⊣𝑆𝑂𝑀𝐸𝑇𝐼𝑀𝐸𝑆 𝐿𝑂𝑉𝐸 𝐿𝐴𝑆𝑇𝑆 𝐴 𝑊𝐼𝑁𝑇𝐸𝑅 ⊢ ❄MEWGULF❄

14.

Los días pasaban sin muchas novedades. Mew dormía gran parte de la mañana hasta que llegaba la hora de abrir el restaurante, ahí pasaban más rápido, entre atender clientes y ocuparse de la nueva sucursal que el manejaría por completo, no tenía mucho que hacer, algunos días salía con los chicos del restaurante a tomar y otros Henry lo invitaba a cenar, no le había comentado sobre lo que paso con Gulf pero, el parecía saberlo.

Al principio Mew le enviaba mensajes a Gulf para saber cómo estaba, si estaba comiendo bien y para asegurarse que no se lastimara si intentaba cocinar, esos mensajes fueron respondidos alegremente solo los tres primeros días, luego poco a poco Gulf contestaba cortante y después no contesto más. Dos meses pasaron y ya era casi un año desde que se conocieron, Mew añoraba tenerlo cerca cada día, extrañaba el suave aroma varonil que desprendía su cuerpo o sus adorables dientes que sobresalen cuando sonríe.

En su celular mantiene algunas fotos que tomo a escondidas y cada noche las mira entre sonrisas y risas al recordar lo ocurrido el día en que tomo cada una, hasta que llegaba a su favorita, es Gulf sonriendo para él mientras juega en aquel río congelado con sus mejillas y nariz roja, ama demasiado esa foto, no solo por que es el, si no porque ese día se decidió a decirle cuanto le quería, después tuvo que cuidarlo porque se había enfermado, pero definitivamente ese es su día favorito.

Había estado intentando llamarlo pero, nunca respondía, entendía que tal vez Gulf estaba molesto o quizás solo ya no quería saber de él, sin embargo necesitaba verlo así que en alguno de sus días libres se escapaba y tomaba su auto para ir a la ciudad de Gulf, esperaba junto a la puerta de su universidad a que saliera y una vez que lo veía salir sosteniendo su celular frente a el, jugando mientras camina, una gran sonrisa se muestra en su rostro y su corazón se tranquiliza. Mew había notado algo esos días que iba a verlo y es que Gulf siempre estaba solo, sentía pena y quería acercarse pero, cuando se decidía el recuerdo de sus propias palabras lo detenía, así que se obligaba a solo verlo de lejos y cuidarlo desde ahí.

Esa tarde no era totalmente distinta, no era su día libre y en realidad solo tenía que ir allá para arreglar algunos asuntos del restaurante, sin embargo se dedico a terminar todo lo más rápido posible para llegar a la hora del termino de sus clases. Los primeros días se le dificultó verlo, no conocía sus horarios y al parecer estos cambiaban cada semana por los horarios de trabajo. Cuando Gulf comenzó a trabajar o más bien hacer su servicio verlo se volvía más complicado. Hoy le tocaba asistir y para alivio de Mew pudo verlo antes de que se fuera, nunca lo seguía a la empresa o cuando salía de esta se conformaba con verlo unos minutos mientras caminaba hacia su auto.

Ya que tenía el resto del día libre, camino un largo rato por la ciudad entrando a tiendas de un dólar y comprando comida, más bien dulces, no había mucho que hacer y a excepción de Gulf y los encargados de la apertura del restaurante no conocía a nadie más. Se encontraba cerca del lugar de trabajo de Gulf pero no iba más allá que ver de lejos el edificio, prácticamente se había convertido en un gran acosador pero, aquellos días en que estuvo sin verlo fueron una tortura constante.

Paso al menos una semana sin comer apropiadamente, no tomaba bien las ordenes en el restaurante, cada día dormía más o menos de lo normal, los demás empleados también notaron su cambio de humor y la ausencia de cierto chico de cabello oscuro y cejas gruesas, así que se dedicaron a distraerlo invitandolo a tomar y después al karaoke y aunque no sentía muchos ánimos para divertirse agradecía sinceramente el cariño que sus compañeros le demostraban.

Gulf fue consciente desde el principio que Mew lo estaba observando, aquel día deseo acercarse y hablar con el, preguntarle el porqué estaba ahí, si ya había aclarado sus sentimientos o solo decirle que lo estaba esperando que no tarde más pero, justo como paso con los mensajes la idea de que si el se metía seria más difícil para Mew aclarar lo que siente le inundaba la mente, así que solo fingía no verlo aunque dentro de él tener la atención de aquel hombre lo hacía muy feliz, aún cuando uno de sus compañeros le dijo que eso era acoso y que debía denunciarlo solo le causo risa al pensar que si Mew escuchaba eso se moriría de vergüenza.

