Capitulo 12

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Emma

El día anterior había sido divertido, estar junto a Wyatt lo era; he de decir que tendría faltas en Diseño, Arte y cálculo, además de no asistir al trabajo y perder las propinas del día, pero por primera vez me daba igual todo aquello, nuevamente junto a Wyatt había pasado un día increíble.

¿Quién diría que aquel al que llamabas tonto seria quien te hiciera olvidar tu infierno?
Las cosas nunca pasan como planeó, a veces es bueno que solo fluyan.

Me termine de vestir, en esta ocasión utilizaba unos jeans rotos de las rodillas, mis confiables vans negras y una blusa de manga corta negra con una ilustración de un dibujo estilo caricatura de the weeknd de la canción starboy; era una playera que junto a Bastián habíamos mandado a diseñar hace tiempo, para tener ambos una playera idéntica, jamás me la puse por ser manga corta, mis brazos eran una inseguridad, sin embargo, hoy me la puse y estaba feliz por ello.

Baje de prisa a la cocina y deje listo el desayuno de ellos, tome de la alacena un chocolate que guarde y salí de casa antes de que ellos despertaran.

Caminaba por la acera con los auriculares puestos sonando en ellos Just you and I de Tom Walker, movía mi cabeza ligeramente al ritmo de la canción mientras continuaba mi camino hasta el metro, comencé a tararear las canciones que se reproducían y distraída seguí mi camino, esto hasta que alguien me quito un audífono del lado derecho y sobresaltada me giré en su dirección.
- ¡Por Dios Wyatt! ¿Qué haces aquí? – del susto coloque mi mano sobre el pecho.
- ¿Yo? Vivo a media cuadra – me miro extrañado y yo mire a mi alrededor - ¿Tu qué haces aquí?

¿Qué rayos…? ¿Cómo llegue aquí?

- Yo…  no se como llegue aquí – me rasco la nuca y lo miro extrañada.
- ¿Querías verme, a que si? – sonríe cerrando los ojos un poco, un gesto muy típico de él.

Un gesto único y muy lindo… - pensé admirándolo.

- Emma ¿tierra llamando a Lee? ¿Señorita? – él  pasaba una mano por mi cara y me sonroje, estaba tan perdida en mis pensamientos que me había quedado mirándolo sonreír.
- Creo que hoy estoy demasiado distraída – mire a otro lado riendo nerviosa.
- Eso ya lo note – ríe un poco - ¿Te llevo a la UP? – me mostro las llaves de su coche.
- ¿Ah? No, esta bien, iré sola – sonreí y cuando iba a caminar me interrumpe.
- ¿Qué tal si eres tu la que maneja hasta allá? – sonríe y me sorprendo.
- ¿Yo? Estas demente, acaso ¿Quieres que choque tu auto? – niego con la cabeza y el ríe.
- Oh, vamos, ayer no lo hiciste tan mal, además estaré ahí supervisando que no pase nada – me entrega las llaves y va hasta su coche subiendo del lado del copiloto, llego hasta allá y subo nerviosa.

Esto es mala idea, Emma reza y no solo a Dios, reza hasta a los Dioses en los que no crees, a ver si alguno se apiada de ti y no te deja caer en la desgracia.
Deja de decir tonterías y sirve de algo dándome ánimos – respondí a mi conciencia ya estando en el auto.

- Bien, antes de empezar, colócate el cinturón, enciende el auto, quita el freno de mano, pisa el acelerador y yendo a una velocidad normal ve recto, mirada siempre al frente, no te distraigas, espejea y frena despacio si frente al coche se presenta un semáforo u otro automóvil, da vuelta fluido aquí no son esquinas cerradas, respeta los peatones y por ultimo – Wyatt dio las indicaciones claras y me miro – por favor, no estrelles mi auto – me miro serio.
- Entendido, allá vamos – anuncie nerviosa antes de encender el coche, y así empezó el viaje mas tenso en mi vida.

