¿Amor o amistad? Primera parte. (Super Junior-Yaoi)

Capítulo 87 "Arroz" (Dognhae)

87. “Arroz” (Donghae)

 

 

 

Hacía un mes y medio que nos habían descubierto… Un mes y medio que no dormíamos juntos… ¿Por qué? Por que nos vigilaban. Si, si… Hacían inspecciones sorpresa cada día o dos días o tres…Nunca sabíamos cuando aparecerían, y si nos encontraban juntos todo se terminaba por que habíamos prometido que dejaríamos nuestra…”relación insana”. Pero lo gracioso era que en el escenario teníamos que seguir actuando como Eunhae. ¿Cómo se suponía que debíamos hacer eso? Era tan difícil como incoherente.

Justo volvíamos de China y nos dieron unos días libres para que cada uno hiciera lo que quisiera. En general cada uno se fue a su casa, pero nosotros acordamos ir dos días a casa de mi madre y dos a casa de la suya. Así al menos pasaríamos cuatro días juntos y podríamos “estar juntos”. Pero la cuestión era que no podían darse cuenta los de la SM…Así que hicimos el paripé de irnos a nuestras casas por separados, pero Eunhyuk al llegar a la suya, sin entrar siquiera, fue a la mía, donde le esperaba en la estación.

Pasé mi brazo por encima de sus hombros y le atraje hacía mí.

-Te echaba de menos… Hyukie…-susurré.

-Y yo a ti…-me guiñó un ojo- Pero todo va a ir bien. Al menos tenemos cuatro días…

Que después de un mes y medio nos sabrían a poco, pero menos da una piedra.

Al acercarnos a mi barrio le solté y caminamos con la distancia prudencial. Mi madre nos vio desde la ventana y saludó contenta.

-¡¡Hijo!! –salió corriendo y me abrazó.

-Hola mamá.-le devolví el abrazo.

Entonces estrechó a mi chico y le palmeó las mejillas.

-Estás muy delgado. Aunque os habéis puesto fuertes.-comentó.

-Estoy bien señora.

-Llámame mamá también.-sonrió.

Ambos nos miramos y yo me encogí de hombros.

-Nada de vergüenza, eres como un hijo para mí. Has ayudado mucho a mi Hae… Así que eres de la família. ¿De acuerdo?

Eunhyuk asintió contento y entramos en casa. Nos había preparado una buena comida. Había de todo.

-Mamá… Esto es demasiado.

-Shhh. A callar y comer. ¿Vale?

-Ok. Ok.

Cualquiera le decía que no. Me sentí tan bien estando en casa y teniendo a mi chico allí… Era el mejor sitio del mundo en realidad… Echaba de menos a mi madre y verla así de feliz me ponía bien. Me tranquilizaba. Y encima poder estar con Eunhyuk.

Se pasó toda la tarde preguntándonos cosas de las giras, de las canciones, de las fans, de la compañía… Parecía no tener fin su interés. Pero le respondimos a todo. Por la noche fuimos a cenar a un restaurante los tres y presumió de hijo…Cómo no. ¡Le encantaba! Y encima iba diciendo que ahora tenía dos hijos famosos.