Lo que siento de verdad

Finalmente...

/// Aviso: Se acerca el final de la historia :D ///

RAPHAEL

-MIKEEEEY! -Grité.

Iba a lanzarme al agujero para ir tras él, pero Leo y Donnie me sujetaron los brazos, impidiéndomelo. 

-SUÉLTENME! TENGO QUE SALVAR A MIKEY!!! -Ya ni siquiera me importaba el dolor de mis piernas, sólo quería saltar... ¡Ahora! 

-¡No seas tonto, Raph! ¡Vas a caer en vano! ¿¡COMO PINSAS SALVARLO SI ESTÁS HERIDO!?

-¡CÁLLATE! -Dije...pero el que calló, fui yo. 

Vi unas burbujas emergiendo en el retromutágeno y luego dejaron de salir. Me arrodillo en el suelo. De pronto, una lagatija común y corriente pasó por el lado de nosotros y se fue corriendo a gran velocidad por los escombros que habían detrás. 

-Esa era... -dice Donnie, viéndola -. ¿Esa era Kala?

La lagartija pasó al otro lado de los escombros y se pudo oír las voces de los kraangs.

-Kraang, esa criatura salió del lugar en el que las tortugas están en ese lugar.

-Debe ser una de las llamadas tortugas, kraang. Hay que destruirla en este lugar donde fue vista por kraang en este lugar. 

A continuación se oyeron disparos. 

-No dejes que escape de este lugar, kraang. /(Para no ser tan asesina XD)/ 

Noté que Leo me miraba como preguntándome si me importaba lo que a ella le pasara. La verdad es que si no hubiera hecho lo que hizo, tal vez sí la hubiese ayudado. Sin embargo..., ahora, con esto... no creo que se lo merezca. Sólo estoy preocupado por alguien, y ese alguien aún no ha subido. 

-¿Por qué Kala sí pudo salir y él no? -pregunto alterado.

-Amm... las lagartijas pueden trepar fácilmente por las paredes, lo cual explicaría la razón por la que Kala subió rápidamente -argumentó Donnie -. Desde luego la Malaclemys terrapin no tiene esa capacidad. Mikey sólo podrá nadar, pero como no está acostumbrado a ese cuerpo, dudo que sepa moverse muy bien, además...

-ADEMÁS QUÉ?!? -Bramo, desesperado. 

-E-el retromutágeno posee una masa pesada..., no es como el agua. En el agua te mueves con más libertad pero en el retromu...

-Donnie... creo que ya entendimos -interrumpe Leo, cabizbajo. 

-Eso quiere decir que Mikey...... Mikey..... -aprieto los dientes y veo que una gota de agua salada cae por mi mentón. 

Esa gota... son mis lágrimas. 

-Raph... -oigo a Donnie, sorprendido -. ¿Estás...?

-Prometí...prometí que siempre lo protegería... -lanzo un sollozo -. Y ahora está allá abajo, atrapado!

-Raph...

-No cumplí con mi promesa! Soy un mal hermano!... Soy...soy... un mediocre.

-No te eches la culpa, Raph.

-PERO SÍ LA TENGO! SI NO HUBIESE CONOCIDO A KALA ESTO JAMÁS HUBIERA PASADO Y MIKEY ESTARÍA AQUÍ! ESTO ES SÓLO CULPA MÍA! Y.....y..... no podré decirle que lo siento... -bajo mi tono de voz -. No podré decirle que....que yo... 

Cierro los ojos y aprieto mis manos en puños.  

No se oía nada, salvo el retromutágeno de los tubos que caían al agujero como si fueran cascadas de un manantial. De pronto, oigo unos pasos detrás de mí. Creí que sería Leo o Donnie que se acercaban, pero son demasiados pasos. Para que ellos llegaran a mí bastaban unos tres o cuatro. Fue entonces cuando lo oí...

-¿Por qué están tan tristes, chicos? 

Esa voz... esa voz era de...

-MIKEY! -gritaron al unísono. 

-A-auch!... C-chicos... me están apretando mucho... 

-Que bueno que estás bien! -dijo Leo.

-¿Cómo fue que...no te...? -preguntó Don. 

-Nah, fue sencillo -explicó Mikey -. Mientras caía se me ocurrió de repente una idea. Saqué mi nunchaku, lo convertí en un kusarigama y lancé la cadena hacia arriba. Creo que nadie lo vio, porque no fueron a ayudarme -_- Me costó mucho trabajo, ¿saben? Con un brazo es casi imposible trepar por una cadena. Además, intenté ayudar a Kala, pero ella se resbaló y cayó. ¿Se habrá muerto?

-Sí...quizás, pero no como tu crees -dice Leo.

-¿Eh? ¿Entonces como?

-Bueno... mira, mejor dejemos el tema -se entromete Donnie -. Lo bueno es que estás sano y salvo, Mikey. Nos tenías muy preocupados.

-Ah... lamento haberlos preocupado ^-^U ........ Por cierto, ¿qué hace Raph?

-Ah, él está... 

Silencio.

-Raph?

Me levanto, me giro, camino hacia él y lo abrazo fuertemente. Había olvidado el dolor de mis piernas heridas... de hecho, casi no sentía nada. Sólo me importaba tener a Mikey otra vez entre mis brazos, sano y salvo. 

-Que bueno.... No sabes cuánto me alegro de que estés bien, Mikey... -le digo.

-Raph... ¿e-estabas... preocupado por mí? 

-¿Tú que crees, idiota?... 

-Vaya, pues yo...

Aparto mi cabeza un poco, lo miro a los ojos y finalmente... lo beso.