Cuando lograba verlo a lo lejos sentando cerca de la entrada una pequeña sonrisa se pintaba en su rostro pero, la ocultaba conforme se acercaba, no quería que el supiera que sabe que está ahí porque eso probablemente implique que deje ir, así que lo mejor que podía hacer era fingir no verlo. En algunas ocasiones le tomaba fotos para más tarde cuando estuvieran de nuevo juntos pudiera burlarse de él.

Gulf mantenía una pequeña esperanza, se convencía de que su chico pronto aclararía su sentimientos por él y podrían estar juntos, no le importaba mucho esperar, no es que realmente tuviera prisa por iniciar una relación así que esta armado de paciencia cada día y se repite así mismo que todo se va arreglar más pronto de lo que el cree, aún cuando ya pasaron dos meses el sigue convencido de que Mew volverá a él.

Hoy es un buen día, le han permitido salir antes del trabajo por lo que tomo sus cosas apresurado, se despidió y salió del gran edificio que le causaba constantes dolores de cabeza, había una actividad que le gustaba hacer cuando sale del trabajo y es ir a la heladería que está a un par de cuadras. Se había vuelto adicto a los helados pues era casi la única tienda que encontraba abierta al salir del trabajo, había un sabor que a un no probaba pues este es popular y se termina temprano por lo que ahora que había salido antes podía probarlo.

Se apresuró a llegar a la tienda, caminaba entre la gente totalmente ansioso, era difícil hacer que el desistiera de algo así que por eso corrió, se sentía cansado pero, también feliz, le gustaban días como ese donde podría descansar más y relajarse ya que lo últimos meses no estuvo durmiendo correctamente, sin embargo su felicidad se cortó rápidamente al entrar a la tienda.

Esperaba encontrarselo en algún momento, era algo inevitable.

Intento recuperar el aire que había perdido al correr, mantuvo su mirada fija en él quien también lo veía con un ligero rastro de sorpresa. Mew sostenía en cada mano un helado, estiro su mano derecha hacia él -Es para ti...-Gulf parpadeo lento y un poco dudoso termino tomando el helado que le ofrecía.

-Gracias...-aún estaba intentado entender la situación pero, Mew le hizo una seña para que salieran de la tienda así que lo siguió.

-No deberías correr así, podrías caer y lastimarte, no lo hagas...- Gulf lamió el helado sin dejar de observar su espalda.

-¿me viste?- Mew asintió con una expresión molesta.

-Te vi a lo lejos, casi muero de ansiedad, temía que te lastimaras.- Mew lo había visto correr tan rápido y peligrosamente entre las personas que su corazón no pudo evitar acelerarse, temió por la seguridad del chico.

-¿y como sabias que iba a la heladería? -Gulf inclinó un poco su cabeza sin dejar de comer y viéndolo con sospecha.

-No lo sabía, pero pensé en comprar un helado y llamarte cuando pasaras por ahí para que te detuvieras, también me sorprendí cuando te vi entrar -estiro su mano para limpiar las gotas del helado que caían sobre la mano de Gulf, esa pequeña acción logró sonrojar al menor y él solo pudo sonreír disimuladamente - en realidad, tengo que irme ahora, tengo que ir a cerrar el restaurante...- Mew detuvo su andar cuando llegaron a su auto.

Saco las llaves y abrió la puerta en total silencio, le deba una rápida mirada a Gulf que estaba solo viéndolo como si intentará encontrar las palabras perfectas para decir algo pero, nada salía de su boca, se sintió molesto, la situación para Mew es la misma, quiere tanto lanzarse a él y abrazarlo, decirle que lo extraño y pedirle que jamás se vaya de su lado pero, no puede hacerlo porque no le parece que sea correcto hacerlo mientras Henry lo llama insistente.

–Vaya con cuidado P'Mew, buenas noches –fueron las únicas palabras que salieron de su boca antes de darse la vuelta y caminar lejos de él.

Mew apagó el celular sin verlo y se revolvió el cabello con desesperación. Él es el unico culpable de esta situación, si tan solo pudiera rechazar a su ex novio y cortar comunicacion como hizo con Gulf todo seria más sencillo pero, su corazón insiste en mantener a Henry cerca.

Aunque debía admitir que verlo había mejorado su día considerablemente,tomo su celular antes de encender el auto y escribió un mensaje rápido.

[Realmente te vez bien con ese traje.]

Mew sonrió viendo  a lo lejos como el chico se detenía mientras veía su celular.

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Relleno le llaman a estos capítulos jajaja