Nuestro acuerdo » liskook

XXXIII

Lisa Manoban.

Kim Ye-ri sollozaba y sollozaba, era como un bucle. No se detenía, empezaba a costarme creer en sus lagrimas.

— ¡Ay, por favor, ya deja de llorar! — Exclamó Mark enfadado, por fin alguien lo decía. — ¡Solo di la verdad de una puta vez!  

Como si fuera un milagro, JungKook no replicó aquellas palabras. ¿Estará dudando de su adorada sobrina? Aun así, su rostro estaba sombrío, la línea de su mandíbula se marcaba, su ceño estaba levemente fruncido y sus amigos seguían reteniéndolo.

— Mark, basta. — Suplicó Kim Jennie sujetando el brazo de Ye-ri, pero esta la rechazo y se alejo de ella, como si tuviera algún virus encima, Jennie agachó su mirada y se mantuvo cerca a la chica, a pesar de la negativa que recibió. — Por favor, vete. 

Mark gruñó y se acerco un par de pasos, JungKook se removió y su amigos tuvieron que sujetarlo con más fuerza. 

— No me iré hasta que ella abra la boca y diga la verdad. — Sentenció. — ¿Por qué te demoras tanto en decir la verdad? — Indago él con enfado. — ¿A cual de estos dos te preocupa decepcionar más? — Mark miró a JungKook y luego a Xu Kun, ¿este último que tenia que ver? 

— Yo, ... — Ye-ri abrió su boca y de inmediato la cerró, un par de lagrimas rodaron por su rostro. — realmente lo siento, Mark. — Balbuceó. 

— ¡No me digas que lo sientes cuando no lo haces! — Gritó él, yo salte sobre mi lugar. Esta es la primera vez que lo veo tan enfadado. Creo que la vena en su cuello se romperá, Mark suspira pesadamente y echa su cabello hacia atrás, descubriendo su frente y enseñando sus nudillos rojos y ensangrentados. 

— Mark, — Xu Kun le llamó bastante fastidiado. — largo. 

Con una familia así, era muy comprensible que nunca le dieran la oportunidad a él de contar su parte de la historia. Todos solo caían sobre él y lo lanzaban lejos, su parte de la historia siempre era omitida.

— ¿Por qué no solo lo dejan hablar? — Pregunte, sé que no es de mi incumbencia este tema, pero todos merecen ser escuchados, así sea una vez. Incluso todos estos psicópatas. — Si esta tan alterado y sigue llamándola mentirosa a de ser por algo.  —Les digo. 

— Lo siento, Lisa, pero este no es tu problema. — Jennie me dijo, evidentemente disgustada. — Por favor, vete. — Bufé y negué.

— Se volvió mi problema al momento en el que ella llego y me cacheteo sin razón alguna. 

— ¿Ye-ri, por qué hiciste eso? — JungKook abrió la boca después de tanto tiempo mantenerse callado.  — ¿Qué te sucede?

— Sucede que es una mentirosa. — Contestó Mark, todos lo miramos. La caja de pandora esta por abrirse. — ¿Creíste que el aborto fue espontaneo? — Él se carcajeo con desagrado. — ¿Qué estaba embarazada de un hijo mío? — Se señaló a si mismo con una sonrisa cruel. — Eso nos dijo, ¿no? ¿Quieren saber una sorpresa? 

— Mark, por favor, no... — Ye-ri murmuró, Mark se burlo de ella riendo y ella agachó su rostro. 

— El verdadero padre de su hijo era Nichkhun, estaba embarazada de él y abortó por culpa de él. — Soltó. ¡Mierda! ¡Doble mierda! ¡Triple mierda! ¿Nichkhun? ¡Nichkhun! Mi mandíbula iba a caer al suelo y juro que lo mismo iba para los presentes. — Yo solo fui el idiota usado por estos dos. 

— ¿Pero, que mierda dices? — Clamó JungKook soltándose de JaeHyun y MinGyu para tomar el cuello de Mark. — ¡Las drogas lograron fundir las pocas neuronas que te quedaban en la cabeza!