviaré los cd a neurología para que me manden una valoración- tocó mi hombro y sonrió con seguridad.

Durante dos meses y medio había estado quedándome en casa de mis padres bajo observación, trabajaba desde casa así que no me preocupaba por nada de la empresa, todos los días llegaba un fisioterapeuta a darme rehabilitación, Charlie también llegaba casi todos los días para ver mi avance y él era quien me acompañaba al hospital cuando era necesario. Tomaba demasiados medicamentos, había perdido peso considerablemente, aún sentía dolor, a veces mucho, a veces poco, lo único que sabía era que había estado a punto de morir y por suerte lo había librado.

Durante mi estancia en el hospital estando consiente, e incluso después de que me dieran de alta, esperaba poder ver a Laurence, pero eso no pasó, sabía que ella también había estado en una situación grave, aunque no tanto como la mía, pero nada impedía el que no pudiésemos vernos.

Tras varios intentos por saber de ella y ver qué Charlie cada vez me informara menos sobre su estado, dejé de preguntar, estaba seguro que Laurence había tomado la decisión de alejarse porque seguramente se sentía culpable de todo, pero por mi estado y no pudiendo hacer más nada, y entendiendo todo eso, decidí simplemente respetar esa decisión a pesar de mis grandes ganas por volver a verla, lo único que me mantenía tranquilo era saber al menos que ella se encontraba bien.

-Hace dos días me dieron un reconocimiento por las obras de caridad que hacemos en el hospital, me hubiera gustado que estuvieras, te envié unas fotos, pero no me leíste- comentó Charlie mientras manejaba de regreso a casa de mis padres.

-Vi el mensaje, pero he estado muy ocupado, es más difícil cuando no estás presente en tu empresa, además hago demasiadas video llamadas al día-

-Al menos te mantienes ocupado ¿Cómo te has sentido estos días? - me miró de reojo

-Aun siento inestabilidad para caminar cómo pudiste ver, las pastillas apenas controlan el dolor, me alegra que te resignaras en darme unas píldoras para dormir, esta semana ayudaron demasiado, dormí como un bebe- reímos juntos

-Me alegra que pudieras dormir mejor, cuando menos te lo esperes verás que ya podrás caminar sin ayuda de nada y respecto al dolor, es normal que aún lo sientas, tuviste demasiados golpes, por eso el tratamiento debe ser constante al igual que la terapia... Por cierto, mi madre está bastante feliz y le causa mucha tranquilidad que te mudaras con ellos por ahora que estas así... ¡Ah! también ayer llegó un servicio de limpieza a tu departamento, pasé por ahí y quedó muy bien, tu secretaría me avisó-

-Sí, le pedí que te avisara de ello, y por lo que me dices de mi madre, me lo dice casi todos los días, dice que me quede ya definitivo con ellos, pero es momentáneo, de hecho, ya quiero volver a mi departamento de nuevo con Khal... Oye, hablando de eso... ¿Sigues con los planes de mudarte con Rose? -

Amor En NegaciónWhere stories live. Discover now