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-¿Como es posible?- me pregunto Sara- si esa vez no tuvieron nada de nada ¿O si?

-No- le respondí- lo pare en el momento.

-Debes decir eso en la corte.

-No, porque no tengo pruebas, ya pasaron dos semanas, tendría que ser hasta que estuviera vivo, pero no se si quiero tenerlo.

-Estas en todo tu derecho a no tenerlo Anny

-Me da mas vergüenza con Ezequiel- al decir eso empece a llorar.

-No tenias ni idea de que esto había pasado, no es tu culpa Anna- me dijo Sara mientras me agarraba de los hombros- es un degenerado.

Me abrazaron y pude desahogarme con ellas, les pedí a los chicos que se fueran y las chicas y yo fuimos a casa. Me da tanta vergüenza con Ezequiel, pensara que lo engañe, que realmente quise estar con ese hombre, debo decirlo en la corte, pero no se cómo, tal vez si se lo digo se quiera hacer superior a mi, o algo similar.

-Te dije que fueras al doctor Ann- estaba sonriendo, sentado en una de las sillas del comedor. 

-Ann- me hablo Kenya- ¿Tu que quieres hacer? 

-No se, nunca pensé en estar en esta situación, jamas. 

-Yo ya he estado- dice Sara sonriendo. 

-Sustos, pero ninguno paso a más. 

-¿Recuerdas al primo de Caleb? Con el paso. 

Kenya y yo no volteamos a ver sorprendidas. 

-Eso no nos contaste- tenia la boca abierta Kenya.

-Sorpresa- empezó a carcajearse. 

Y nosotras la imitamos, sentí bien reírme con las chicas, pusimos una película para tratar de liberar todo el estrés, en la noche nos fuimos a dormir en nuestros respectivos cuartos. 

-Anna- voltee a verlo y estaba acostado en mi cama- ¿Qué te pareció? 

-Quítate de ahí- se levanto y se sentó en el piso- creí que no lo decías enserio. 

-Cuando te dije que estaba vivo, no me querías creer y ve. 

-Viniendo de ti, parece que todo es mentira. 

-Anna, soy la persona que más te ha hablado con sinceridad en toda tu vida, incluso admití que asesine a todas esas personas en la corte. 

-¿Para que?- se alzó de hombros- eres lo peor 

Sonrió y sentí que mi celular estaba vibrando, lo tome y era un número desconocido. 


-¿Hola?- conteste y escuche una respiración- ¿Quién habla? 

-Hola Ann- es una maldita broma. 

-¿Cómo conseguiste llamarme? 

-Tengo derecho a llamar por teléfono. 

-¿Qué quieres?

-Alguien me dijo que fuiste al hospital ¿Todo bien? 

-No te debe interesar. 

-Por supuesto que si me interesa, necesito saber como esta la madre de mi hijo. 

-¿Qué dijiste?- empecé a sudar- ¿Cómo lo sabes? 

-Por Dios- se rió- si yo se cuando te hice mía, ¿Creíste que ese día me ibas a dejar con las ganas? 

-Te dije que yo no quería- las lagrimas empezaron a correr por mis mejillas- te dije que cuando estuviera lista. 

-Tu y yo sabemos que ese momento no iba a llegar y preferí adelantar las cosas. 

-Me violaste Andy

-Recuerdo que no era así, en ese momento tu querías.

-Pero me arrepentí.

-Yo se que querías Ann.

-Lo diré en la corte.

-Sabes que voy a decir si a todo.


Colgué el teléfono, y tenía nauseas muy fuerte, entre al baño y vomite, sentí cómo me sobaban la espalda.

-¿Qué pensaba ese idiota? De seguro alguien escucho todo lo que dijo.

-Debo decirlo en la corte. 

-No pueden determinar si es de él- lo voltee a ver.

-Tienen en los registros que antes intento violarme. 

-Pero de esto no tienen prueba, lo puedes intentar, pero no es seguro que también pongan ese cargo o incluso lo pondrán cómo si tu hubieras querido.

Empecé a llorar y el me abrazó, fue la primera vez que sentí cariño hacía el, estaba ahí para mí.

Pero debo decidirme, ¿Tendré ese bebe? 

RETURNS (Andy Biersack)Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum