Enséñame a amarte (JIHAN)

26

Fue extraño el silencio en el colectivo, pero ahora que al fin llegaron a su habitación se miraron en silencio y algo dudosos, ya que aún estaba atardeciendo.

- Sera mejor ducharnos y cada uno por su lado – Determino Joshua a lo que el mayor asintió de inmediato de acuerdo.

- Ve tu primero, yo iré dejando listas algunas cosas – Le tranquilizo al notar como Joshua ahora se veía inseguro de en qué orden ducharse, mostrándose aliviado por sus palabras, por lo que pronto tomo sus cosas para ir al baño.

Jeonghan soltó un largo suspiro e intento inhalar y exhalar aire con calma para relajarse, no sabiendo porque se sentía tan nervioso cuando en su caso ya tenía experiencia. Debía mostrarse como alguien seguro para que Joshua estuviera más tranquilo sabiendo que podía confiar en él. Por ello ya empezó a revisar en su maleta hasta que encontró los condones y el lubricante, además de dejar cerca pañuelos para limpiarse.

Sin embargo cuando acabo eso volvió a ponerse nervioso, porque no sabía bien qué hacer con Joshua, que primera experiencia darle. En su caso era versátil por lo que no tenía problemas con asumir cualquier rol, pero ¿Qué sería adecuado para su inexperto bebé?

Cuando Joshua al fin salió de la ducha y llevando una toalla en su cadera pronto le fue a cubrir con una bata – Yo no me demorare tanto como tú en la ducha, pero igual abrígate un poco – Le dijo con una leve sonrisa para luego tomar sus cosas e ir a ducharse, siguiendo con la incógnita rondando en su cabeza. Estaba muy indeciso, pues si Joshua ya hubiera tenido una primera experiencia con una mujer es que le habría dejado ser el activo queriendo que fuera algo más familiarizado para él.

Ya iba acabando su ducha y seguía inseguro, por lo que con un fastidio fue cerrando la llave sintiendo que lo más adecuado sería tan solo preguntarle a Joshua que quería, esperando que no fuera tan indeciso como él. 

Mientras estaba en eso el menor con curiosidad veía las cosas que Jeonghan había dejado estando ya claro lo que iban a hacer, por lo que algo nervioso de esperar ahí es que empezó a comer de las mandarinas que les regalaron.

Cuando Jeonghan ya salió del cuarto de baño y vistiendo tan solo una toalla es que Joshua se quedó inmóvil mirándole con un poco de esa fruta en la boca, detalle en lo que de inmediato el castaño se fijó, pues los labios ya muy tentadores de Joshua estaban más abultados, pero a la vez mantenía ese toque inocente suyo.

Joshua termino por comer eso y pensaba comentar algo para romper ese extraño silencio, pero de repente Jeonghan miro a un lado y al seguir la dirección de sus ojos noto por la ventana que ya era totalmente de noche, señal de que ya acabo esa parte del trato.

- Entonces... ¿Cómo empezamos? – Pregunto algo tímido el menor, levantándose para botar la cascara de la mandarina y lavar sus manos, percatándose de que estaba ligeramente temblando.

- Me gustaría comerme tu boca, pero primero quiero saber, ¿Qué posición te interesa probar o cual definitivamente no quieres hacer? – Se acercó a Joshua y sostuvo gentilmente sus manos, apretándolas de forma reconfortante – Como ya te dije yo puedo adaptarme sin problemas a los gustos que tengas, a menos de que sean muy raros pero siendo tu pues sé que no tienes pensado nada extravagante al menos de momento – Le dijo algo divertido y dejando un besito en su frente para que se calmara.