Provocación

1.6K 123 35
                                    

MIKEY

Nos despedimos de April, de su padre y de Casey. Mis hermanos y yo volvimos a las alcantarillas y el maestro Splinter nos saludó, feliz. Yo corrí hacia él y lo abracé con fuerza. Espero que con eso entienda que le agradezco mucho su apoyo. Me gustaría preguntarle cómo supo sobre mi... diferencia de gustos, pero no aquí. No frente a Raph. Tal vez más tarde. Él me sonrió y me acarició la cabeza. 

-Veo que la pasaron bien, hijos míos -comentó -. Me alegro mucho que hayan vuelto... con ese regalo que me encanta ver en sus rostros. 

-Sí, ocurrieron muchas cosas -dijo Donnie -. Hubieras estado ahí para ver a Casey resbalarse por las escaleras, Sensei. Fue muy gracioso -se rió.

Me di cuenta que el maestro Splinter observaba a Raph como si estuviera leyendo algún pergamino. 

-Bueno -dijo -. Deben estar cansados. ¿Por qué no descansan un poco?

-Buena idea... el viaje largo hizo que me entrara un poco de sueño -bostezó Don.

-Sí, además nos levantamos muy temprano -agregó Leo -. Nos vemos al rato, maestro Splinter.

Nos fuimos a nuestras habitaciones, pero cuando Don y Leo entraron, Raph me apoya contra la pared repentinamente. Me sonrojé enseguida y me quedé mirando sus hermosos ojos verdes. 

-Q-qué estás...? -iba a preguntar.

-Mikey... -me dice, mordiéndose el labio -. ¿Quieres... jugar a algo?

-E-ehh??

-¿O prefieres descansar?

-Y-y-yo... p-prefiero d-dormir un rato... -contesto tartamudeando.

-Bien... -acerca su boca a mi oído y me susurra -. Nos vemos.

Se aparta y entra a su cuarto. Yo me quedo recuperando el aliento y espero a que mi corazón se tranquilice. ¿P-por qué hizo eso?... Él nunca pregunta las cosas así. Entro a mi cuarto, más sereno, y me lanzo a mi cama boca abajo. Agarro mi almohada y la aprieto. Aún no puedo sacarme el rubor del rostro. 

RAPHAEL

Estoy con mi espalda apoyada en la puerta y con mi mano tapándome la cara. Aún estoy conmocionado por lo que hice, pero gracias a eso me di cuenta de la reacción que tuvo Mikey. Sonrojado, nervioso, tartamudo... No sé si hacer esto es lo correcto, pero él no va a decirme nada si me acerco normalmente y le pregunto. Él tendrá que decírmelo por su propia boca... en el momento que lo esté provocando.  Debo hacer lo mismo que en la casa de April..., debo hacer que se caliente y... ¡Ay, Raph! ¿Cómo puedes....? Aaaahjjg, ahora entiendo porqué Mikey se puso así de nervioso cuando le dije cómo estaba su cabeza... "Caliente", Claro, ¿quién no...? Espera... Mmm... tal vez eso funcione. 

MIKEY

En la hora del almuerzo Raph ha estado observándome mucho. Casi no podía tragar bien y mis manos temblaban. Estaba siendo víctima de sus miradas y de sus actos... Miraba a mis hermanos para pedir ayuda, pero estaban tan concentrados gozando de la comida que no se dieron cuenta de lo que pasaba frente a sus narices. El maestro Splinter... creo que fingía no darse cuenta, porque a veces me miraba, pero cerraba automáticamente los ojos. 

Luego, fui a ver con Leo SRMFF un episodio que ya habíamos visto... ¡pero sigue siendo bastante bueno *D*! De pronto, siento a Raph sentarse en el sofá, alimentando a su tortuga mascota. Percibo sus ojos en mí. ¿Me estará viendo o a la TV? Giro un poco mi cabeza para verlo, y mi deducción era correcta. ME ESTÁ MIRANDO A MÍ!!    O//////O    Casi no pude concentrarme en el capítulo. En algunas ocasiones tuve que gritar y levantar el brazo en forma de apoyo para que mi actitud no fuera extraña. 

Más tarde, fui a ver a mi Gatito Helado. Hace mucho tiempo que no lo saludaba. 

-Hola, mi gatito, ¿me extrañaste? -le pregunto.

