Park Jimin es la última persona de la cual Yoongi se enamoraría, pues es una persona muy opuesta a él en todos los sentidos.
Jimin cuenta con una lista de deseos que piensa llevar acabo en su vida. Una lista tan preciada, pues él es una Bomba de ti...
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Dos almas se encontraban destrozadas, dos almas qué se se sentían rotos de distintas formas pero por la misma situación.
Apenas 18 horas atrás habían llegado corriendo a casa de Jimin, muy tarde a decir verdad durmieron abrazados hasta que el teléfono de Jimin estaba a punto de explotar de tantas llamadas.
Sorpendentemente no les dijeron nada por ello pero la cara de su padre era tan evidente de que so no le había gustado nada eso.
No les importo a Jimin, tampoco moriría por querer compartir su última noche junto a su novio.
Jimin
Nadie jamas me dijo el final de este capítulo, si tal vez ganaría o perdería solo sigo rodando buscando el buen camino.
Siempre me dio miedo pensar en como terminaría esto, pero esto era mi realidad y debía enfrentar más retos aunque estuviera cansado de ellos.
Tenía mas razones ahora para permanecer vivo, mi corazón estaba más débil según los estudios y estaba ahí a tiempo para recibir un nuevo tratamiento y apoyo medico.
Mis padres habían conseguido un departamento no muy lejos del hospital, ellos podrían entrar y salir del hospital sin embargo yo no. Yo ya no podría salir pues ahora debía estar bajo grandes chequeos.
Verían qué tan bien me haría el tratamiento, y me estudiarías más que a una rata de laboratorio; debía soportarlo si quería seguir con vida.
Todas las personas a su alrededor tenían rasgos completamente diferente, era de esperarse pero jamás penso en ello, mucho menos al escuchar el idioma.
Entraban y salían, le checaban y volvían a salir, Él Doctor Min era quien traducia todo por nosotros y hacía todo mas fácil. Aunque Jamas me había sentido tan incómodo en un lugar como ese hospital.
¿Como se supone que se iba a comunicar?
Mis ojos se encontraban aun rojos e hinchados por el llanto, y la mayoría de los doctores qué entraban me miraban raro por tener un peluche en manos.
¿Con 18 años y con un peluche?
Taehyung me lo dio, tenía su olor, no planeaba soltarlo.
Aquel pelirrojo llego corriendo bañado en lagrimas sin querer perderse de mi partida.
Nos tiramos al suelo abrazandonos y llorando como jamas lo hicimos.
No fue nada fácil dejar ir todo aquello, mis amigos y conocidos, mi vida y todos aquellos momentos más felices.
Pero agradecia haber guardardado imágenes de aquellos grandes momentos, momentos que que eran revividos en mi cabeza y corazón cuando quisiera.
Todo me daba tanto miedo pero sería fuerte, tal y como Yoongi me dijo que fuera.