Sour And Sweet | KookGi

Capítulo 18

N/A: No sé si estoy loca o que pero llore haciendo este capítulo, je. Minho es el de SKZ.

➪100🌟

Miércoles, 17 de febrero.

Yoongi se mantenía cabizbajo mientras el bullicio de la sala se oía lejano, miraba sus manos con atención porque si se distraía comenzaba a rasguñarse de manera inconsciente y lo que menos quería era desarrollar un tic.

Su madre y su hermano estaban cuatro filas enfrente de él, haciendo lo posible para castigar al conductor ebrio que chocó con su padre. Por sus mejillas resbalaron un par de lágrimas y se obligo a mirar hacia el frente al escuchar al juez preguntar.

–¿Traen algún registro médico del afectado?

El abogado que había contratado Namjoon asintió, sacando de una carpeta un par de papeles.

–Un certificado de defunción creo que es suficiente– dijo extendiéndole el documento.

El Juez lo ojeo con fingido interés y arqueo una ceja al terminar de hacerlo.

–¿Y que tiene que decir el demandante?– cuestionó y al instante el otro abogado se levantó.

–Todas las pruebas hasta este momento entregadas por estas personas, son completamente erróneas, me explico– aclaró su garganta –Mi cliente no es a quien ellos buscan, y creo que las pruebas entregadas por mí son lo suficiente claras. Cabe recalcar que a la hora del incidente mi cliente no estaba en ese lugar de los hechos.

–¡Porque huyó como un puto cobarde!– gritó Namjoon poniéndose de pie y soltando un gruñido. La mayoría en la sala estremeciéndose ante el tono de voz.

–¡Silencio!– ordenó el Juez –Si no tiene el permiso para hablar simplemente no lo hace, ya tuvieron el tiempo necesario para entregar pruebas al igual que el demandado. Continúe.

–No tengo en que más continuar su señoría– dijo el tipo con confianza, mirando del otro extremo como su colega se tallaba la cara frustrado.

–¡Objeción!– pidió.

–Denegada, habrá un recuento de los hechos y se hablara sobre el ultimátum, tomen un descanso de media hora. Recuerden que la familia demandante no puede dirigir palabra con el demandando hasta el final del juicio.

Yoongi se levantó rápidamente para caminar hacia su hermano que hablaba con su abogado, ambos se veían molestos y sulfurados.

–¿Por qué no lo han detenido?– preguntó con su voz mormada.

Namjoon le miró colocando sus manos en su cintura para poder tranquilizarse. Tenía que controlar a su Delta y no meterse en problemas.

–Me presento, mi nombre es Lee Minho– extendió su mano pero Yoongi no la tomó, volviendo a preguntar.

–¿Por qué no hacen nada? ¿Por qué el asegura que el maldito ese no chocó a mi padre?

–Tenemos la sospecha de que compraron al juez– informó Lee.

A Yoongi se le revolvió el estómago.

–Es una broma, ¿Verdad?– al ver que su hermano negaba el aire le comenzó a faltar –Necesito salir un momento.

–Te acompañó.

–Déjame solo, Namjoon– su hermano se quedó quieto al oírle hablar tan crudo. Yoongi casi corrió hasta salir fuera de la sala al pasillo, comenzó a caminar rumbo a la salida para poder tomar aire fresco porque el aroma de las personas que ahí rondaban lo estaban mareando.

Al estar fuera del edificio fue a una de las jardineras y se cuclilló en el suelo haciéndose pequeño.

«Respira» se ordenó a sí mismo «Respira, no puede ser tan malo. Todo saldra-»

–Debe de ser una mierda que por algo tan simple como el no tener dinero te hagan sufrir.

Yoongi sacó su cabeza de enmedio de sus brazos y miró hacia arriba a la persona que le hablaba.

–Tienes prohibido hablar conmigo– dijo desganado.