Iba tan seria y tensa durante todo el viaje, recibiendo indicaciones de Wyatt si girar en tal lugar y demás sobre la ruta hasta la Universidad, tan concentrada  en lo que hacia que cuando finalmente llegamos a la UP no sabia siquiera como es que lo habíamos llegado ahí, logre estacionarme bien y en el primer intento, al final salimos del coche y estando de frente escuche.

- ¿Lo viste? Emma lograste llegar hasta aquí sin necesidad de que gritara y lo mas importante, sin estrellar mi coche – me dice Wyatt sorprendido.
- ¿Lo hice? – lo miro asentir - ¡Por Dios! ¡Lo hice! – feliz y como si fuera una niña tome las manos de Wyatt y di saltitos frente a él, lo escuche reí.
- Pareces una niña – volvió a reír, me detuve y cruce de brazos.
- Amargado, déjame ser feliz, no soy una niña – le saque la lengua.
- Oh, si, eso es muy maduro de tu parte – río nuevamente – por cierto, linda blusa.
- Gracias – le sonreí intentando no sonrojarme, seguimos caminando entre risas hasta el aula de clase.

[***]

Iniciando el primer receso Wyatt tenia exámenes que hacer para aprobar las materias debido a las faltas que tenia y yo pasaría el receso junto a Bastián en la biblioteca ayudándole con las tareas extras que él tenía y haciendo las que me habían dejado a mi por faltar ayer.

Estaba Bastián concentrado haciendo una ilustración sobre la serie de Fibonacci, - algo sobre un espiral - cuando recordé lo que quería contarle y lo interrumpí.

- He aprendido a conducir – dije sonriente y con emoción, él me miro confundido.
- ¿Cómo? ¿Has convencido a tus padres que te presten el coche? – pregunto sin creerlo.
- ¿Qué? No, jamás lo harían, además si lo hubiera intentado sola hubiera hecho trizas el coche en el que fuera – comente recordando que de no ser porque Wyatt puso freno de mano yo hubiera estrellado su coche.
- ¿Entonces? ¿Cómo es que aprendiste? – deja de lado su ipad y me presta atención curioso.
- Ayer no asistí a las clases después de las 8 am y falte al trabajo, fui junto a Wyatt a un terreno vacío que esta a 40 minutos de aquí, no sabría decirte donde exactamente, pero es un terreno enorme…
- Fuiste con Wyatt…  ¿Desde cuando se hablan? Mas bien, ¿Desde cuando son tan cercanos? – lanzo aquellas preguntas interrumpiéndome preocupado.
- Prácticamente comenzamos a hablar un poco mas desde que ustedes dejaron de hablarme – dije mirándolo con algo de reproche.
- Emma…  no es bueno que estés junto a él, es problemático y… - lo interrumpí.
- ¿Lo conoces? Dime, ¿Has si quiera hablado con él alguna vez? – algo me hizo responder con preguntas molesta.
- Lo que se dice es suficiente para saber que no es bueno estar con él – atacó llevándome la contraría – no es bueno que te juntes con alguien a quien todos le temen, piensa en que hay motivos por el cual lo hacen.
- Seguiré hablando con él, no me ha tratado mal y lo que digan de el pasado da igual, es pasado – lo mire mal, el negó en desaprobación.
- Porque puede hacerte daño, no diré mas, me quedare con la idea de que te lo estoy advirtiendo – dijo continuando con su ilustración, me cruce de brazos.

¿Qué es lo que sabe Bastián de Wyatt para que me advierta cosas sobre él?
¿Por qué todos en la universidad prefieren evitarlo?
¿Qué hay de malo en él?

Deje de lado aquellos pensamientos y me centre en terminar mis trabajos, al terminar Bastián y yo fuimos a almorzar en la cafetería y después a tomar las clases restantes, el tema de Wyatt no lo volvimos a tratar el resto de horas.

[***]

Estaba en el trabajo nerviosa y esperando el tiempo aquí se hiciera eterno, temía el regreso a casa, 14 mensajes de mi madre me hacían no querer volver ahí.

