Un Destello de paz | [TERMINADA] |

Capítulo 19

Emma

La noche anterior tras llegar a casa y prepara la cena, el “tenemos que hablar” de mi madre se volvió una charla de supuesta disculpa por el trato que me daban.

Sus palabras exactas fueron.

Hija queríamos disculparnos contigo por tratarte de aquella forma, últimamente hemos estado presionados y estresados por problemas en la empresa familiar y la prensa, espero aceptes nuestra disculpa y continúes ayudándonos en lo que puedas, inclusive a Henry con sus tareas.

Fueron las palabras mas “sinceras que he escuchado en la vida”, noten el sarcasmo.

Yo los había mirado con duda, claramente no los perdonaría, pero solo fingiría hacerlo hasta saber el motivo por el que hacían aquello, algo en mi decía que lo hacían para verse bien frente a los abogados y la prensa, y así con el tiempo según su criterio “Me convencerían de firmar el contrato que les cedía la herencia de mi abuela”, pero estaban mal si creían que firmaría aquel contrato, no lo haría jamás.

[***]

Llegando a la UP justo en el estacionamiento me encontré a Wyatt a metros delante de mi, trote hasta el para saludarlo y me detuve de golpe al verlo.

– ¿Wyatt… Qué… qué te ocurrió? – lo mire preocupada y el me miro serio.

– Me caí de bruces al piso, ¿No es gracioso? – respondió sin gracia, como siempre había vuelto “Glace Mirster”(francés). Ignorándome continuo a caminar mientras sostenía su abdomen.

– Wyatt, espera – lo detuve poniéndome frente a él – ¿Quién te golpeó? – suspiró y me miró.

– ¿Desde cuando te importa? Metete en tu vida Lee – respondió molesto y pasándome de lado, haciendo que me sintiera mal pero a la vez me molestara.

El hecho de ir e insistir en preguntar si esta bien y el de tomar mi orgullo y responderle molesta, prendían de un solo hilo del cual ganaba mi orgullo, así que fui hasta donde estaba y me plante frente a él.

– Eres un estúpido Wyatt y mas estúpida lo soy yo por preocuparme, solo te hice una pregunta, tan difícil era decir “No quiero hablar de eso” o “No estoy de humor”, en cambio fuiste sarcástico y después grosero conmigo, eso me gano por preocuparme por alguien de quien ni siquiera es mi amigo – dije molesta y me di la vuelta rumbo al aula de clase.

Sentía que había sido demasiado grosera al responderle aquello, igual estaba en el derecho de ser frio conmigo, no debía indagar sobre temas de su vida, además si era obvio que lo habían golpeado tal vez ni siquiera había porque preguntarlo.

Dejas que tus problemas familiares afecten tus emociones, si no lo controlas nuevamente alejaras a todos.
Cállate…

Ni siquiera tenia sentido que me molestara por aquello…  ahora sentía la necesidad de disculparme…  Dios…  ¿En verdad le dije que ni siquiera éramos amigos…? Debía regresar y disculparme…

Arrepentida fui a buscarlo de nuevo por los pasillos, no podía estar mal con él cuando recién comenzábamos a ser amigos; lo vi por los pasillos mirando su celular y cuando planee acercarme mi celular vibro en mi bolsillo trasero.


Hielito bipolar ;)

Disculpa responderte de aquella forma.
Y en respuesta a tu pregunta, si, me
golpearon Lee, aunque mas bien…
me intentaron asaltar :I

Aun mas arrepentida me acerque hasta él y nerviosa jugando con mis manos, dije.

– Wyatt…  lo siento – lo mire levantando una ceja – no quería decir aquello, yo… disculpa, ¿Aun somos amigos? – continué con la cabeza agachada.

– Te disculpo Lee, tienes carácter – río un poco y se quejo de dolor, lo mire y el siguió – un momento…  ¿Éramos amigos? – me miro serio.

– Si… ¿No? Bueno, yo creí que él hecho de que habláramos mas y que comenzáramos a salir a hacer tonterías algunos días era porque… – comencé a explicar y me interrumpió.

– Lo somos tonta, estaba jugando – sonrió y lo mire mal, después él se rio y comenzamos a caminar al aula de clase.

