Harry Potter: La magia que se manifiesta

Capítulo 14

Capítulo 14 || La llama helada

Los días continuaron pasando sin incidentes, el profesor Lockhart continuó dándole consejos no deseados a Harry, y Colin Creevey, quien parecía haber memorizado el horario de Harry, era un visitante frecuente, molestando a Harry con preguntas. Sin embargo, estaba acostumbrado a que la gente le preguntara muchas cosas, así que no le importaba responder todas las preguntas que podía. Parecía ser el punto culminante del día de Colin que Harry pasara cualquier tiempo con él, incluso si eran solo unos segundos para intercambiar saludos.

Las clases continuaron y la carga de trabajo fue mayor que el año anterior. Sin embargo, a Harry no le importaba, y casi había esperado que ese fuera el caso. Malfoy, Davis y otros de Slytherin continuaron insultándolo e intentaron, sin éxito, tropezarlo o herirlo con magia, que se disipó al entrar en contacto con él. Incluso había tenido que protegerse contra sus ataques físicos también, aunque notó que la crueldad de sus ataques parecía estar aumentando. Había intentado hablar con la profesora McGonagall al respecto, incluso había ido con el profesor Snape. Ambos le dijeron que, como no había evidencia de ningún acto indebido, no podían hacer nada. El profesor Snape le había dicho a Harry que dejara de perder el tiempo, así que se fue. Harry se sintió un poco enojado por sus actitudes, pero sobre todo aceptó todo lo que le habían dicho.

Cuando Harry no estaba estudiando, estaba explorando, tratando de mejorar sus habilidades de navegación dentro de Hogwarts sin usar su reloj como guía. Había un patrón en ciertos pasillos, puertas que eran otra cosa a menos que usted preguntara cortésmente, hiciera cosquillas en un lugar específico o realizara algún otro medio para abrirlas. Estaba empezando a acostumbrarse a la navegación y estaba orgulloso de sí mismo por lo que había podido aprender.

Él, junto con Magic, Ron y Hermione visitaron a Hagrid un sábado por la mañana, discutiendo cómo había ido todo en lo que va del año. Harry le contó a Hagrid sobre los estudiantes intimidadores, aunque no tenía ningún buen consejo para él. Sugirió ir con el profesor Dumbledore, aunque Harry dudaba que eso sirviera de algo. Para su sorpresa, Hagrid, a su vez, les contó que no creía nada de lo que el profesor Lockhart afirmaba haber hecho. Harry y Ron estuvieron de acuerdo con él, pero Hermione estaba bastante a la defensiva. Magic no dijo nada sobre el tema, pero Harry sabía que ella estaba de acuerdo con su posición, porque ella nunca había estado en desacuerdo con ninguna posición suya que él hubiera tomado sobre cualquier tema, simplemente lo apoyó siempre. Al final resultó que, el profesor Lockhart era la única persona que quería tomar el trabajo de profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras, ya que había rumores de que estaba maldito. Demasiado por ir con el profesor Dumbledore sobre esa clase, pensó Harry para sí mismo. Parecía que tenía razón. La clase era buena para una cosa en este momento, una nota.

No pasó mucho tiempo después de que regresaron a la sala común de Gryffindor una vez que terminó su visita con Hagrid, que el equipo de Quidditch de Gryffindor regresó, hablando de cómo todos los Slytherin tenían Nimbus Dos mil y una escobas. Estaban bastante enojados por todo el asunto, aunque como Harry no vio el deporte ni participó en él, no le importó mucho.

A la mañana siguiente, Harry se despertó más temprano de lo habitual. Después de vestirse para el día, bajó a la sala común de Gryffindor. Escuchó a Magic moverse hacia él, lo cual era extraño, ya que ella generalmente esperaba que él viniera a ella en Hogwarts.

"¿Qué es?" Preguntó Harry.

"Ginny Weasley se escabulló de la sala común anoche. Se sintió como si un pedazo del diario estuviera dentro de ella." Magic declaró.

"¿Qué?" Preguntó Harry, confundido. "¿Como es eso posible?"

"Si lo hubiera sabido, te lo habría dicho". Magic declaró.