Mas vale que tengas una buena excusa del porque pusiste aquello en la tarea de Henry y una muy buena para no recibir un castigo.
No has empezado con la costura de los vestidos de Ariadne y tienen que estar listos ¡Ya!, el desfile es en 3 días.
Tienes que firmar un contrato en el que aceptes que rechazas la herencia de tu abuela.
Ni se te ocurra negarte o sabes lo que ocurrirá si lo haces.
Tu padre quiere hablar contigo sobre el dinero que ganas en el trabajo.
Es hora de que no vayas pagando el hecho de tu asistencia en casa.

Estos y mas eran aquellos mensajes que me ponían nerviosa, me arrepiento de poner “Henry es un inútil y no hace sus tareas, por dios vea su letra y compárela con esta”, nuevamente yo y mis estupendas ideas.

Te encanta meterte en problemas, tu solita das el pase a ellos…
Cállate, si hubieras estado ahí el sueño no me hubiera obligado a escribir aquello.
Ahora resulta que el sueño habla jajaja.

Me estaba volviendo histérica hablando con mi conciencia, por Dios, me volveré loca si sigo así.
Sobre el contrato de mi abuela, prefiero tener marcas en el cuerpo a dejar que ellos se salgan con la suya y me quiten lo único que me queda de ella, si ella quiso que fuera mío no planeo dejarlo ir por nada.

- Emma, ¿Estas bien? – Beatriz pasaba una mano frente a mi rostro y yo asentí evitando su pregunta, seguí limpiando las mesas y comenzando a acomodar las sillas - ¿Segura que estas bien? Te ves pálida y estas mas distraída de lo normal – me detiene y se pone de pie frente a mi.
- Estoy bien – le sonrío e intento pasar por un lado y me detiene cruzándose de brazos.
- Cuéntame, ¿ De nuevo no quieres regresar a casa? – la miro seria.
- Yo…  - agacho la cabeza, ella sabia algo de lo que me ocurría  sabe sobre la forma en que me hablan y que me utilizan de “sirvienta y ama de llaves” mas no sabe de las palizas que suelen darme.
- Emma…  si quieres puedes quedarte conmigo en mi departamento, hay dos habitaciones, puedes dormir ahí, te prestare ropa y si te hace falta algo de la universidad pasas por ello a tu casa a la mañana – dijo amable y preocupada, la mire sintiéndome deprimida, no podía hacer aquello, solo empeorarían las cosas al día siguiente que llegase a casa, además, no podía molestarla quedándome en su casa.
- No te preocupes, estaré bien en casa – le sonreí y logre esquivarla para ir por los servilleteros y menús de las mesas.

Paso exactamente lo opuesto a lo que deseaba, el tiempo en el trabajo fue demasiado corto, no fue el suficiente para hacerme olvidar la llegada a casa, y a pesar de tomar la decisión de ir caminado, todo fue tan rápido, ya estaba aquí, de pie frente a la puerta de entrada, con mi respiración agitada, tenía miedo y mis manos temblaban.

Un día mas es un día menos para salir de aquí, vamos, tu puedes…

Tome la llave y gire, abrí la puerta y en cuanto entre la tensión que se sentía era demasiado para mi, me cortaba la respiración.
Lo primero que sentí fue la típica bofetada de mi madre, agache la cabeza y soporte las lagrimas, esto solo era el inició.

“Se fuerte mi niña, no te dejes vencer, eres mas lista que ellos, mi pequeña valiente, te amo mi niña”

Recordé las palabras que solía decirme mi abuela cada que lloraba en sus brazos, la extraño tanto… Por ti abuela, solo por ti sigo aquí. Estaba lista para recibir todo lo que viniera de ellos esta noche.

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Capítulo corto en comparación a los otros.

Algo sencillo que explica mucho.
¿Qué sintieron al leer la frase de la abuela de Emma?
¿Qué creen que sabe Bastián de Wyatt?
¿Qué creen que hizo Wyatt en el pasado, lo suficientemente malo para que todos le teman?

Gracias por el apoyo ✨❤️

- D

Un Destello de paz | [TERMINADA] |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora