El efecto de el virus

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Esa noche de luna llena, dos chicos caminaban a toda prisa por el bosque de la reserva de Beacon Hills, tratando de llegar lo más rápido posible a su destinó. Pues lamentablemente ya habían perdido a muchos de los suyos en el camino.

—David... ¿Ya estamos cerca?—. Pregunta la chica que iba a su lado, ya muy cansada de caminar demasiado y sin un descansó. David voltea a verla y asiente. —Ya estamos cerca, Emily. sólo tenemos que salir de la reserva y entráremos al pueblo—.

—Que bueno porque ya estoy...—. la chica es interrumpida por la voz de un hombre mayor que sale de entré un montón de arbustos. —¡Hey, ustedes dos! ¿A dónde creen qué van?—. Pregunto mientras les apuntaba a ambos con una pistola.

—Bueno, verá... vinimos desde muy lejos y buscamos a Scott McCall, ¿Usted sabe dónde lo podemos encontrar?—. Aquél hombre sólo tomo un radió de su bolsillo y habló con alguien, quizás era su Jefe. —Encontré a dos tipos que están buscando a Scott McCall, Es un chico y una chica—.

Ambos miran extrañados al hombre, luego de unos segundos David escucha la voz de una mujer en la radió diciendo —Traelos de inmediato Arthur y no dejes que escapen—.

El sujetó armado suelta un silbido y salen más personas de los arbustos armadas rodeandolos. —¿Qué es lo que ocurre?—. Dijo la chica muy asustada al darse cuenta de que les aputan a ellos dos. —Andando, rápido, la patrona quiere verlos! —.

—No iremos a ninguna parte, no sin antes ver a Scott y a su manada—. afirma David mientras sostiene la mano de su amiga, con toda intención de protegerla. —Si no quieren ir por las buenas, entonces será por las malas—.el señor dispara en el aire y sus aliados se van acercando poco a poco hasta acorralarlos.

Entonces el chico castaño, enciende sus ojos de color amarillo, saca sus colmillos y garras, gruñendole a los cazadores. —¡No den un pasó más! alenjense de nosotros—. Arthur se ríe a carcajadas y le dispara en la pierna, asiéndole caer al suelo inmediatamente. —Emily, ¡Corre!—. Dice entré dientes al sentir qué su herida no se curaba.

-—¡No! David... No voy a dejarte solo aquí—. Emily grito tan fuerte que mando lejos a la mitad de los hombres armados, sí, Emily es una Banshee. Arthur se queja por el gritó tan ensordecedor de la chica, que hasta le habían sangrado los oídos. —¡Maldita Perra! Vas a lamentarlo—. le pega con la pistola en el rostro asiendola caer al suelo también, junto a su amigo David.

****

Theo corría tras Liam por el bosque buscando el origen de aquél gritó. hasta que escucharon a alguien maldecir, ambos se miran unos momentos y se asoman entré los arbustos frente a ellos encontrándose a un hombre armado golpeando a una chica con su arma y a un chico herido en el suelo, Liam sin pensarlo más, salió corriendo hacía aquel montón de abusadores y se transforma al instante soltando un fuerte rugido, con la intención de intimidarlos. Pero al parecer los hombres de Monroe no les asustaba nada, ya que el hombre sólo se echó a reír a carcajadas, junto a sus hombres.

—Tus ojos no me intimidan, niño—. Liam arquea una ceja confundido por lo antes dicho, así que bajo la mirada a dónde estaban sus manos y se percata de que sus garras y colmillos no estaban, vuelve a intentar sacar sus garras, pero fue inútil, no entendía que estaba ocurriendole. —¡Oh!... Pobre bebé, no podrá defenderse sin sus poderes sobrenaturales, espero que sepas pelear— Liam sigue intentando transformarse sin resultado alguno.

La quimera al ver que estaban a punto de dispararle a Liam salé de los arbustos con sus garras y ojos amarillos, rugiendoles. —tal vez él no puede, pero yo si—. Comenzó a correr hacía ellos mientras los aliados de monroe disparaban sin lograr atinarle, Arthur huye del lugar aterrado al ver que Theo comenzaba a clavar sus garras y a cortarles las gargantas a sus hombres.