-Miiaaau.

-Yo también te extrañé. No has hecho ninguna travesura, ¿verdad?

-Miiaau.

-AAUUUU, TERNURITA!! ^/////^ -lo abrazó y le doy besitos repetitivos en su cabecita. Luego me lamo los labios y cierro el congelador. Me chupo los dedos llenos de helado y cuando me iba a lavar las manos en el lavaplatos, Raph me acorrala contra el refrigerador. 

-¿Qué estabas haciendo? -me pregunta.

Sentí que un poco de helado se atoró en mi garganta por haber tragado mal. Trago saliva para que éste corra, pero creo que fue peor hacer eso. Ahora tengo ganas de toser. 

-*Cof, cof, cof!* -toso y carraspeo un poco -. S-sólo hablaba con mi gato... -respondo, intentando no verlo a los ojos.

-Ya veo -se toca su mejilla -. Tienes sucio.

Iba a limpiarme, pero él me detiene la mano. Entonces, acerca su rostro y me lame lo que tenía en mi mejilla. 

-Bueno, ya estás mejor -me dice y se va. 

¿Qué rayos está pasando? ¿Por qué me está haciendo esto? No entiendo nada!! RAPH! Que rayos te pasa?!?

Hoy no quise ir al patrullaje nocturno. Con lo que me ha pasado hoy, con sólo ver a Raph me estoy alterando. Incluso cuando lo recuerdo siento que mi respiración se acelera, y eso no puede ser. Tengo que controlarme. Le pedí a Leo que me dejara aquí mientras que ellos fueran. Así está mejor. Así puedo estar tranquilo. Inhalo...exhalo...inhalo...exhalo... inhalo y... ¡AAAH!

Alguien golpea mi puerta, sobresaltándome. Debe ser el maestro Splinter, quien vino a preguntarme cómo me encontraba. 

-Pase -digo y me siento. 

Pero cuando veo quien entra, me quedo paralizado y nervioso. ¿¡...R...Raph!? O//////O ¿QUE ESTÁ HACIENDO AQUÍ? ¡DEBERÍA ESTAR CON LOS CHICOS ALLÁ ARRIBA! AÚN NO ES HORA DE VOLVER. Se acerca a mí y se sienta a mi lado. En seguida noto unos ojos serios, pero coquetos penetrando en mí. ESTO ES ACOSO! RAPH ME ESTÁ ACOSANDO...! Pero.. ¿con qué propósito lo hace?

-Mikey -me dijo, yo intento no mostrarme nervioso -. Eh estado pensando mucho en lo que pasó esa noche...

-¿N-noche...? ¿Cuál noche? -miento. Claro que sé de qué noche me habla. 

-La noche en la me besaste.

¡AAAAH! LEO! DONNIE! MAESTRO SPLINTER! VENGAN AQUÍ E DETENGAN ESTO, POR FAVOOOOR!!

-Aaaah, mi ilusión -digo -. Sí. Mira, quisiera disculparme por lo que pasó. Te confundí por...

-No tienes qué disculparte -me interrumpe con voz cautivadora -. De hecho... ¿por qué no lo hacemos de nuevo?

O//___//O ¿Acaso oí mal?... Dijo que... que lo hagamos de nuevo??? O//.//O? De pronto, él se lanza sobre mí y apoya ambos manos a los lados de mi cabeza. Sus piernas inmovilizan las mías, así que no podré escapar.  Escondo un gemido que quería salir de mi boca e intento mantener al aliento, pero fue peor. Mi corazón golpeaba mi plástron como un martillo a gran velocidad. Mi pecho subía y bajaba también velozmente. Además, me sentía muy sonrojado. 

-¿Qué pasa, Mikey? Estás muy nervioso. Y ahora no estás enfermo -me dice. 

Cierro los ojos e intento ocultar mi cara en algún sitio, pero es inútil. Raph no me deja darme vuelta. 

-¿Quieres empezar? -pregunta.

No pude evitar soltar los gemidos que estaba reprimiendo. Sonaron más fuertes de lo que creía, así que muy avergonzado me tapé la boca con las manos y apreté los ojos. 

-Lo sabía... -murmura. Abro los ojos y veo que está serio, mirándome fijamente - Yo te gusto.

Lo que siento de verdadWhere stories live. Discover now