Capítulo 20: Mi princesa

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POV HARRY:

Los primeros días sin Elizabeth era frustrantes, la primer semana fue enloquecedora...pero el mes, ¡Fue una tortura!. ¿Qué paso con ella? ¿Dónde está?, nadie quiere hablar del tema porque nadie lo sabe...ni siquiera Malfoy; lo he visto cruzar los pasillos con una furia de los mil demonios, gritaba a quien se ponía enfrente suyo y más de una vez fue llevado con Dumbledore, sin embargo no le han castigado.

Algunos dicen que su padre a muerto, después de todo su estado de salud era delicado. Es la teoría más acertada que muchos maestros y alumnos proponen. Hasta Hermione lo cree seguro.

La clase de la profesora McGonagall tenía ya media hora de haber empezado y Draco no se aparecía aún. Miraba a mi líder de casa para intentar saber algo, pero ella lo evadía completamente; los minutos pasaba cual si fueran horas, las voces en mi cabeza me molestaba por si fuera poco, el sueño me invadía y los nervios por la tercera prueba aún me consumían hasta llegar al miedo.

El reloj avisó a los alumnos del aula que clase había acabado, miré el pergamino que tenía frente a mí y noté que estaba en blanco. ¿Cuándo fue que los minutos se volvían horas y las horas minutos?.

-Harry, vámonos- la voz de mi leona amiga me obligó a mirarla, una mueca se hizo presente en su rostro.-No haz comido bien y la prueba será en tres días; promete que después de herbología comerás tan siquiera un poco más-

Tome mis cosas y salí del escritorio sin responder, Ron y Mione me seguían por detrás en silencio; había pasado un mes y el tema de Elizabeth aún se murmuraba en los pasillos de Hogwarts: "¿Supiste que su padre murió?""¿También estará enferma?""¿Renunciará al torneo?""Escuche que su padre agonizó por tres días" entre muchas cosas más eran los actuales temas de conversación de las diferentes casas e incluso de las escuelas foráneas.

-¡Mira inútil!- el golpe de un cuerpo siendo azotado contra la pared nos desconcertó a todos. -o dejas de hablar de Elizabeth y su padre o yo te partiré toda la cara- Draco ya había hecho sangrar a uno de nuestros compañeros de Gryffindor que seguramente dijo una cosa inapropiada al alcance de sus oídos.

Crabbe y Goyle estaban serios, Blase Zabini ayudaba al rubio a sujetar a su presa; muchos se juntaron al rededor sabiendo que una pela había empezado. No sabía cuánto tiempo había estado Malfoy ahí pero pareciera que acababa de llegar por que el rostro de sorpresa de sus "amigos" era el mismo que todos los demás. El rubio soltó un golpe a la cara del Gryffindor, chico que concíamos por supuesto, pero no tenía ni la más mínima intención de ayudarlo ¿Por qué? ¿Por qué estoy tan furioso?.

-¡Malfoy! ¡Finnigan!- fue la profesora quien los separó con un hechizo. Seamus estaba sangrando por la nariz mientras que lo Fúricos ojos de Draco lo penetraban con rencor. -¿Que está pasando aquí?-

-¡Fue Malfoy quien comenzó!-

-Y lo haría de nuevo ¡Maldito hijo de sangre sucia!-

-¡Basta!- gritó la profesora Minerva. Hermione estaba petrificada por el Show que se plantó en medio pasillo, Ron tragó saliva y supongo que fue porque nunca había visto a McGonagall tan enojada desde hace tres cuatro años que llegamos tarde a su primer clase.-Finnigan usted ira a enfermería- ordenó- En cuanto usted joven Draco...- la profesora lo miró con seriedad, aligeró evidentemente la expresión como si entendiera todo lo que estaba pasando, suspiró agotada y por fin habló- Lo llevaré con Dumbledore-

-¡Eso no es justo!- le defendió uno de sus regordetes amigos- Él sólo defendió a Elizabeth...-

-Lo sé- calmó con maternidad la líder de Gryffindor- ¡Todos a sus clases! ¿Que esperan? -

Ella, Mi princesa. (Draco Malfoy)|TERMINADA| (#1) - AUTORA ORIGINALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora