Astrid ha pensando en un plan para tener novio durante las vaciones de verano.
Su madre la obliga a ir a un curso de Química y se tiene que olvidar del viaje con sus amigas.
Una cuenta falsa en Instagram y un chico majo en su curso, podrían ser una...
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"Hey, gracias por ayudarme a llegar a los mil seguidores". El mensaje que Benja le había enviado a su cuenta falsa fue lo último que Astrid leyó antes de ir a dormir. Segundos después, suspiró con profundidad por lo que creía que había ocurrido entre Alexander y ella, y se dejó abrigar en los brazos de Morfeo.
«Pueden ser solo ilusiones de tu mente, no te apresures a afirmar nada. Ni siquiera entendías gran parte de lo que te decía», se dijo como nota mental.
Esa noche había acontecido bastante. Matías se había olvidado de su hermana al haberse encontrado con Valentina. Meyson había estado bailando con Eissi hasta casi quedar dormido, después buscaron un sitio en el que pudieran descansar y él, sin anticiparlo, recargó la cabeza sobre sus hombros.
-Oie... Astrud... -articuló con dificultad después de haber bebido bastante-. Edes maabrillosa...
-¿Qué?
-Eres maabrillosa -pasó su brazo alrededor de su hombro y se acercó más a ella.
-Querrás decir, maravillosa. -Sonrió.
-Esacto... mebustó balar avec dua.
-¿Qué? -inquirió con cierta gracia. Verlo en ese estado la hacía reír, pensaba en si podría recordarlo al día siguiente y en si se lamentaría por haber hecho el ridículo frente a ella.
-Frandes... aisti a un cruso en la uni...
-No quiero ser pesada, pero no te entiendo -respondió con media sonrisa.
-Oldidalo, no imdorta...
Para cuando Benjamín los encontró y vio lo que ocurría, tuvo claro que la chica comenzaba a gustarle y que, por la misma razón, debía hacer algo para apartar a su primo del camino. Fue el estado de ebriedad en el que Alexander se encontraba, lo que le permitió acercase sin levantar sospechas. Lo ayudó a reincorporarse y como en un acto de buena fe, prosiguió a llevarlo a casa, no sin antes disculparse con Eissi.
-Lamento no poder quedarme más tiempo...
-No te preocupes, ya es tarde. Matías y yo también deberíamos irnos. ¿Lo has visto?
-No... Puedo ayudarte a buscarlo.
-Oh, no es necesario. Lleva a Meyson a casa...
-Quizá tú y yo podríamos quedar otro día... No sé, yo...
-Mañana nos vemos en el colegio.
-Después del colegio podríamos conversar más... -propuso con cierto nerviosismo.
-Sí, no estaría mal -respondió ocultando la felicidad que en ese momento la albergaba.
-Astrud... -susurró Alexander volviendo del sueño, una vez más esforzándose por hacerse entender-. Dua e mua pod... podd... emo... etar undía...
