No todo en la vida es felicidad, aprende a vivir aquellos momentos efímeros y fugaces, vive con la persona que mas amas un "Destello de paz" en tu oscuridad.
Novela +18
(Aunque no contiene escenas eroticas)
OBRA REGISTRADA CON DERECHOS DE AUTOR
Oops! Ang larawang ito ay hindi sumusunod sa aming mga alituntunin sa nilalaman. Upang magpatuloy sa pag-publish, subukan itong alisin o mag-upload ng bago.
(vestido de Emma, no sabia describirlo jsjs, aparece mas adelante en el capitulo)
Oops! Ang larawang ito ay hindi sumusunod sa aming mga alituntunin sa nilalaman. Upang magpatuloy sa pag-publish, subukan itong alisin o mag-upload ng bago.
(Lo que usara Wyatt jsjs)
___________________________
Emma
Desperté y miré la hora en el celular de Wyatt, ya que el mío estaba en la otra habitación; eran las 8:25 am, era un milagro poder dormir hasta esta hora, se suponía estaríamos en clases, pero no era importante ahora.
Mire a Wyatt, quien seguía dormido a mi lado, sin moverlo ni despertarlo, salí de la cama y fui hasta la otra habitación por mi sudadera ya que hacía frio, baje hasta la cocina y tome lo necesario para preparar panqueques y eso comencé a hacer.
Tarareaba una canción mientras cocinaba, estaba por terminar de prepararlos cuando me sobresalto la voz de Wyatt.
– Lee, ¿Qué haces? – hablo de forma ronca Wyatt estirándose en medio de un bostezo, una extraña corriente recorrió mi cuerpo, trague saliva nerviosa y sacudí la cabeza para salir del transe.
– Termino de preparar panqueques y café – aclare comenzando a servir los platos y llevándolos a la pequeña isla/barra, frente a la cocina.
– Huelen bien, te ayudo sirviendo el café – dijo pasando a mi espalda para servir dos tazas de café, tomé de la alacena la miel, la mermelada, la Nutella y el dulce de leche y los puse en la barra, él se puso al otro lado y nos sentamos uno frente al otro.
– Aquí está el café – sonrió dejándolo frente a mí.
– Gracias – lo tomé y di un sorbo, él dio el comenzó a desayunar.
– Dios... Emma esto esta delicioso – dio otro bocado más – y he de aclarar que no suelo desayunar, pero esto lo vale – me sonrojé y mordí mi labio evitando sonreír.
– Gracias – dije comenzando a desayunar.
Entre el desayuno recordé que ayer no le dije nada acerca del coche nuevo que había comprado, así que decidí hacerlo ahora y hablar sobre eso.