No insistí mas en cuanto al tema de como es que lo habían asaltado y demás; en las escaleras tuve que ayudar a Wyatt y dejar que se sostuviera de mis hombros para subir, tal parecía que el abdomen le dolía inclusive al caminar, así que las escaleras fue todo un desafío, llegamos 5 minutos tarde a la clase pero la el profesor al verlo no dijo nada y nos dio acceso.

Estaba distraída mirando la ventana mientras el profesor explicaba algo sobre arte abstracto en ilustración, realmente no prestaba atención, estaba perdida admirando como siempre a las aves pasar cerca de la ventana o posarse en ella.

Me asusto recibir un golpe con una bola de papel justo en la mejilla derecha, me gire y recibí otra en el centro de la cara, cuando mire al frente Wyatt intentaba aguantar la risa y yo intentaba fingir seriedad, lo cual era imposible al verlo querer reír a él.

– Presta atención, esta por hacer preguntas y estoy seguro no haz ni escuchado las primeras dos palabras después del tema –susurro él mientras yo le lanzaba de vuelta las bolas de papel, que logro esquivar.

– ¿Y tu si has prestado atención? Si es así, explícame breve porque tienes razón, no recuerdo mas allá del tema – lo mire inocente y el negó sonriendo.

Comenzó a anotar algo en su libreta y pensé que me ignoraba, así que me cruce de brazos y mire al frente con molestia, minutos después la libreta de Wyatt se poso sobre mi butaca, lo mire y con la cabeza señalo discreto la libreta.

Mire la libreta y comencé a leer, era el tema del cual había hablado el profesor anteriormente y al final ponía.

Yo si preste atención, acosadora ;)

Lo mire mal al final y pasándole su libreta, señale aquello y susurre.

– ¿Acosadora? ¿En serio? – lo fulmine con la mirada, tome su libreta y escribí al final de ella.

Gracias cafecito ;)

En honor a su apellido Brown, porque si, su nombre completo era Wyatt Smith Brown, lo tenia escrito justo en la esquina de la libreta.

Nuevamente le entregue su libreta y él después de mirar lo que escribí me miro mal y sin hablar de forma que solo pronuncio con la boca, dijo “Ni empieces Lee”, me encogí de hombros y sonreí mirando la pizarra ahora llena de preguntas acerca del tema.

[***]

Al primer receso nuevamente ayude a Wyatt a bajar las escaleras y llegar hasta donde estaba Bastián en la cafetería, el lo miro con sorpresa y cuando estaba por preguntar algo negué a espaldas de Wyatt y al final solo hizo cono si se pusiera un cierre en la boca y no hizo preguntas al respecto.

– ¿Qué es lo que quieren almorzar? – pregunto Bastián poniéndose de pie.

– Yo quiero un emparedado de atún y jugo de naranja – sonreí y el asintió.

– Lo mismo que ella, da igual, no tengo hambre – dijo sin darle importancia Wyatt.

– Vale, dejen ir por ello – se alejo Sebastián y hoy al fin pregunte aquella duda que tenía respecto a ellos.

– Wyatt – me miro.

– ¿Si? – inclinó un poco la cabeza.

– ¿Cómo es que empezaron a hablar Bastián y tu? – puse mis codos sobre la mesa.

– Ya te lo dije antes, comenzamos a hablar cuando te desapareciste por casi toda una semana, al final nos mantuvimos al tanto y resulta que no es un tonto después de todo – se encogió de hombros.

– ¿En serio? ¿Es todo? Hasta diría que falta la historia de amor aquí – reí y me miro raro – bien, no, eso no, fue tonto – me reí junto a él, pero el se detuvo por el dolor en el estómago.

– Lee, no me hagas reír – negó con la cabeza y yo asentí.

Al tiempo Sebastián trajo tres bolsas de papel con nuestros emparedados y 3 botellas pequeñas de jugo de naranja.

– ¿Compraste lo mismo para ti? – pregunté.

– Pues ustedes pidieron eso y no me iba a quedar con las ganas de probarlo, así que si – respondió dando un bocado al emparedado.

– Está delicioso – dijimos a coro los tres a la vez y nos miramos, reímos de aquello.

