Amigos con derecho (+18 )

CAPITULO 10. EXPECTACION

Esa mañana había quedado con Bella para desayunar, quedamos pronto para poder contarle lo que me habia sucedido los días en que Julian habia estado por allí, que no habia sido poco.

Ella alucino con todo lo que le estaba contando, le hice prometer que no contaría nada. Sobre todo lo de que me quedaría allí indefinidamente. Ella se alegró un montón de que me quedara alli y yo en parte también lo estaba.

Habia aprendido a amar Roma....

Llego la hora de comer y como siempre nos atendió Alex, le dije por lo bajo que a que hora salía de trabajar y me dijo que a las 8. Le dije que si le apetecía venir a mi casa  a cenar, que yo cocinaba.

Me miró extrañado y me preguntó si yo cocinaba.
Le dije que no mucho pero que para unos espaguetis si me daba..
- Jajajaja
- Llevare el postre, por lo menos comeremos algo.
Lo miré con mala gana y le saqué la lengua.
- Luego nos vemos.
- Chao.

Esa tarde me fui más pronto de la oficina para ir a comprar los ingredientes para la cena. Limpie la casa y monte la mesa para dos, con flores y velitas.

Me metí en la bañera ya que quería estar lo mas limpia posible, ya que esperara que esa noche tuviéramos más que cena.

A las 8 ya estaba vestida y preparada, me maquille un poco para estar un  poco más presentable y baje a terminar de preparar la mesa.

Quince minutos más tarde sono la puerta y era el vestido con unos vaqueros y una camisa Blanca, llevaba unos botones abiertos y se le veía parte del pecho. Eso era una tortura, me estaba pensando en pasar de la cena he ir directamente a la habitación.

De cena prepare de primero una ensalada César, con una crema que me habia dado Ernesto y de segundo unos espaguetis a la boloñesa. Olía un poco raro pero creo que me habías salido bien.

El traía una bolsa donde llevaba el postre me dijo que lo llevaría a la nevera y no me dejó ver lo que había dentro.

Comenzamos con la ensalada, tampoco era algo tan difícil. Cortar lechuga y varias verduras. Ponerle la salsa encima.
- Esta muy buena me dijo, se parece a la salsa especial de Ernesto.
- Jajajaja
Me miró extrañado y le dije que me la había dado el.
- Ya me extrañaba a mí.

Me estuvo explicando porque se fue tan rápido el día del hotel y porque no espero a que me despertara para decirme algo. Yo lo entendí perfectamente.

Solo pensar en dejar solos a unos niños tan pequeños, se me puso la piel de pollo.

También me e aplico la vida que había llevado con su madre y sus hermanos. Sentí pena por como hablaba de ellos. Yo me ofrecí en ayudarlo en todo lo que fuese posible y lo que necesitara

Me dijo que lo tenía todo controlado. Que tenía un buen abogado amigo suyo que lo estaba ayudando.
Me contó que empezó la carrera de abogacía gracias a su esfuerzo, pero que en el último año lo tuvo que dejar. Necesitaba todo el dinero que ganaba para ayudar a sus hermanos.