•°Capitulo XIII•°

2.2K 185 229
                                    

Atazagorafobia
(Especial aniversario de la paz)


La atazagorafobia es el miedo excesivo al olvido, lo que incluye tanto miedo a olvidar, como el miedo a ser olvidado o reemplazado por los demás. A pesar de que se trata de una sensación común, la atazagorafobia ha sido poco descrita en el lenguaje científico. De hecho, ha sido más puntualizada por filósofos y literatos quienes hablan de la atazagorafobia como el miedo al anonimato eterno.

El acto de recordar es una función central para los seres humanos. Entre otras cosas nos permite mantener un sentido de integridad. Sirve además como una herramienta de identificación que nos hace posible responder a las demandas del presente y del futuro.

El acto contrario, el de olvidar, es un proceso que ocurre a la par de la consolidación de memoria. Nos dice la neurociencia que, desde un punto de vista adaptativo, el olvido permite la depuración de la información innecesaria o irrelevante, o bien, permite que bloqueemos experiencias traumáticas y así evitar cierto malestar.

El miedo de a alguien dejar, de a alguien olvidar... O olvidado estar un dolor que preferimos evitar... Un dolor que se tendrá que afrontar.












La noche es joven se escucho una vez decir y pues los que se tomaron a pecho aquellas palabras fueron unos 4 chicos, y era claro que querían celebrar ya que dos de ellos apenas pisaban dichas tierras, no eran más ni menos que 2 hermanos europeos. Rusia y Ucrania los cuales guiado por otros 2 hermanos Americanos, como lo son Cañada y usa los cuales querían llevarlos a disfrutar de las vistas latinas, por lo que después de Cuba y puerto Rico llegaron a Paraguay. Y empezó aquella fiesta sin fin, de unos jóvenes si preocupaciones ni responsabilidades que más se podía esperar, la bebida fue consumida a montones mientras la vida disfrutaban dinero pensar, y mientras Canadá cuidaba al ucraniano Rusia y usa ya se habían perdido por distintos lugares de ese bar.

Fue entonces que la mañana o bueno tarde lluviosa de aquel día surgió, la noche había sido de bebidas y alcohol pero la mañana fue peor, desgraciadamente de vuelta al hotel tenía que estar, claro si no querían un regaño por parte de URSS. Mala decisión... Peor no podían tomar. El único consiente fue el canadiense que la noche anterior después de dejar a Ucrania ya seguro tomó un taxi que al hotel seguro lo dejó y fuera de este crimen lo saco.

Tarde lluviosa, risas sin fin, y un country que solo el perdón anhelaba, todos acabaría embueltos en llanto y dolor... Todo se paga en la vida... Que cierta es esa frase... El mundo es un pañuelo... Eso también.

__Uuu esa chiquita suelta __

Gritaba un gringo emborrachado mientras su mirada se posaba en aquel ucraniano el cual dormía con ternura por aquella boracherra.

__Eh deja de ver haci a mi hermano no quiero sobrinos todavia__

Mencionó el ruso el cual conducía mientras aumentaba la música con emoción y risas mientras trataba de concentrarse en el camino.

__Eso debería decirle a Canadá no viste como Ucrania lo miraba jaja... A mi me gusta otro tipo de chicos__

Comentó el de barras rojas y blancas mientras aumentaba aquella música con la que ambos chicos cantaban y reían, o claro eso hasta que el ruso logró escuchar el tono de su telefono.

__Uh~ quien es~__

Mencionó el Estado unidense el cual trataba de ver el teléfono de su amigo el cual lo evitaba mientras ambos reían.

○~Φόϐος~○Donde viven las historias. Descúbrelo ahora