– ¿Todos estamos de acuerdo que el emparedado de atún es lo mejor que han probado? – dijo Wyatt y Bastián y yo asentimos dando un nuevo bocado.

[***]

Las clases terminaron y debía asistir al trabajo, hoy usaría el nuevo uniforme elegido por Beatriz, una blusa de botones blanca, jeans negros y un delantal color marrón oscuro, en el centro de el, el logo de la cafetería Ninina junto a una ilustración de una tasa de café y un cuernito de pan, del cual olvide su nombre.

Iba en el estacionamiento y me despedía de Bastián, Wyatt ya se había ido hace 5 minutos, o al menos eso creí, ya que al salir del estacionamiento lo vi recargado en su cuche fumando un cigarrillo.

– ¿Desde cuando fumas? – pregunte curiosa.

– Desde siempre, bueno, desde los 18, solo no suelo hacerlo seguido – dijo dando la ultima calada al cigarro.

– Entonces, ¿Llevas un año fumando? –lo mire negar.

– ¿Pues cuantos años crees que tengo Lee? – dijo riendo y lo observe confundida.

– Am…  ¿19 o 20? Si no es que apenas cumplirás 20 – el negó.

– Tu tienes 19 y en septiembre cumples 20 – asentí.

– ¿Cómo lo sabes? – no recuerdo haberle dicho mi fecha de cumpleaños.

– Sebastián me dijo – ahora lo entiendo.

– Bien, entonces ¿Tu tienes 19 o 20? – indague.

– Tengo 20 Emma, en octubre cumpliré 21, y antes de que preguntes, por cuestiones económicas no pude cursar un año antes la universidad, si no ya estaría cursando el último – asentí sin saber que decir, vaya…  quien diría que es un año mayor a mi.

Deje de lado mis pensamientos y sorpresa para ver la hora en mi celular, ya tenia 5 minutos en contra para llegar a tiempo al trabajo.

– Tengo que irme, se me hará tarde si el metro tarda en pasar – me despedí de Wyatt pero me detuvo.

– Emma, te llevo hasta allá, igual voy de paso – lo mire extrañada.

– Vale, pero ¿Puedes conducir así? – asintió y me acerque hasta el lado de copiloto, me freno antes de subir.

– ¿Quieres conducir? – me mostro las llaves y las mire con emoción.

– ¿Puedo? – asintió riendo y me entrego las llaves, fui hasta el otro lado, entre junto a Wyatt y me coloque el cinturón.

– ¿Aun recuerdas como hacerlo? – preguntó y asentí.

– Aun así, podrías ayudarme a indicarme algunas cosas, es la única forma en que no me pongo nerviosa – dije inocente y el río asintiendo de nuevo.

– Bien, allá vamos, toma la misma ruta que si fueras caminando – puse en marcha el auto y comenzamos a andar hasta el trabajo.

Llegamos riendo porque como casi me estrello con un poste al estacionar el auto, mientras yo reía de la cara de susto de Wyatt el reía por la tonta acción que estuve a punto de hacer.

Entre a la cafetería, Wyatt se quedo en las mesas de fuera, me cambie la ropa que traía por lo que seria mi nuevo uniforme, salude a Beatriz y André y comencé a repartir los menús en las mesas que ya estaban limpias, acomode las sillas faltantes y coloque servilletas en cada mesa, Beatriz se encargo de realizar el pedido de Wyatt y yo de comenzar a atender a los clientes que llegaban al lugar.

Hoy por primera ocasión no me aterraba la idea de ir a casa, pues a como estaban las cosas, ellos fingirían ser los padres buenos que no eran, o al menos evitarían los gritos y golpes en lo que durara la prensa yendo a la casa.

Un punto a favor para Emma.
Desde luego que si.

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¿Qué opinan de este capítulo?

¿Qué dicen de los padres de Emma?

¿Porque creen que tuvo esa reacción Wyatt ante las preguntas de Emma?

¿Ya sabian que Wyatt era mayor a Emma?

¿Creen que este capítulo tiene sentido o no? :'^

A veces siento que lo que escribo no tiene sentido :'c

Gracias por el apoyo y los comentarios, me encanta leerlos ❤️✨

- D