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-Annelise...

Escucho cómo alguien susurra mi nombre, pero no quiero abrir los ojos, ya que quiero seguir durmiendo.

El colchón de esta cama se siente como si fuese una nube esponjosa.

-¡Annelise!

Y caí, sentí que todo y cada pedazo de mí cayó al helado suelo.

Abro los ojos dispuesta a matar a quien sea que me haya hecho tal barbaridad.

Quitó la sábana de mis ojos y alzó la vista a...

Anthony.

-Te arrancaré los dientes uno por uno Tony-le dije tratando de poner mi mayor cara de psicópata.

Él alzó una ceja y sonrió.

-El karma hermanita, el karma-dijo alzando los hombros.

Abrí mi boca para responder algo, pero en lugar de eso le propiné un golpe en la pierna.

-Eres un estúpido.

-Si, si cómo sea, ahora dime por qué cojones te encontré durmiendo con Less y conmigo apenas mía ojos abrieron esperando ver la hermosa luz del sol, pero en su lugar vi la carita de mi querida y Amanda hermana cosa que me resultó el peor despertar en mi vida-dijo estirando su mano.

-Pues tenía miedo de dormir sola, además te deberías sentir bendecido de poder ver mi cara al despertar-dije tomándola.

-¿Sola? Me pareció ver qué entrabas con Eidan en una habitación-dijo viéndome curioso.

Dios mío, ahora debo pensar una buena escusa para evitar el tema de anoche.

Y siento un sabor amargo al recordar lo de anoche.

No vayas a llorar Annelise.

-Él tuvo que salir, no sé, iré a cepillarme los dientes y a darme una duche, muy, muy larga-dije corriendo al baño.

Bueno la idea de la ducha se ve afectada por qué mi bolso con ropa está en la sala e imposible que baje así.

Solo traigo una sudadera larga que Dylan me obsequio la Navidad pasada.

Agarró uno de los cepillos dental nuevos de un estuche y cepillo mis dientes, lavo mi cara y recojo bien mi cabello en una coleta.

Abro la puerta del baño y no veo rastros de Tony y me dirijo a salir e ir a la habitación de Liam.

Tocó primero antes de entrar.

No vaya a ser que me encuentre una escena comprometedora.

No escucho nada por parte de nadie así que tomo el pomo de la puerta y abro despacio.

Dentro como lo supuse y gracias al altísimo no hay nadie.

Me acercó al closet de Liam y tomo rápidamente una sudadera celeste y un short deportivo negro.

Agarro todo eso y me dirijo nuevamente a la habitación que estaba antes.

Bueno, me pondré esto mientras tanto y bajaré en busca de mi bolso que parece el bolsillo de Doraemon, tiene todo, literal.

Yo creo que sí busco una máquina del tiempo el bolso la tiene.

Tomó una ducha rápida sin esperar que el agua caliente o algo así.

Así que congelándome el alma y los pies me pongo la ropa y cepillo mi cabello.

Veo mi reflejo en el espejo que está delante de mí y notó unas ojeras de muerte.

Tan JodidosWhere stories live. Discover now