My Blood [Voltron Legendary Defender]

Capítulo 28- Preparaciones Y Discusiones.

Finalmente, había llegado el momento. Los Olkari los habían informado de que oficialmente, el arma que usarían contra Zarkon estaba lista. Lo único que quedaba era esperar por instrucciones de la Espada y estarían listos para marchar en batalla y derrotar a Zarkon.
Todos en el Castillo se encontraban más que nerviosos, pero Lotor, Allura, Lance y Coran eran los más impacientes y ansiosos por la batalla, pues prácticamente eran los únicos que habían presenciado de primera mano una guerra antes. Y si todo salía bien, esta sería la última batalla.
Si todo salía bien, Coran no tendría que preocuparse por perder a alguien más en batalla.
Si todo salía bien, Allura no tendría que revivir el caos de la guerra.
Si todo salía bien, Lotor podría salvar a su madre de sí misma.
Si todo salía bien, Lance podría descubrir que fue lo que realmente le pasó a su padre.
Keith, Shiro, Pidge y Hunk tenían la ventaja de la ignorancia, no sabían realmente cómo era la guerra. No sabían cómo se sentía perder a alguien a quién apreciabas, cómo se sentía que alguno de tus padres te mandara lejos para evitar que terminaras en el ojo del huracán, cómo era ver tu hogar reducido a meras cenizas. Pero si no acababan con Zarkon durante esta batalla, ellos también aprenderían. Aunque, de alguna manera, ya estaban aprendiendo: Shiro había sido torturado por los Galras, Pidge había perdido a su hermano y a su padre, que seguían desaparecidos, Keith acababa de descubrir que su madre era parte de la Espada, y tanto Hunk como Pidge habían sido alejados de sus familias sin previo aviso. Pero aún ninguno experimentaba aquello como los otros cuatro lo habían hecho:
Coran, que perdió a sus dos amigos, Allanon y Alfor, gracias a la guerra.
Allura, que creció en medio del enfrentamiento y eventualmente perdió no sólo a su padre Alfor, pero también a su planeta entero.
Lotor, que fue criado como el hijo que eventualmente heredaría todo lo que Zarkon tomó a la fuerza, pero que fue rescatado de su destino por su madre en su último acto de cordura.
Lance, cuyo padre Allanon desapareció de la noche a la mañana y tuvo que ser enviado lejos por su propia protección.
Cada uno de ellos había vivido perspectivas diferentes de la guerra, pero a final de cuentas, todos lo experimentaron. Y no era algo que desearan para sus amigos. Por eso, el reinado del terror de Zarkon sobre la galaxia terminaría pronto.
Allura irrumpió en el puente, prácticamente hecha una furia. Detrás suyo entró otra figura, la cuál los demás reconocieron como un miembro de la Espada de Marmora.
—La Espada quiere retrasar el ataque —informó la princesa, aún luciendo enfadada.
Hubo un coro de exclamaciones de sorpresa, y Pidge fue la primera en preguntar.
—¿Por qué?
—Thace no ha vuelto al comando central —informó el miembro de la Espada—. Sin él, no podemos proceder. Tememos que haya sido descubierto por Haggar.
Lotor se tensó visiblemente ante la mención de su madre.
—No podemos retrasar la batalla. Si Thace fue descubierto, sólo es otra razón para seguir adelante con el plan- nos daría la oportunidad de rescatarlo antes de que Zarkon decida matarlo por traición —argumentó Allura.
—En ese caso, Zarkon puede estar esperándonos ya. Usará a Thace como carnada y nos tenderá una trampa —interrumpió Keith.
—Zarkon sabrá que venimos de todos modos —habló finalmente Lotor—. Es un tirano, pero no es estúpido. Sabe que planeamos algo, así que eso no cambiará nada.
—Tienen razón —siguió Shiro—. Lo mejor es seguir con el plan. Zarkon sabrá que vamos por el de algún u otro modo, y es mejor hacerlo antes de que mate a Thace.
El miembro de la Espada se mantuvo callado, aún con su máscara puesta, por lo cuál era imposible leer su expresión.
—Le transmitiré sus pensamientos a la Espada.
Y luego de eso, simplemente se marchó.
Allura se giró a mirar a los demás.
—Procederemos con el plan, con o sin la ayuda de la Espada. Es nuestra oportunidad de detener a Zarkon, y no vamos a desperdiciarla.

Thace dio un suspiro de alivio, logrando escapar de los Druids que lo seguían a todas partes e infiltrándose en una de las salas de comando. Tenía que comunicarse con la Espada, y tenía que hacerlo antes de que alguien lo descubriera.

Acxa irrumpió en la sala, haciendo a Ezor dar un brinco. Ezor iba a protestar, diciéndole que no la asustara así, pero se calló al ver la expresión en el rostro de Acxa.
—Lo encontré.
Y entonces, el caos se hizo en la habitación.

Dos días. Según el plan, en dos días más procederían con el ataque contra Zarkon. Era algo extraño, pensar como casi se encontraban a punto de terminar la guerra. Un sentimiento conjunto de nerviosismo mezclado con ansias se instaló en todos por igual. Los Olkari, los Paladines, y la Espada.
Era una de sus últimas reuniones para discutir los últimos detalles del plan. Los Olkari acababan de retirarse, igual que los representantes de la Espada, dejando así solamente a los que habitaban el Castillo.
Un silencio inundó el lugar, con todos perdidos en sus pensamientos.
—Prin... Allura —llamó Lotor, captando la atención de todos.
—¿Sí?
Lotor dio un hondo suspiro antes de continuar.
—Quiero ser yo quien dispare el arma para inmovilizar a Zarkon.
Allura lo miró por un par de segundos, pero finalmente asintió.
—Muy bien. Se lo comunicaré a los Olkari.
Lotor asintió como agradecimiento.

La Espada les consiguió la ubicación actual de la nave de Zarkon. Allura, con ayuda de otro invento de los Olkari, crearía un agujero de gusano que los llevaría a todos ahí. Pero lo que no sabían, es que probablemente tendrían un par de aliados más que nadie se esperaba.

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Perdónenme por parecer ligue tóxico y tenerlos esperando como más de un mes, y aparte llegar con capítulo re corto y medio de relleno 😔✌🏻 ya el siguiente se pone intenso ahora sí. Por cierto! Para que me griten sobre no actualizar a tiempo (y se lleven adelantos de capítulos 👀) ya pueden unirse a mi servidor de discord! El link se los dejo publicado en mi perfil ahora ;)