—Liam, ¿Éstas bien?— voltea a dónde está el rubio y éste lo mira asustado. —No puedo transformarme, Theo, ¿qué me sucede?—. el castaño guarda sus garras y va a dónde se encuentra Liam e inesperadamente le lanza un puñetazo en el rostro, logrando derribarlo. —¡Oye pero ¿qué mierda te pasa?, ¿por qué diablos me golpeaste?!—. Liam estaba furioso por la acción de Theo.

—Eres un chico con problemas de irá, creí que si te golpeaba sin razón alguna te transformarías, pero veo que no funcionó—. La quimera explica y le tiende la mano por tercera vez, el ojiazul algo dudoso tomo la mano de Theo y éste le ayuda a ponerse de pie.

—Eres un idiota— Theo sólo rodo los ojos y sonrió triunfante.

—¿pueden ayudarnos?, le dispararon en la pierna—. la voz de la chica los hace salir de su pequeña pelea e inmediatamente van a dónde se encontraban.

—Theo ayúdame a llevarlo a la clínica veterinaria, tal vez Deaton pueda ayudarnos, si aún sigue ahí—. Liam con la ayuda de Theo ayudan a levantar al chico, al parecer la herida no había sanado y había perdido la conciencia.

Más tarde, ya sé encontraban dentro de la clínica veterinaria, Theo y Emily colocaban el cuerpo inconsciente de David en una de las camillas, mientras el beta buscaba a Deaton por todo el lugar. —Creó que no está aquí— .

—¿entonces que vamos hacer?, necesitamos a un doctor—. pregunta la chica de vestido rosado, obteniendo la atención de los dos chicos. —Trataré sacar la bala yo mismo, pero tendremos que esperar a que despierte, mientras tanto hay que dormir, ya es muy tardé—. la chica asiente un poco dudosa y toma asiento, mientras Theo salé de la clínica y Liam le sigue.

—¿A dónde irás?, creí que permaneceríamos juntos—. Soltó sin más, pues si estaban solos, eran blanco fácil para los cazadores, theo se gira hacía él, con su típica sonrisa burlona.

—No vas a deshacerte de mí tan fácil, iré a dormir en mí camioneta, es más cómodo ahí a que estar en una silla—. Liam rodo los ojos, pero asintió, Theo tenía un punto, éste sigue su caminó hacía el bosque dónde había escondido su camioneta. —Sólo ten mucho cuidado, no quiero que te pasé nada—. Susurra al notar que la quimera ya se había marchado, pero lo que no sabía es que Theo lo escuchó gracias a su super oído y al hacerlo se dibujo una gran sonrisa en su rostro.

Al estar dentro de su amada camioneta se acomoda muy bien en el asiento del pilotó y suspira, cerrando los ojos dispuesto a dormir, pero un montón de preguntas inundaron su mente, como el ¿por qué siempre que ve al ojiazul en peligró, le ayuda y se preocupa por él?. Cuándo el no suele hacer eso, o ¿por qué le gusta tanto estar cerca de él y molestarlo?, no lo sabía o quizás sí y solo estaba tratando de engañarse a si mismo, después de un rato al final logra quedarse dormido.

                             *****

—¡Corey! ¡Corey! Despierta—. Corey comienza a abrir los ojos, al escuchar que alguien lo llamaba, encontrándose con el veterinario mirándole preocupado. —¡Deaton!... ¿Que éstas haciendo aquí?—. rápidamente se sienta de golpe y observa el brazo herido del druida, parecía haber recibido un disparo.

—De hecho, yo me preguntó lo mismo Corey, verás... Monroe me secuestró y me encerró aquí. Me pidió que creará un virus para terminar con la vida sobrenatural. pero no puedo hacer eso así que le di combinaciones sobre fórmulas para hacer un virus, pero terminó haciendo explotar el laboratorio y liberó un virus zombie que ahora se propaga por el aire—. Explicaba el veterinario muy arrepentido de haberle dado aquellos datos.

—y ahora está terminando con la humanidad, pero tambien daña a los sobrenaturales, los vuelve débiles, deben evitar la mordedura de los zombies, de lo contrario podría crearse un ser peor que un zombie—. termina de explicar poco a poco, mientras Corey lo mira extrañado, era confuso, pero también muy malo para él y sus amigos.

—¿por qué me dices todo esto?—.

—Porque necesitó de tu ayuda, para advertirle a los chicos, que Monroe y sus hombres van por todos ellos y se aprovecharán ahora que el virus los ha vuelto débiles—.

Amor y Zombies | Thiam (Editando) Where stories live. Discover now