–Hablé contigo o no, tengo mi caso ganado– se mofó, manteniendo sus manos dentro de sus jeans y mirando a otro lado menos a Yoongi.

–Eres una mierda, me arrebataste a la persona que yo más amaba...

El hombre se sonrió con gracia al oírle. –Dile a tu hermano que quite los cargos y le daré la suma de dinero que me pida– ofreció.

Yoongi sin poder evitarlo se levantó por completo, mirándole con odio –Si tan seguro estas de salir intacto, ¿por qué harías algo así?

–Para que cuando pierdan no se vayan con las manos vacías, es un ganar-ganar.

–¡Matas a mi padre y piensas en comprarnos para que estemos felices! ¡Eres una escoria de ser humano despreciable!

–Deja de llorar– el alfa acercó su pulgar para limpiar las mejillas del omega pero Yoongi lo alejo con un manotazo –Los muertos solo existen en el pasado ¿Qué harás contra eso?

El rubio sin contestarle camino de regreso adentrándose al edificio, su cuerpo hirviendo en enojo y tristeza.

–Entonces matas a alguien y lo resuelves con dinero, ¿cuántas veces has cometido el mismo delito, Gawon? ¿Tres, cinco, ocho, veces?

–¿Quién eres?– el alfa frunció el ceño ante el chico azabache que le había dirigido la palabra.

–Soy solamente Jungkook– se alzó de hombros –¿Qué harás después de ganar el juicio? Seguro que ir a beber y a quitarle la vida a alguien más.

Gawon sonrió y aplaudió señalando a Jungkook. –¿Eres amigo de ese omega, o su enamorado? ¿Siempre andas detrás de él como un lobezno faldero?

Sin molestarse ante el intento de insulto, Jungkook comenzó a liberar su aroma con intensidad para poner al alfa en sumisión.

–¿Sabes quién es Jeon Junghae? Una vez intentaste contratarlo y pagarle para que ganara tu caso hace seis meses– negó lentamente haciendo un compás rápido de un leve chasquido con la punta de su lengua. Se acercó a Gawon y puso su mano en el hombro contrario, sonriendo en grande.

A lo lejos esto parecía ser una interacción amistosa, todo lo contrario para el alfa que gimió de dolor completamente inmóvil cuando Jungkook le apretó con fuerza exagerada. El alma del hombre pareció salir de su cuerpo al notar los ojos rojos de Jungkook brillar con intensidad.

Al parecer el omega se rodeaba de deltas.

–Si los Min pierden el caso y tú sales ileso de esto, me aseguraré de perseguirte cada día de tu vida y hacer que vivas lleno de miedo. Te llegaré por donde más te duele y haré que pierdas toda la herencia que tus padres te dejaron... Quedarás en la calle y eso solo será la punta del iceberg. Así que seamos diplomáticos– le libero –Entra por ti mismo a la cárcel si no quieres hacerlo más difícil, si tienes suerte quizás solo te den seis años en prisión.

Gawon se sostuvo el hombro con su mano libre al ver que Jungkook se daba la vuelta para irse.

–¡¿Me estas amenazando?! ¡¿A mí?!– le grito.

El Delta ladeó su cabeza y le sonrió autosuficiente.

–Yo jamás amenazo, y otra cosa... Jamás te le acerques de nuevo a Min Yoongi.

(...)

Yoongi respiro hondo y recargo su cabeza en el hombro de la persona a su lado derecho.

–Dijiste una vez que eres puntual en todo ¿por que está vez llegaste tarde?– preguntó, de reojo mirando como el Delta a su lado jugaba con los dedos de su manito.

–De hecho– Jungkook suspiro y movió un poco su cabeza para observar mejor al omega –Estuve sentado detrás de ti todo este tiempo– le dijo.

Sonriendo al ver que a Yoongi se le escapaban un par de lágrimas al oír al Juez marcar a Gawon como culpable y darle doce años de prisión por soborno también.